Páginas

viernes, 19 de septiembre de 2014

Explotados o no explotados, he allí el dilema, @LissetteCGA



(La saga de los "schmoo" de Al Capp fue publicada a partir de 1948 y suele ser utilizada por Erik Olin Wright para ilustrar el concepto de explotación. Vean el final de su página web)

Por Lissette González, 17/09/2014

Uno de los conceptos más controversiales en la obra de Marx es el de explotación. Si bien la teoría económica se ha ocupado de refutar con éxito la teoría del valor-trabajo y, por consiguiente, la posibilidad de que el patrono extraiga plusvalía de sus empleados, la idea de explotación sigue presente en el pensamiento político de izquierda. Desde el punto de vista teórico, la cuestión está aun vigente: ¿hay una relación causal entre la riqueza de unos y la pobreza de otros? Y esta pregunta no solo tiene implicaciones teóricas; las alternativas de intervención sobre la pobreza y la desigualdad están en buena medida relacionadas con la concepción subyacente sobre este tema. La redistribución o, incluso, la nacionalización de empresas solo tendría sentido si partimos del supuesto de que pobreza y riqueza están relacionadas. ¿Es el caso?

Göran Therborn en su libro “The killing fields of inequality” (2013) plantea la existencia de cuatro mecanismos distintos de producción de la desigualdad (cuyas dimensiones ya presentamos en un post anterior). Estos mecanismos están organizados en torno a un eje, en el que un polo se plantea que no hay relación directa que explique la desigualdad entre dos actores A y B, mientras que en el polo opuesto se parte de la relación entre los resultados obtenidos por estos mismos actores. En el primer polo estaría un mecanismo que llama distanciamiento (distanciation) y en el polo opuesto se encontraría el concepto deexplotación.

Con distanciamiento se refiere a los diversos procesos que consolidan y amplían la distancia inicial entre los actores A y B: incluye los elementos que acentúan las ventajas de unos; por ejemplo, padres con más recursos además tienen mayor interés en la educación de sus hijos, los motivan más, etc. Pero también incluye aquellos procesos que acentúan las desventajas de los más pobres; menor nutrición de los niños incide en un peor desempeño académico, en estos grupos hay menos información sobre oportunidades de estudio o trabajo, entre otras. De forma tal que el distanciamiento no implica una relación causal directa entre las situaciones resultantes para ambos grupos pero sí incluye elementos que permiten explicar la diferencia entre ellos.

Therborn define la explotación como la apropiación asimétrica de los frutos del trabajo humano. Sin embargo problematiza el concepto no solo por la ya mencionada crítica a la teoría del valor marxista, sino especialmente por la alta carga valorativa implícita en este concepto que ha restringido su uso como variable en el análisis económico. Si bien esto es cierto, me parece que el autor ha dejado de lado en este análisis el importante aporte de Erik Olin Wright en la definición de explotación y su aplicación al mercado de trabajo contemporáneo, donde no solo la propiedad de los medios de producción es fuente de relaciones de explotación (Wright, 1997).

Entre los polos definidos por estos mecanismos de producción de la desigualdad, Therborn propone dos mecanismos adicionales en los que existe un nivel intermedio de relación entre los actores. El primero de ellos es jerarquización, que refiere a las desigualdades producto de formas institucionalizadas de ordenación (relaciones de autoridad en las organizaciones, jerarquías basadas en la raza, etnia o género). Por último, el concepto de exclusión refiere a la posibilidad de unos grupos para impedir el avance o acceso a los recursos de otros mediante diversas prácticas como la existencia de barreras de ingreso o membresía, estigmatización de grupos de la población e, incluso, desigual acceso a los derechos de ciudadanía.

Por último, el autor plantea que para cada uno de estos mecanismos de producción de la desigualdad existe un mecanismo de igualación: acercamiento (políticas de acción afirmativa para disminución de las diferencias), inclusión (eliminar barreras y conceder derechos), democratización (disminuir diferencias de poder/derechos asociadas a las jerarquías laborales) y redistribución del ingreso (para disminuir asimetrías en el acceso a los productos del trabajo). Como ven, las políticas pertinentes y necesarias en cada caso pasan por una definición inicial de cuál mecanismo de desigualdad existe en cada sociedad y momento histórico dado. Sería interesante discutir cuáles de estos mecanismos son los que tienen mayor incidencia en la desigualdad de la sociedad venezolana hoy.

Referencias bibliográficas
Therborn, Göran (2013): The Killing Fields of Inequality, Cambridge: Polity Press.
Wright, Erik Olin (1997): Class counts: comparative studies in class analysis, Cambridge: Cambridge University Press


Lissette González
@LissetteCGA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico