Páginas

jueves, 14 de noviembre de 2013

"El político utiliza las redes sociales para mantenerse en el poder", @YoaniSanchez


Por Cristina Sanchez, 13/11/2013

  • "En España se han derrumbado los referentes y siento que se está creando el caldo de cultivo que puede degenerar en autoritarismo”
  • "Es contradictorio que Obama hiciera una campaña tan volcada en las redes y haya protagonizado uno de los mayores escándalos sobre espionaje en la Red"
  • "En Cuba nos están escuchando... para denigrarnos, pero ya es un paso: nos tienen en cuenta"
  • La filóloga, bloguera y periodista cubana participa hoy en Madrid en las Jornadas sobre Democracia 2.0 organizadas por dontknow.net

Fue una de las cien personas más influyentes en el mundo en 2008 según Time. Si la influencia tiene que ver con las redes sociales, la revista debería haber prolongado su permanencia en la lista a esta cubana, filóloga, que, desde La Habana se emperra en desarrollar su pasión: el “oficio de ser incómodo” –como define al periodismo- y en el fomento de las nuevas tecnologías como herramienta de cambio en Cuba. En ellas se maneja como pez en el agua a través de redes sociales como Twitter, donde cuenta con más de medio millón de seguidores, o de sus blogs como el premiado Generación Y, traducido a 17 idiomas, por el que recibió el Ortega y Gasset de periodismo. Yoani Sánchez está hoy en Madrid, invitada por Dontknow.net, para participar en las Jornadas sobre Democracia 2.0 en las que debatirá, junto a expertos como Juan Verde, codirector de la campaña de reelección de Obama, sobre la participación ciudadana a través de las tecnologías sociales.

¿Qué es la Democracia 2.0?
Más que la democracia 2.0 como concepto final o acabado, lo interesante es cómo las nuevas tecnologías ayudan a democratizar; tanto para enderezar democracias torcidas -como es el caso de tantos países- como para formar democracias en las que los ciudadanos desconocen ese modelo. Entiendo la Democracia 2.0 como la participación a partir de la tecnología; pero no es sólo el click, el “me gusta” o el retuit, sino la presencia en el ciberespacio que realmente influye en la vida real, en los políticos y en la toma de decisiones.
Pero ¿existe? ¿Escucha el político al ciudadano a través de las nuevas tecnologías?
Los políticos son individuos que se ponen de vez en cuanto el rostro de quien quiere complacer a sus electores y-como quieren mantener la silla- está claro que les conviene escuchar a los ciudadanos. De ahí, a que eso se convierta en un marco jurídico... va un largo tramo. Pero sí; estamos viviendo los inicios de cómo puede ser la participación a través de las redes sociales, aunque los políticos insistan en principio en la vieja usanza y subestimen las nuevas herramientas.
En el caso particular de Cuba, increíblemente nos están escuchando… para denigrarnos, para hacernos la competencia con una contravoz oficial, pero ya es un paso: nos tienen en cuenta

Los gobiernos que han presumido de contar con los ciudadanos a través de los llamados Open Goverment ¿son de verdad gobiernos abiertos a la participación ciudadana? Hablo, por ejemplo, de la Administración Obama.
En el caso particular de Obama es bastante contradictorio que haya hecho una campaña tan volcada en las redes, aparentemente tan transparente para los usuarios de la Red y  sin embargo haya protagonizado uno de los escándalos más sonados de espionaje, de control de las redes y los contenidos virtuales de muchos ciudadanos. Los políticos están dispuestos a usar estas herramientas para ganar apoyos, para conservar el poder, pero cuando la herramienta misma les está acotando, molestando, poniéndoles límites, entonces la descartan y vuelven al bureau. Es el problema principal.
Ahora bien, siempre que un político se atreve a pasar la delgada línea roja entre el mundo concreto y una presencia virtual, se hace más vulnerable hacia la ciudadanía. Por mucho que quiera cerrar la cuenta en Twitter, desconectar en Facebook, poner el cartel de “ocupado” en Skype, ya ha emprendido un camino en el que está más a la mano, a golpe de un tuit; ya no puede decir que no escuchó, que no sabía, que no se había enterado o que no conocía la opinión de la población.
¿Existe algún modelo en el mundo de Democracia 2.0 o, al menos, que se acerque a lo que debería ser?
No hay patrones a seguir. Estamos en los inicios y se están dando pasos adelante y pasos atrás. Yo he seguido durante bastante tiempo al alcalde de Jun; me parece muy simpático lo que hace. Pero también he conocido casos desfavorables de políticos en Twitter  que han cerrado sus cuentas por supuestas amenazas y otros, como el de Fidel Castro en mi país, que tiene una cuenta en la que habla de sí mismo en tercera persona.
No, no me quedaría con un modelo político pero sí en el caso de la ciudadanía. Un ejemplo es la sociedad venezolana. Frente a un gobierno que está cerrando puertas en una cruzada contra la libertad de prensa o las posiciones divergentes, los venezolanos están dando una batalla en la web ejemplar. No es Democracia 2.0 porque no está asumido por el poder, pero sí es ‘Civismo 2.0’
¿Y España? ¿Por qué teniendo las posibilidades de cercanía al político que ofrecen las redes, cada vez es mayor la desafección ciudadana hacia la política?
No creo que esté tan vinculado a que la ciudadanía no quiera responsabilizarse en la vida real con lo que dice en el mundo virtual. Lo que ocurre es que ustedes están en un punto en el que las columnas, los referentes, se han derrumbado. Y eso es muy peligroso porque siento que se está creando el caldo de cultivo que puede degenerar en autoritarismo. Sé cómo funciona y cuando dejo de creer en todo puede ser muy peligroso para una sociedad.
Y ese descreimiento se percibe. La gente da el click pero en el corazón siente que eso no va a cambiar nada. La gente se une a través de etiquetas, de Facebook, pero en el fondo piensa “esto no va a cambiar nada; ellos van a seguir gobernando”. Eso no tiene ninguna efectividad.
Cuba: a pesar del control que pueda ejercer el Gobierno  sobre internet ¿se ha producido algún tipo de cambio social con la generalización de las redes?
Sí. Uno de los cambios más evidentes que yo percibo es que el Gobierno ha tenido que hablar de temas que antes jamás hubiera mencionado. La población se entera a través de estos mecanismos y si el poder no habla se queda “como el Rey está desnudo”; todo el mundo habla de lo mismo y el poder no habla. Incluso la prensa oficial ha tenido que moverse hacia áreas más críticas para competir con la tuitesfera y la blogospera alternativas. Es un pequeño cambio, pero es un cambio
Te puedo asegurar que ha habido tuits en mi país que han marcado decisiones políticas. Y pongo Twitter como ejemplo porque nosotros tuiteamos sin acceso a internet, por SMS. Esa característica técnica de no necesitar internet para actualizar ha convertido Twitter en una herramienta poderosísima.
Ahora bien: yo soy una apasionada de las nuevas tecnologías pero tampoco soy ciega. Las tecnologías no tienen ética. Una grabadora no es buena ni mala, tomará la ética de quien la usa. Y la tecnología puede servir para liberar pero también para reprimir. En mi país, el gobierno utiliza las redes para vigilarnos, graba nuestras conversaciones, tiene sus soldados en la Red. Existe la Democracia 2.0, pero la Represión 2.0 también existe.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico