Por Reynaldo Mozo
“Fue como hace cuatro meses.
Me paré, fui a abrir el chorro para bañarme y el agua parecía de cloaca.
Todavía esto sucede pero en las mañanas”, comentó Elena Toledo habitante de
Camatagua. En el municipio homónimo del sur del estado Aragua, a pesar de su cercanía
con una de las principales represas del país, sus habitantes denuncian
constantes racionamientos de agua y aseguran que el líquido que sale por las
tuberías tiene mal olor y es de color negro.
El embalse de Camatagua es la
principal fuente de abastecimiento de agua de la Gran Caracas, sus reservas de
suministro normal es de aproximadamente 1.316 días. En la actualidad y según la
página web de Hidrocapital, a la represa le quedan 408 días de provisión del
vital líquido.
La señora Toledo asegura que tiene
que esperar como una hora para que el agua salga sin mal olor. “La utilizo solo
para bañarme y hacer los oficios de la casa; para el consumo, compro el agua
mineral que cuesta 200 bolos”.
La represa de Camatagua ha
sido afectada por la laguna de Taguaguai, que es un lago contaminado que sirve
para regar las parcelas, (terreno para la siembra). Los residuos de este lago
caen directamente al rio Guárico, que es el principal afluente de agua del
embalse, explicó Daniel Nuñez, quién habita en el poblado desde hace 45 años.
Aseguró que a pesar de la cercanía que tiene el pueblo con el embalse, algunos
sectores sufren contantes racionamientos de agua.
Así salió el agua el pasado 22
de enero en el sector Las Uvitas de Camatagua.
La planta de tratamiento de agua
para los habitantes del poblado tiene más de 35 años construida y fue
hecha para beneficiar a 2.000 personas pero la población actual del municipio
es de 16 mil 627 habitantes.
El pueblo de Camatagua está
conformado por 35 sectores y en la mayoría de ellos el agua sale con un olor
putrefacto y un color marrón. Esto es más común en las mañanas,
asegura Nuñez.
Las comunidades de Ocumarito,
La Candelaria, El Marqués y La Primavera, el agua es suministrada un día sí y
otro no. Estos racionamientos tienen más de tres meses de estarse realizando,
“hay fines de semanas en los que no hay agua”, indicó Nuñez.
“Este pueblo es muy sumiso
-dice- y aquí nadie protesta por nada. La alcaldesa sabe el problema del agua
pero ella no ha encontrado la solución”. En la comunidad mucha gente
hierve el agua, puesto que no pueden pagar 200 bolívares diarios de un garrafón
de 18 litros de agua mineral, que es el precio promedio al que lo consiguen.
Nuñez señala que el
recientemente electo diputado Simón Calzadilla, en su recorrido de campaña,
conoció el problema que afecta a la comunidad y espera que éste los recuerde
durante su gestión.
Juan Castillo tiene 40 años, y
aunque es de Caracas, hace 5 años que vive en el sector Las Uvitas del pueblo
de Camatagua, él asegura que el 22 de enero de este año, en la casa de su
hermana, que vive a dos casas de la de él, el agua salió como petróleo.
Explica que en su casa el
agua sale amarillenta, por lo que tiene que filtrarla, ya que no compra agua
mineral. Castillo tiene un gimnasio en el centro del pueblo y allí, además
de tener el problema del agua contaminada, los racionamientos son contantes.
Esto sin duda afecta porque no estaban acostumbrados a la escasez del vital
líquido. “Tengo dos pipotes en cada baño de mi negocio. Antes, esto (el
racionamiento) no ocurría pero aquí falta el agua todo el tiempo. Al agua le
tengo que aplicar las pastillas de Bayer que sirven para purificarla”.
El pasado 03 de febrero en la
casa de Juan Castillo el agua salió amarillenta.
Los pueblos del Sur del estado
Aragua también tienen problemas con el racionamiento y la contaminación
del agua. Elimar Contreras, de 39 años habitante de Barbacoas, municipio
Urdaneta, detalla que “en la mañana el agua sale con un olor terrible. Tengo
que esperar algunas horas y colocarle un pedazo de tela a la tubería para poder
medio filtrarla. Tengo un hijo de 5 años y para el consumo potable, utilizo
solo agua mineral”.
Amelia Díaz, habitante del
sector San Francisco de Cara conocido como Guanayen, tiene la misma
problemática desde hace 6 meses. “Hace tiempo que el agua aquí está saliendo
podrida, nadie puede tomarla, hay gente que la hierve; ahora lo más reciente es
que nos quitan el agua casi todos los días”.
04-02-16
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