Prensa UNT 18 de diciembre de 2014
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El diputado a la Asamblea Nacional Carlos
Ramos de Un Nuevo Tiempo, introdujo un documento ante la Vice presidencia de la
República Bolivariana de Venezuela, donde exige al gobierno devolver las
tierras que expropió o intervino a los productores del Sur del Lago, tanto del
Zulia como de Mérida.
Recordó el diputado Ramos, que el 17 de
diciembre de 2010 el presidente Chávez intervino 47 fundos de toda la zona Sur
del lago de Maracaibo y de los cuales, a esta fecha, algunos han sido devueltos
a sus dueños. Mientras que seis fincas de Mérida, ubicadas en los Municipios
Andrés Bello, Obispo Ramos de Lora y Alberto Adriani, todavía siguen en manos
de personas que no trabajan la tierra y se encuentran en total abandono o
funcionan a medias.
“Algunas de estas fincas tienen cadena
titulativa, donde se demuestra que son propiedad privada desde el año 1930,
otras han sido fundadas hace 50 años. Ninguna de ellas en este momento está
funcionando. Por ejemplo hay unas donde la producción de leche de búfala que
era de 8 litros diarios, acabaron con las búfalas, solo dejaron algunas y en
este momento se producen dos litros.
Las que producían 2400 pesadas de
plátano semanales, cada pesada son 300 kilos, hoy en día solo se está
produciendo 40 pesadas. En otras tierras han destruido toda su infraestructura,
las cercas los espacios donde reposan los animales y las casas”.
Destacó que el gobierno en vez de
reforzar la producción de alimentos la ha disminuido con esta política errónea
de expropiación, que lo que ha traído al país es mayor escasez de alimentos.
Agregó que estas tierras del sur del Lago son muy productivas, de las mejores
del mundo, comprobado técnica y científicamente.
“Está comprobado que en el 2013 se
importaron menos alimentos que en el 2012, en el 2014 menos que en el 2013. Las
expectativas son que en el 2015 se importaran menos alimentos que en el 2014,
todo por la disminución progresiva de ingresos fiscales. De manera que se
incrementará aún más la escasez de alimentos. Lo correcto es reforzar el plan
alimentario con producción venezolana, pero devolviendo las tierras a sus
dueños, quienes verdaderamente tiene vocación agrícola y conocen del trabajo
del campo”.
Indicó finalmente que además de
entregarles las tierras a sus dueños, productores y trabajadores del campo,
deben ser indemnizados, resarcir el daño que les ocasionó el gobierno con su
política de intervención y expropiación. Así como darle facilidades para que
puedan recuperar la productividad de las fincas a través de créditos.
Prensa Un Nuevo Tiempo
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