Estudiante muerto, futuro perdido

Extraordinaria noticia de ayer al mediodía, una Misión de Alto Nivel, enviada por el Secretario General de la OEA, Sr. José Miguel Insulza, se apersono en la sede de la OEA en Caracas, para escuchar a los huelguistas de hambre en la sede de la OEA en Caracas, significando una gran victoria para Julio Rivas y el resto de los huelguistas. Este era su pedido fundamental, después de los contactos y reuniones de rigor, una vez alcanzados los compromisos necesarios, la huelga de hambre de la OEA se levanto.

En paralelo a este evento nos enteramos de la noticia del asesinato del estudiante Jesús Ramírez de la Universidad Experimental del Táchira (UNET) en protesta reclamando derechos ciudadanos, en un presunto enfrentamiento con estudiantes de la Universidad Bolivariana (afectos al gobierno).

Los estudiantes universitarios son el capital más precioso, más valioso que tiene un país, pues a través de ellos se forjara un mejor futuro para todos, la universidad es la cuna de lo mejor que tiene Venezuela, representa a los futuros profesionales de múltiples áreas que permitirán avanzar hacia el desarrollo, el combate a la pobreza, el desarrollo tecnológico, el incremento de la actividad económica, el mejoramiento de la calidad de vida, en fin la clave del éxito para pasar de un país del tercer mundo a un país del primer mundo.

Cada vez que un estudiante muere, su familia se hunde en las tinieblas de la incertidumbre, sus compañeros sufren la pérdida de un amigo y la patria pierde una oportunidad para un futuro mejor. Ese es el caso de muchos estudiantes caídos en manos del hampa común, que aparecen en los titulares de la prensa prácticamente a diario. Pero si además de eso le agregamos el ingrediente de lo político ideológico, donde unos estudiantes son atacados a tiros por otros supuestos estudiantes, la situación pasa a otro nivel, mucho más peligroso para la estabilidad de la patria, se manifiesta por la impotencia de algunos, la cobardía de otros y la respuesta de la vanguardia política se hace imperiosa.


En la ciudad de Mérida hay enfrentamientos desde el mediodía de hoy entre estudiantes de la Universidad de Los Andes (ULA) y bandas armadas protegidas por la Policía Regional, son supuestos estudiantes de la UNEFA (Universidad Nacional Experimental de la Fuerza Armada), decimos bandas armadas, porque nos negamos a creer que estos individuos son estudiantes de la UNEFA. Aunque queda claro que salen de la sede universitaria controlada por el gobierno rojo, estamos seguros que no son estudiantes.

A los estudiantes demócratas que salen a protestar contra el régimen les decimos: la violencia solo engendra más violencia, aunque suene bastante comeflor, a regímenes como el nuestro hay que enfrentarlo con inteligencia, con organización, con compromiso. El gobierno rojo tiene once años tratando de dividir al país en dos bandos confrontados, los buenos revolucionarios y los que se oponen abiertamente, que somos traidores a la patria porque no nos sometemos a la ideología del Comandante y su proceso.


La respuesta ciudadana ha sido deslindarse de ambos sectores, ellos son la mayoría en este momento, los que no quieren saber de la violencia política, los que quieren un país en paz, los que quieren trabajar, progresar y atender a su familia. Esos son, los que las encuestas llaman los NI-NI. Gran logro del gobierno rojo pues con una minoría militante controlan y gobiernan al país.

Lamentamos la muerte de Jesús Ramírez, lamentaremos los asesinatos de cualquier ciudadano de la patria por las razones que sea, nos negamos a que nos cataloguen en un bando. Venezuela es una sola y llora a todos sus muertos.

Editorial del Equipo Productor