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miércoles, 23 de marzo de 2016

Vestirse de Nazareno no está tan fácil este año por @mabelsarmiento


Por Mabel Sarmiento Garmendia


Caracas. Cada año con la llegada de la Semana Santa, los alrededores de la Basílica de Santa Teresa, ubicada en la parroquia que lleva el mismo nombre, se llena de vendedores informales ofertando túnicas moradas, cordones dorados, velas, estampitas e imágenes del Nazareno de San Pablo y otros santos de devoción venezolana, productos que son muy demandados por la feligresía en épocas de Semana Snata.

Pero a diferencia de otros años, en esta oportunidad los vendedores no le ven el queso a la tostada. “La gente sigue teniendo fe. Esta es una iglesia que por lo menos hasta las 5:00 pm tiene sus puertas abiertas, pero ya no se detienen a comprar sus velas.
Salen espantados con los precios. Pero no tenemos culpa. Todo está más caro. Fíjate con Bs. 10.000 hace un año podíamos llenar el puesto con mercancía, pero ahora con lo que costaba antes un velón compras una vela. Así están las cosas”, comentó Daysi Araque, comerciante que desde hace ocho años está en las puertas de la Basílica.



Los ventas están frías.

Un velón pequeño cuesta Bs. 700. Y lo que dice Araque no raya en la exageración, pues la gente se acerca pregunta precios y pela los ojos.

Lo mismo con las imágenes. La más barata está en Bs. 2.000. “Pero muy pocos las llevan, además que no hay mucha mercancía. Este año lo que más irá a salir son las velas”, dijo Yorneidy Cárceres.

Pero de dónde la clientela sale corriendo es de los puestos donde venden las túnicas.


Las túnicas ya no se venden como pan caliente.

La más barata, para un bebé de meses, cuesta Bs. 2.500. “La gente pone mala cara cuando uno le dice el precio. Yo le respondo que vayan a una tienda a ver si pueden comprarla. Se regresan y casi siempre con las manos vacías. La cuestión es que la popelina, con la que se hacen los trajes, está muy cara y además escasa. Yo las hago en mi casa, pero hasta por las agujas de la máquina de coser estoy pagando más”, comentó Iria Salazar.

A penas tiene 15 días exhibiendo su mercancía en un costado de la iglesia de Santa Teresa. En ese lapso, indicó, ha vendido si acaso cinco túnicas. “Está muy dura la cosa, vamos a ver durante la Semana Santa”.


Con lo que antes se compraba un velón ahora se adquiere una vela.

El vestido para un adulto que mida más de 1.70 de alto cuesta Bs. 15.000. Los cordones están en Bs. 500 el metro. En comparación con el año pasado, dijo, todo ha tenido un incremento que pasa el 80%.

18-03-16




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