Por Ruben Contreras, 13/10/2016
Obviamente que lo que acontece
actualmente en Venezuela es una situación fuera de serie, pudiéramos decir
digna de Ripley, aunque en realidad no nos sorprende, porque desde hace 17 años,
de gobierno con militares y comunistas, pudiéramos decir que nuestro país entro
en el mundo del realismo mágico, ya que cualquier acción realizada por quienes
destruyen al país, está dentro de sus planes que tienen como objetivo la perpetuación
en el poder.
El déspota de Nicolás Madura, quien ejerce la primera magistratura
en este país llamado Venezuela, ha seguido al pie de la letra el legado del felón
de Sabaneta, quien según Asdrúbal
Aguiar, en su excepcional libro ‘Historia de la Inconstitucionalidad en
Venezuela” le dio 278 golpes de estado a la constitución del país, ya que
cuando perdió la enmienda en noviembre del 2007 y fue rechazada su propuesta de
la geometría del poder, el hizo caso omiso a ese pueblo que voto en contra e
inmediatamente dijo que no le iba a quitar una coma a su propuesta, razón por
la cual creó el ministerio de las comunas y autorizo la creación de los
consejos comunales, mediante una ley especial, la cual carece de base
constitucional.
Es así, que ahora tenemos, entre
tantos desaguisados y tropelías, funcionando unos consejos comunales
paralelamente a la acción constitucional que deben desarrollarlos órganos del
estado como las alcaldías, quienes representan el nivel más cercano de ese
pueblo, que clama por el funcionamiento de los servicios públicos.
Hoy la situación de Venezuela
es complicada porque Maduro está demostrando que no acepta la elemental regla
de oro de la democracia, como es la
de la cohabitación con los demás poderes,
tal como lo señalo el Barón de Montesquieu
en su libro El Espíritu de Las Leyes, ni el compartir la toma de decisiones con
otras instancias, como es lo que está ocurriendoen una demostración dictatorial
o despótica, cuando le está negando sus atribuciones, que el pueblo soberano y
consciente de sus responsabilidades le dio a los nuevos diputados el mandato de
legislar y de controlar los desaguisados y cantos de gallos a medianoche que se
autorizaban hasta aquel 6 de diciembre
de 2015.
Decimos que Maduro es un
Dictador debido a que desde el 30 de diciembre de 2015, la sala constitucional
del tribunal supremo de injusticia ha
emitido 29 sentencias contra el poder
legislativo, limitando y desconociendo su autoridad primigenia, dado que los únicos
poderes del estado que son electos mediante el sufragio son la presidencia de
la república y el parlamento, gobernadores y legisladores regionales, así como
alcaldes y concejales y ya vemos como este mamotreto de gobierno, cambia
gobernadores como los de Anzoátegui y Portuguesa sin fundamento jurídico y
constitucional y desde el psuv, se asaltan alcaldías como la de Maturín y
otras.
Esas sentencias exprés de ese
impúdico tribunal, son atentatorias contra el poder legislativo y por ende
contra la mayoría del pueblo venezolano que voto mayoritariamente por un
cambio, cuestión que la peste militar detentante del poder se niega aceptar, ya
que si fueran diligentes y quisieran solucionar los problemas del país, ya deberían
haber emitido el pronunciamiento acerca de la legalidad de la proclamación
hecha por el consejo nacional electoral, en relación a los diputados electos
por el pueblo amazonense, pero no les conviene, ya que con esos tres diputados se
faculta al legislativo para tomar decisiones trascendentes, en la cuales
pudieran sentirse afectados esa banda de forajidos dirigidos por Maduro.
Juristas venezolanos,
estudiosos de la constitucionalidad en nuestro país han señalado los desaguisados
y tropelías cometidas por esa banda delincuencial apoderada del tribunal
supremo y algunos como Vicente Haro, Blanca Rosa Mármol de León, Román Duque
Corredor, Carlos Arteaga y Gustavo Linares Benzo, después de analizar la
sentencia 814, emitida el 11 de octubre
por dicho tribunal al filo de la medianoche autorizando al inmaduro a presentar
ante la sala inconstitucional un decreto ley como presupuesto de la república, han demostrado la flagrante violación de la constitución
y han señalado específicamente los artículos 187, 311,312,313,314 y 315 y han
enfatizado también la violación de la Ley Contra la Corrupción, la cual es la
que previene y señala los delitos contra el patrimonio público en sus artículos
58,59 y 60.
Maduro es un dictador dado que
con la aprobación del decreto de emergencia económica está actuando fuera de la legalidad, ya que fue
aprobado por dicho tribunal y no por el legislativo, que es a quien le
corresponde su aprobación, y de acuerdo a la constitución, este decreto solo
puede ser presentado una vez por año y el inmaduro ya lleva seis prorrogas de
dicho decreto, cuestión que demuestra su ilegalidad.
Ahora, como es que el inmaduro
de acuerdo a esa sentencia exprés 814 del 11 de octubre, tiene 5 días para
presentar dicho decreto sin estudiar las variables económicas del país, porque
estas las analizan los representantes del soberano, del poder popular electo
libérrimamente por el pueblo, como las va a analizar dicho tribunal, si hasta
ahora el banco central en otras de sus arbitrariedades no ha emitido los
índices ni análisis del comportamiento económico y financiero del país,
correspondientes al 2015 y 2016, entonces en que se van a basar para estudiar y
analizar el presupuesto de la república. Además quien va a estudiar la
correspondiente ley de endeudamiento público de la nación, correspondiente al
presupuesto del 2017. Otra contradicción y flagrancia más de esta Peste Militar
en él, poder.
El caso es que nuestro país,
con una caterva de dictadores e impúdicos gobernantes como Jose Tadeo Monagas, Julián
Castro, Antonio Guzman Blanco, Joaquin Crespo, Cipriano Castro, Juan Vicente Gómez
y Marcos Evangelista PérezJiménez, respetaron la forma constitucional, elegían
su congreso y este les aprobaba su presupuesto, pero este nuevo dictador,
seguidor del legado de Hugo Chávez, actúa de la manera más soez y prosaica,
desconociendo la realidad del país que ya no lo soporta.
Ante esto la prioridad que
tenemos los demócratas es salir del inmaduro. Ya he manifestado que la Mesa de
la Unidad Democrática ha sido muy paciente en su accionar, preparando
estrategias para lograr una vía constitucional que permita salir del déspota,
pero la peste militar que destruye a Venezuela está consciente que todos los
organismos internacionales le tienen la mira puesta y entienden que al salir
del poder van a tener que rendir cuentas a la justicia venezolana y a la
internacional, porque ese matrimonio con las
FARC, para amparar el tránsito y distribución de drogas es algo normal
para este régimen, así como los acuerdos y venta de uranio a Irán desconociendo
los protocolos de la ONU, entre tantas violaciones a los acuerdos
internacionales, los tienen contra la pared, razón por la cual la MUD, debe ser
más incisiva porque el pueblo llano, ese que no consigue medicinas, repuestos
para sus enseres y vehículos, alimentos y hurga en los contenedores de basura,
los maestros y trabajadores en general que no disfrutan de un salario que le permita accesar a los bienes básicos, está
esperando un llamado para demostrar la fuerza del pueblo unido que quiere un
cambio en conducción del país.
Los venezolanos estamos a
dispuestos a salir de estos delincuentes que asaltaron el poder en Venezuela a
través de tantas elecciones y ahora como se murió el encantador de serpientes y
no hay quien tenga la fuerza para realizar los cantos de sirena, aparte del bajón
de los precios del petróleo que compraba conciencia, perdieron la empatía con el pueblo y quieren la
perpetuidad montados en las bayonetas, sin realizar ni el revocatorio ni las
elecciones regionales, pero no todos los
militares forman parte de esta peste y los familiares de estos les reclaman los
malos momentos que se viven en común, por lo que la olla de presión está a punto
de explotar, por lo tanto lo que tenemos que hacer es avivar la llama de la
candela para salir de esta infamia y despejar el horizonte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico