Por Ibis León
La instalación de
la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), recién electa el 30 de
julio, puede enrumbar al país a un escenario de crisis
política similar a la que catalizó la salida del dictador Alberto Fujimori
en Perú, advierte el politólogo y profesor universitario Ricardo Sucre.
Las acusaciones de fraude
electoral de las que fue objeto Fujimori al postularse como candidato presidencial
para un tercer mandato cuando la Constitución de su país lo habilitaba solo
para dos períodos, presionó la salida del régimen de Fujimori en el año 2000.
Sucre señala, sin embargo, que
la presión internacional es una variable definitoria en el desenlace
de la crisis política venezolana, que apunta a radicalizarse en opinión del
analista. Al menos 15
países se pronunciaron en contra de la ANC y
manifestaron que desconocerán a los nuevos constituyentes.
“Los voceros del Gobierno
mostraron soberbia y arrogancia luego de los resultados electorales
porque sienten que tienen fuerza y ahora quieren contarse electoralmente. Esto
es un aspecto positivo porque el Gobierno tiene un incentivo para ir
a elecciones. Puede abrirse la vía electoral, ahora el problema que se
presenta es si la oposición aceptará medirse en unas futuras elecciones
con el mismo CNE”, apunta.
Los 8 millones
Sobre los más de 8 millones de
votos que anunció la presidenta del CNE, Tibisay Lucena, el
politólogo explica que los datos deben ser analizados en términos relativos y
no nominales. “Los datos de Lucena están muy polemizados, si hubo fraude
electoral el rector (Luis Emilio) Rondón tiene que hablar. Para analizar los
datos se debe tener en cuenta que el Registro Electoral no es el
mismo de 2015 y el número de votantes efectivos aumentó.
El chavismo mantiene una fuerza, pero la oposición también tiene un piso
electoral sólido”, opina.
Cuestiona que la Mesa de
la Unidad Democrática (MUD) y el chavismo crítico no construyeran un
discurso que explicara por qué apoyaban la abstención el pasado 30 de julio.
“Nadie construyó el discurso de la abstención porque la apuesta era
que no iba a darse la elección a la Constituyente y cuando intentaron hacerlo
fue muy tarde”.
“Si bien la Constituyente pasó
la prueba del 30 de julio, no se puede decir que su viabilidad está
garantizada”, sentencia Sucre.
Foto: talcualdigital.com
31-07-17
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