Agencias 21 de febrero de 2024
El año
pasado, las organizaciones criminales “ganaron” 820 millones de dólares
moviendo migrantes por la selva del Darién, la frontera natural entre Panamá y
Colombia, y por la que este año ya han cruzado 54.547 personas rumbo al norte,
según anunciaron este lunes las autoridades panameñas.
El
Ministerio de Seguridad de Panamá informó a través de un comunicado, y en
palabras del ministro de esa cartera, Juan Manuel Pino, que “solo el año
pasado, las organizaciones criminales que movilizan a los migrantes por la
espesa selva de Darién ganaron una cifra aproximada de 820 millones de
dólares”.
Tanto Pino como las autoridades panameñas han señalado en diversas ocasiones que las organizaciones criminales como el Clan del Golfo están lucrándose de este éxodo migratorio, compuesto mayormente por suramericanos que buscan llegar a Norteamérica para alcanzar mejores condiciones de vida.
Solo
en lo que va de 2024, unos 54.547 migrantes ya han cruzado esa peligrosa selva,
siendo la mayoría de Venezuela, Ecuador, Haití, China y Colombia, según el
comunicado difundido hoy.
“Para
nosotros es un reto en materia de migración, ya que se combinan dos aspectos,
la parte humanitaria y la parte de seguridad nacional, porque atrás de la
migración está el crimen organizado”, explicó el ministro Pino.
Para
este año se prevé un alza de migrantes en tránsito por el Darién de hasta en un
20 %, después de que el año pasado se registrara la cifra récord de más de
520.000 viajeros, según previsiones de las autoridades migratorias panameñas a
inicios de febrero.
Ante
ello, Pino recalcó este lunes que “para este 2024, por las entradas que estamos
teniendo, perfilamos que la cantidad de migrantes irregulares será superior al
2023”.
Para
“contrarrestar este accionar”, los estamentos de seguridad de Panamá han
reforzado una campaña – que comenzó en diciembre de 2023 y fue prolonga hasta
el próximo julio- con más “efectivos terrestres, navales y aéreos que generen
un bloqueo superior en la frontera con Colombia”, según la información oficial.
La
semana pasada, al menos cinco migrantes afganos, entre ellos un menor,
fallecieron al naufragar en el Caribe la embarcación de 27 pasajeros -afganos y
venezolanos-, en la que viajaban para evitar cruzar el Darién. Los rescatistas
hallaron cuerpos sin vida “encallados” en una zona rocosa.
Las
autoridades denunciaron que esa precaria lancha de madera era navegada “por criminales
de manera temeraria” en una zona muy compleja para su navegación “debido a los
fuertes oleajes” en un día de mal tiempo.
“Es
reprochable la indiferencia ante estos hechos, porque era una lancha conducida
por coyotes que se dedican a este flagelo y exponen las vidas de los migrantes.
Nosotros todavía estamos en el rescate de los cuerpos, ya que hay mal tiempo y
es riesgoso llegar hasta la zona”, enfatizó el líder de la cartera de
Seguridad.
Y
concluyó: “Darién no es una ruta, es una zona protegida, un pulmón del
hemisferio occidental. Es una selva peligrosa en donde usted para pasarla va a
exponer su vida”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico