Carta pública a la Mesa de la Unidad

Por Juan Andrés Mejía

Espero que puedan leer este mensaje que representa el sentimiento de muchos de los que estamos iniciando en política, varios de ellos en los partidos que conforman la Mesa.

A pesar de nuestra corta trayectoria, hemos aprendido que llegar a un acuerdo es un juego difícil, pero que no por eso hay que excluir. También sabemos que el pataleo casi nunca sirve de algo. Pero a veces es necesario decir lo que se piensa, para que quede constancia ante la historia, para que no sigamos cometiendo los mismos errores.

Preocupa mucho escuchar decir que se está "cediendo" un puesto, preocupa mucho escuchar decir que se está haciendo un “sacrificio” por Venezuela. Lo lamentable es que se diga públicamente algo que es mentira. En realidad, muchos sabemos (cada vez serán más) que Mendoza quedará por el circuito 2 y que Borges seguirá siendo el primero en la lista.

Además, se está burlando la forma de hacer política; poniendo a los candidatos como fichas, asumiendo que los votantes somos seguidores inconscientes, ignorando y burlándose de lo que pudiéramos pensar (cito caso Mendoza en Cir 2, Marquina en altos Mirandinos y Borges en el circ 4. No estoy buscando ni deseando una respuesta. Los hechos hablan más que las palabras, sólo quiero que sepan, que estas cosas también son las que hacen que la gente se quiera ir del país, son las que hacen que los jóvenes no se interesen en la política y son las que hacen que los chavistas sean más chavistas. De cualquier manera, esta generación no baja la cabeza y cuando decimos que vamos a buscar un cambio, es porque lo vamos a lograr. Cuando decimos un cambio, lo decimos con todo el significado que esto implica fuera de la oposición, pero también dentro de ella.

Uno como joven siente que cuando se reparten cargos como barajitas se están asumiendo que hay circuitos "ganados" y circuitos "perdidos". Debemos dar la lucha, hoy más que nunca, con más fuerza, con más inclusión, con más participación, especialmente donde hasta ahora no hemos ganado. No podemos criticar las prácticas del chavismo y luego cometer los mismos errores. Nadie es perfecto, pero cuando se traiciona la ética y la moral, no hay argumento que valga.

Creo en la política porque creo en servirle a la gente. Creo que en los partidos que promueven la democracia dentro y fuera de sus filas. Lucho por Venezuela porque debemos superar la pobreza. Creo en la democracia donde todos puedan participar. Este país no se ha conformado con negar a Chavez por 10 años. Nos están pidiendo un camino, una alternativa. No podemos seguir apostando al fracaso del oficialismo. Venezuela merece mucho más que eso.

Que no les quepa la menor duda que los jóvenes seguiremos dando la lucha, y que este 26 nos sumaremos a las campañas con todas nuestras fuerza porque para nosotros, por encima de todo, está una nueva Venezuela.

Un saludo de un joven que nunca dejará de luchar,