Páginas

lunes, 21 de diciembre de 2009

El cántaro, la fuente y las relaciones Colombia-Venezuela


Tanto va el cántaro a la fuente hasta que un día se rompe, adagio popular que describe asertivamente las tensas relaciones entre Colombia y Venezuela.

Los últimos meses han estado llenos de agresiones verbales entre los gobiernos de ambos países, nos resulta evidente que no existe la posibilidad de un dialogo constructivo entre las partes, la diplomacia como ha sido costumbre para el gobierno de Hugo Chávez es la diplomacia de micrófonos, la diplomacia a través de los medios de comunicación. Todos sabemos que está es una manera muy mala y con consecuencias impredecibles de llevar adelante las relaciones internacionales y que no contribuye a la resolución de conflictos bilaterales.

El gobierno venezolano no admite el acuerdo firmado entre Colombia y USA sobre el uso de siete bases militares, por considerarlo que atenta contra su seguridad nacional; el gobierno colombiano por su parte no admite la intromisión de Venezuela en sus asuntos internos soberanos, defendiendo su derecho a la firma del acuerdo con el argumento de la lucha contra la violencia guerrillera y la violencia del narcotráfico.

Las cosas y los hechos están escalando el conflicto, Venezuela mueve tropas a la frontera y refuerza los campamentos y las bases militares. Colombia crea nuevos contingentes armados y los desplaza a la frontera, Venezuela cierra parcialmente la frontera, disminuyendo el comercio bilateral de manera alarmante, Colombia acusa a su contraparte de embargo económico. Colombia le corta el gas a Venezuela que procedía de la Goajira colombiana. Venezuela decide dinamitar pasos fronterizos ilegales, que han estado allí por decenas de años. Colombia lo califica de un atentado contra los derechos humanos de las comunidades fronterizas que los utilizaban. Ambas naciones han iniciado una escalada armamentista de grandes proporciones que afectará de manera importante sus presupuestos nacionales. Ayer Venezuela acusa a Colombia de usar aviones no tripulados para espionaje de sus instalaciones militares, Colombia refuta tal afirmación y le dice en un tono bastante despectivo que las fuerzas militares venezolanas confundieron el trineo de papa Noel (Santa Claus) con aviones espía.

Ante esta cadena de acontecimientos, nos vemos en la obligación de fijar posición.

1.No estamos de acuerdo bajo ninguna premisa a la posibilidad de un enfrentamiento bélico entre ambos países. Nos sentimos profundamente preocupados ante esta posibilidad y hacemos un llamamiento a la paz.

2.No estamos de acuerdo con el documento firmado entre Colombia y USA para el uso de bases militares colombianas por parte de militares estadounidenses, sin embargo reconocemos el derecho de Colombia a la firma del acuerdo, respetando el principio de la no intervención en los asuntos internos de otros países, pero pedimos las garantías necesarias y suficientes para evitar posibles escenarios de agresiones hacia Venezuela.

3.Cuestionamos la diplomacia de micrófonos, deben cesar las declaraciones agresivas, despectivas y ofensivas, vengan de funcionarios colombianos o venezolanos. Pedimos la inmediata y urgente intervención de la Organización de Estados Americanos, para que se avoque a establecer una misión de mediación ó de negociación entre ambos países, en procura de sentar en una mesa a representantes de ambos gobiernos.

4.Es nuestra consideración que está crisis ha sido generada por los gobiernos de ambos países, en especial por las diferencias existentes entre sus Presidentes. A los pueblos venezolanos y colombianos nos unen profundos lazos históricos, familiares, sociales y económicos y no estamos dispuestos a avalar un conflicto armado.

5.No aceptamos bajo ningún concepto la intromisión de agentes foráneos en los asuntos internos de Venezuela, por lo tanto le pedimos a nuestro gobierno que le declare la guerra a todos los grupos irregulares que habitan y coexisten en nuestro territorio, hablamos de Paramilitares sean de las Autodefensas, Aguilas Negras o cualquier otro, hablamos de la guerrilla colombiana sean de las FARC ó del ELN, hablamos del hampa narcotraficante organizada. Así mismo solicitamos al gobierno venezolano que retire de manera inmediata a las brigadas y contingentes cubanos, que se han inmiscuido en nuestros asuntos internos, por considerarlos un ejército de invasión permitido y financiado por el Ejecutivo Nacional.

Tanto va el cántaro a la fuente hasta que un día se rompe, todo parece indicar que ha estado a punto de romperse en varias oportunidades, la cuestión es quien será el primero en agredir y que excusas va a utilizar para sustentar su agresión.

Editorial del Equipo Productor

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico