Lester Toledo 04 de junio de 2021
@LesterToledo
De
Vladimir Padrino López y de Nicolás Maduro, no podíamos esperar otra cosa que
un show, un show con un nombre bien rimbombante como “Operación Águila
Centenaria” para simular un presunto rescate, el de los ocho soldados
venezolanos secuestrados desde el pasado 23 de abril.
Y
decimos “simular” y hablamos de “presunto rescate”, porque lo que en verdad
hubo en Apure fue una entrega, la disidencia de las FARC, a cambio de quedarse
con el territorio de Apure para operar a sus anchas y quién sabe qué otras
condiciones, decidieron dejar en libertad a los ocho jóvenes, pero allí no hubo
enfrentamiento, ni armas de por medio, ni un disparo.
Hubo
una entrega concertada, y la tal operación rescate fue más bien una operación
taxi, solo que el taxi fue un helicóptero de la Fuerza Armada Bolivariana que
usaron para transportar a los jóvenes, a quienes fotografiaron a bordo de la
aeronave muy sonrientes y con chucherías en mano.
En
imágenes difundidas por los medios del régimen y por sus redes, apareció
Vladimir Padrino, con su pecho hinchado y sus brazos abiertos, esperando en
tierra a los jóvenes que habían sido secuestrados en medio de una emboscada de
las disidencias de las FARC en el sector La Capilla del estado Apure, cuando
estos se disponían a desmantelar un laboratorio de droga que operaba en la
franja venezolana de la frontera con Colombia.
Pasaron
días de su secuestro, solo las ONG Fundaredes y Provea alzaron sus voces para
revelar los acontecido y denunciar el secuestro de los ocho jóvenes. No se
produjo un oportuno pronunciamiento, la orden del régimen era silenciar los que
pasaba en la frontera sur del país. Y cuando finalmente Padrino López habló, lo
hizo forzado por la divulgación de un testimonio de vida de los jóvenes que
había sido entregado a la Cruz Roja Internacional.
El
mundo estaba conmovido por el destino de estos ocho jóvenes, mientras el
régimen guardaba el más ensordecedor y cómplice silencio.
Según
la versión del régimen y el show de Padrino, los militares secuestrados se
encontraban en un sector cercano a La Victoria, estado Apure, zona donde han
sido intensos los combates entre las fuerzas venezolanas y los grupos
irregulares colombianos. “Luego de ser extraídos del sitio, fueron llevados a
la base Buenaventura Vivas en el estado Táchira, donde fueron recibidos por las
máximas autoridades castrenses del país”, reseñan los medios rojos.
Pero
la gran verdad la lograron dilucidar un grupo de periodistas venezolanos,
quienes con gran valentía y seriedad se atrevieron a abordar el tema.
Estos,
en contraposición al show de Padrino, sostienen que justo un día antes de la
liberación de los militares secuestrados, las Fuerzas Armadas venezolanas se
habrían retirado de Apure, esto como parte de los acuerdos de cese al fuego con
el grupo guerrillero colombiano. Incluso se habla de la vinculación de la
muerte de Jesús Santrich como parte del trato.
Es
decir, que luego de más de dos meses de conflicto armado entre grupos
guerrilleros, identificados como disidencias de las Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombia (FARC-EP), y el régimen venezolano, crisis que ha
derivó en más de 5000 desplazados venezolanos a territorio colombiano, miles de
hectáreas destruidas,16 militares asesinados, ocho secuestrados y otros
desaparecidos, el supuestamente poderoso Ministro de la Defensa, siguiendo
instrucciones de Nicolás Maduro, decide de buenas a primeras, dejarle el
territorio libre a los grupos irregulares colombianos, para que estos continúen
sus operaciones ilícitas en nuestro territorio.
Y
mientras Vladimir Padrino montaba su show con helicóptero incluido, en Apure,
la guerrilla celebraba la retirada de los uniformados venezolanos.
Entonces
Vladimir ¿dónde está el triunfo de tu fulana operación Águila Centenaria?
¿Dónde quedó aquello de la defensa de la soberanía?
¿Dónde
está el poderío y la supremacía de las Fuerzas Armadas venezolanas si tuvieron
que doblegarse ante grupos guerrilleros en Apure, si no han podido con los
irregulares instalados en el Zulia, en Táchira y con las mafias de Sucre, y
menos han podido con las bandas de la Cota 905?
¿Qué
más hondo puedes hundir a nuestras Fuerzas Armadas?
Todo
nos lleva a seguir preguntando, ¿qué más hay tras tu show Vladimir?
¿Acaso
el pacto de la liberación de los secuestrados implicará la instauración oficial
de territorios liberados para las FARC y el ELN en Venezuela?
Son
muchas preguntas que tú y tu jefe están en la obligación de respondernos, tarde
o temprano, a todos los venezolanos.
Gracias
a Dios estos ocho jóvenes están ya reunidos con su familia, pero quién responde
por los muertos, los desplazados y los desaparecidos en medio de este
conflicto. No más show.
Lester
Toledo
@LesterToledo
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