Venezuela y Colombia ¿Trapo Rojo? Cuidado que se puede poner morado

La quinta crisis entre Venezuela y Colombia está en pleno desarrollo, las siete bases gringas en territorio colombiano, el cierre técnico de la frontera desde hace dos meses, el control del contrabando de extracción desde Venezuela a Colombia, principalmente de gasolina y derivados petroleros, la supuesta amenaza del paramilitarismo que invade al país según el gobierno rojo, el cobijo de los grupos guerrilleros colombianos en nuestro territorio, la amenaza al comercio en San Antonio del Táchira que condujo al cierre de 1,000 establecimientos de pequeños y medianos comerciantes el Viernes pasado, por supuestos paramilitares del grupo Las Aguilas Negras, la militarización fronteriza por parte del gobierno venezolano (movilización de 15,000 hombres), la abrupta reducción de las importaciones colombianas a nuestro territorio, el asesinato de dos Guardias Nacionales, secuestros, bandas armadas, y podemos continuar indefinidamente comentando hechos a cual más lamentable.

Ante este panorama de continuas agresiones al gobierno colombiano, nos resulta muy evidente que estamos ante un nuevo trapo rojo, que busca dos propósitos a nuestro entender: en primer lugar desviar la atención de los graves problemas que confronta el país nacional, problemas de luz(energía eléctrica), agua, inseguridad, alta inflación, desempleo, desabastecimiento, corrupción, incapacidad, falta de gerencia, caos urbano y falta de empeño en la definición de políticas públicas para resolver los problemas. En segundo lugar el cerco político y económico que le están tendiendo al Gobernador Cesar Pérez Vivas, del Estado Táchira para sacarlo del juego político.

Pero queremos alertar al régimen rojo, rojito, cuidado que este trapo rojo se les puede convertir en un trapo morado en el que salgamos con los platos rotos en la cabeza y con graves consecuencia para el futuro de la nación.

En primer lugar le queremos decir al Comandante que la inmensa mayoría del país nacional opositores y chavistas no lo vamos a acompañar en una escalada bélica en contra del hermano pueblo colombiano, no estamos dispuestos a seguir con ese jueguito y le vamos a dar la espalda, en eso se nos ira la vida, nuestros hijos no participarán en una aventurilla bélica, no por decisión de sus padres sino por propia decisión de ellos. Allí podemos encontrar una diferencia fundamental con Colombia, la mayoría del pueblo colombiano respalda a su Presidente (más del 70%), las fuerzas vivas de ese país en más de una ocasión se han pronunciado a favor del Presidente Uribe y han hecho causa común con la política exterior colombiana con respecto a Venezuela.

Las declaraciones del ex presidente Ernesto Samper del pasado Miércoles, anunciando que existe de hecho una situación de pre guerra entre ambos países han encendido las alarmas en la comunidad internacional. Para nosotros las siete bases yanquis en territorio colombiano cumplen un doble propósito, por una parte lo que nos ha anunciado el gobierno del Presidente Uribe de apoyo técnico logístico para la lucha contra los violentos y los narcos, pero por la otra es colocarle un muro de contención muy poderoso a las pretensiones imperialistas de la revolución bolivariana, de eso no tenemos dudas, por aquello de cuidado…, no te atrevas que aquí te vamos a parar.

Dentro de este mismo contexto nos preocupa muchísimo que Venezuela este cortando muy abruptamente sus compras a Colombia, pues aunque está en su pleno derecho de comprar lo que quiera al país que considere conveniente, este rompimiento atenta contra las buenas relaciones comerciales y peor aún está generando desempleo en Colombia, es decir Hugo Rafael se metió con la comida, con el sustento de muchas familias colombianas que vivían de sus puestos de trabajo en muchas empresas que exportaban una parte de su producción a Venezuela, no nos podemos olvidar que el intercambio comercial en el año 2008 fue de 7,000 millones de Dólares de los cuales 700 millones fueron de Venezuela a Colombia el resto lo aporto el vecino país. Siendo así ya el gobierno y pueblo colombiano no tiene porque seguir calándose las impertinencias de su vecino, no nos extrañaría que las relaciones entre ambos países se agriaran mucho más y que en un momento determinado si continúan las agresiones, Colombia pudiera responder con contundencia, es allí donde el trapo se pondría morado.

Por otra parte el cerco al Gobernador Pérez Vivas, que se está estrechando cada día más, puede provocar una situación de conflicto muy grave en todo el territorio nacional, por lo inmoral y desfachatado de las medidas en su contra y las acusaciones que le están haciendo, es muy probable que efectivamente lo saquen del juego político, bien haciéndolo preso ó provocando el exilio obligado, pues el gobierno rojo tiene todo el poder para hacerlo y violentar de nuevo la constitución (no olvidemos a Manuel Rosales, entre muchos), pero le decimos al régimen, tanto va el cántaro a la fuente hasta que al final se rompe, esa ruptura puede ocurrir en cualquier momento pues la situación en el Táchira está enmarcada dentro de un contexto mucho mas general de hechos y acontecimientos a todo lo largo de la geografía nacional. Este es otro trapo que de rojo puede pasar a morado.

No estamos diciendo que el gobierno rojo se va a caer, lo que estamos diciendo es que es un juego muy peligroso, cuando se desata la inestabilidad, nadie sabe cuál va a ser el resultado final, no nos podemos olvidar de los acontecimientos del 11 de Abril del 2002. Por último le decimos al Comandante basta de jugar al socialismo del siglo XXI, basta de jugar al imperialismo bolivariano, basta de entrometerse en los asuntos internos de otros países, dedíquese a gobernar lo que le queda de mandato.

Editorial del Equipo Productor