Misión “arrase con todo”

Editorial de veneconomia.com, 11/06/2011

El Gobierno ante su descomunal fracaso en materia habitacional creó un monstruo: la Misión Gran Vivienda Venezuela. Ésta le está sirviendo de excusa para arrasar con todo lo que encuentra a su paso.

Por ejemplo, para seguir manteniendo la esperanza en el cumplimiento de su promesa electoral de construir 2.000.000 de viviendas en seis años, siete veces más que las 284.000 construidas en los últimos 12 años, ha expropiado a granel terrenos urbanos, estacionamientos, edificios y casas, que eran propiedad privada de cientos de venezolanos.

No conforme con ello, ahora parece que la Gran Misión le va a servir de comodín para precarizar el ahorro de los ciudadanos. Ya le puso la mano al encaje legal que depositan obligatoriamente las entidades financieras en el Banco Central de Venezuela (BCV), para responder a los depositantes ante eventuales crisis de liquidez.

A principios de mayo, Hugo Chávez convocó a la banca, empresas constructoras, industriales y fábricas de materiales de construcción, tanto del sector público como privado, para que firmaran y se comprometieran a participar activamente para el cumplimiento de su Gran Misión Vivienda. En ese acto, el mandatario asomó la idea de que el encaje legal podría ser reducido entres dos y tres puntos para apoyar la Gran Misión. La orden fue acatada por el BCV y el encaje fue rebajado en tres puntos.

Sin embargo, la sorpresa más alarmante llega este viernes 10 de junio, con una información que trae El Universal: Los Bs.F.10 millardos que se liberaron de esta rebaja de tres puntos del encaje legal se manejarán con un “esquema” de fideicomiso creado por el Bandes, y donde intervendrán PDVSA, la banca privada y el BCV. Luego los fondos del encaje liberados terminarán siendo transferidos al Fondo Simón Bolívar. A cambio las entidades financieras recibirán unos certificados de depósitos emitidos por el Bandes.

La alarma surge entre otros puntos, por:

1) La falta de transparencia en la rendición de cuentas de todos los fondos públicos creados por Chávez.

2) La ausencia de contraloría que garantice el uso correcto de esos recursos.

3) No conforme con los malos precedentes que han demostrado los fondos creados por el Gobierno para el manejo de sus propios recursos, ahora pretende echarle mano a los recursos privados.

¿Se detendrá la sed de reales del Gobierno con rebajar sólo estos tres puntos? ¿O subirán sus apetencias con el encaje legal, como han venido creciendo con las reservas internacionales, desde que se le arrancó el primer millardito?

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