Lester Toledo 17 de noviembre de 2019
@LesterToledo
Estamos
a solo 24 horas de la mayor y más significativa convocatoria de calle en
Venezuela, día para demostrar que el venezolano no se rinde en su lucha por la
libertad y un paso determinante en la ruta para poner fin al régimen criminal
de Nicolás Maduro y a más de 20 años de debacle, corrupción, anarquía,
populismo enfermizo, miseria y muerte.
El
16 de noviembre es la conjunción de todas las protestas y manifestaciones que
los venezolanos han ejercido durante estos años. Es la mejor manera de
reivindicar la lucha y el sacrificio de nuestros mártires que dieron su vida
por la libertad, de los miles de heridos y cientos de presos políticos, de los
exiliados, de los que sufren, de los que lloran, de los que pasan hambre, es la
lucha de todos y la suma de todos los motivos para protestar.
Así
debe ser entendido y asumido pues en definitiva, se trata de una lucha y de un
compromiso que nos involucra a todos, sin distingo político, ni de cargo, sin
diferenciación de clase o profesión, sin odios. No es un llamado que le
pertenece a una sola persona, ni a un color partidista, pensarlo así es un
error. Es un llamado que hace Venezuela, no sumarse a este llamado, es darle la
espalda a ese país que sentimos como nuestra patria.
Es
la protesta de mayor justificación de todos los tiempos, para alzar la voz por
la familia venezolana, una familia dividida por el éxodo y el odio inoculado
por el régimen, para reclamar libertad, libertad de nuestros presos político y
para volver a sentir la libertad de decidir, de expresarnos, de escoger,
reclamar por el bienestar que nos fue robado, para alcanzar la victoria y
recuperar la democracia.
El
venezolano, lamentablemente, ha aprendido a vivir en constante sobrevivencia y
sacrificios. Hablamos de millones de ciudadanos impedidos de acceder al mínimo
de alimentos, agua, gas, electricidad, gasolina, educación y atención médica en
medio de una situación, sin señales de mejora.
Esos
millones de venezolanos que están más que claros que la raíz de la crisis no es
el éxodo, no es la hiperinflación, no es el desabastecimiento o la
desnutrición, el origen de la crisis es un sistema político que llevó al país a
la devastación, que ha jugado con el hambre y la necesidad de los ciudadanos
como arma de sometimiento político, y por ello la solución de Venezuela pasa
por sacar el problema de raíz. Poner fin a estos más de 20 años de este régimen
corrupto y nefasto, que ha bailado sobre nuestros muertos, sobre el sufrimiento
del pueblo y sobre nuestros presos políticos, todo por perpetuarse en el poder.
Este
16 de noviembre es la oportunidad de oro para romper con esas cadenas y poner
fin a una vida de sacrificios y dolor. Los venezolanos han demostrado ser de
una raza excepcional que ha superado miles de obstáculos, y estoy seguro, que
acudirá a este llamado con el corazón, compromiso y valentía.
Solo
así, fortalecidos en la unión, lograremos vencer a la dictadura, sin divisiones
ni odios, una sola fuerza para lograr poner fin a la usurpación, un gobierno de
transición y elecciones libres. Este 16 de noviembre es el momento para
abrirnos camino hacia la libertad.
Lester
Toledo
@LesterToledo
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