EFE 14 DE SEPTIEMBRE 2013
La
comunidad internacional celebró el acuerdo alcanzado en Ginebra entre Rusia y
Estados Unidos sobre el desmantelamiento del arsenal de armas químicas del
régimen del presidente sirio, Bachar al Asad
El secretario de Estado
estadounidense, John Kerry, y el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia,
Serguei Lavrov, acordaron que se apliquen "procedimientos extraordinarios
en el marco de la Convención Internacional para la Prohibición de Armas
Químicas para la rápida verificación de las armas químicas de Siria".
"Hemos acordado que los sirios deben dar a la Organización para la
Prohibición de Armas Químicas y a su personal un acceso inmediato y total para
inspeccionar todos los sitios de almacenamiento en el país", explicó
Kerry.
Según lo suscrito por Washington y
Moscú, el régimen sirio tendrá plazos mucho más cortos que los establecidos en
la Convención para la Prohibición de Armas Químicas para deshacerse de estas
armas de destrucción masiva. Así, la inspección de los lugares de
almacenamiento y producción que se declaren deberá haberse completado en
noviembre próximo y para ese mismo mes tendrán que haberse destruido ya los
equipamientos de producción y mezcla de sustancias tóxicas, según lo convenido
por Lavrov y Kerry. Igualmente, en un documento de principios anexo al acuerdo
se establece que "la eliminación completa de todo el material de armas
químicas y equipamiento deberá completarse en la primera mitad de 2014".
El presidente de Estados Unidos,
Barack Obama, celebró el acuerdo pero advirtió de que "si falla la
diplomacia, EE UU, está preparado para actuar". "Este marco
proporciona una oportunidad para la eliminación de las armas químicas de Siria
de un modo transparente, expeditivo y verificable, lo que podría poner fin a la
amenaza que estas armas representan no solo para el pueblo sirio, sino para la
región y el resto del mundo", aseguró Obama en un comunicado.
Por su parte, la jefa de la diplomacia
de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, confió en que el acuerdo
"allane el camino" para alcanzar una solución política al conflicto.
En parecidos términos se expresó el secretario general de Naciones Unidas, Ban
Ki-moon, quien expresó "su ferviente esperanza" de que el acuerdo
"allane el camino para una solución política" en Siria y aseguró que
la ONU se compromete a apoyar la aplicación del mismo.
El ministro británico de Asuntos
Exteriores, William Hague, recibió con satisfacción el acuerdo alcanzado en
Ginebra, que calificó de "significativo paso adelante", al tiempo que
pidió que se trabaje urgentemente para poner en marcha el plan sobre el control
de las armas. Hague indicó que el régimen de Damasco debe cumplir ahora con el
acuerdo y la comunidad internacional debe hacer todo lo posible para detener el
baño de sangre en Siria, "reuniendo a todas las partes para que alcancen
una solución política al conflicto". El Gobierno francés, por medio de su
ministro de Asuntos Exteriores, Laurent Fabius, consideró que el acuerdo es
"un avance importante" hacia la resolución del conflicto.
Fabius indicó que la reunión que
celebrará en París el próximo lunes con Kerry y Hague "permitirá hablar
del contenido" del acuerdo de Ginebra, "así como de las condiciones
de aprobación y de su aplicación". La canciller alemana, Angela Merkel,
manifestó, durante un acto de campaña electoral en Maguncia, que el acuerdo de
Ginebra aporta "un fragmento de esperanza", aunque advirtió de que a
las buenas palabras deben seguir ahora los "actos".
En un comunicado, el Gobierno español
expresó su satisfacción por el acuerdo y considera que debe traducirse en una
resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que "evite y castigue
futuros ataques". El ministro sirio de Reconciliación, Ali Haidar, afirmó
que los inspectores internacionales, que tendrán que supervisar el
desmantelamiento del arsenal químico de Siria, podrán acceder "fácilmente"
a las instalaciones.
"Creo que los inspectores
internacionales podrán hacer su trabajo, porque todas las instalaciones del
Gobierno no son solo seguras, sino también accesibles", dijo Haidar. Sin
embargo, el jefe del rebelde Ejército Libre Sirio (ELS), Salim Idris, rechazó
el acuerdo y aseguró que sus fuerzas continuarán su lucha contra el régimen.
En una rueda de prensa celebrada en
Estambul y difundida por las televisiones árabes, el líder rebelde se quejó de
que el plan presentado por Moscú para que Damasco deje sus armas químicas bajo
supervisión internacional no habla del pueblo sirio ni del armamento
convencional. "Es como si la sangre de los sirios fuera un puente para
destruir solo las armas químicas", se quejó Idris, quien pidió que
"hay que llevar a Al Asad ante los tribunales internacionales".
Les ruego mil disculpas, no quiero ser guerrerista, pero para mi antes que esto pueda llamarse acuerdo es más de la complicidad y connivencia internacional con los delincuentes. Ya el secretario de la Naciones Unidas habló sobre pruebas contundentes sobre la veracidad del ataque con agentes químicos de Al Assad contra la población siria, vimos fotos desgarrantes de niños, mujeres, hombres, etc., asesinados, qué más se quiere? Si las pruebas del delito de lesa humanidad están ahí, entonces que pasará con Al Assad y sus cómplices? Pues vistas como van las cosas, no pasará nada, la rusa mafiosa y los EE UU sin acompañamiento internacional (culillo) se tomarán su tiempo y la dictadura siria se afianzará aun más con el apoyo irrestricto de la rusia putiniana y mafiosa. Así se está manejando esta grave crisis.
ResponderEliminarLa solución, Al Assad y sus cómplices deben ser presentados ante el Tribunal Internacional de Justicia para que respondan por sus delitos de lesa humanidad y ya. Los sirios se merecen una democracia a su propio estilo y a su propio modo.