Mini refinerías ¿Negocio Viable? III, por Miguel Méndez Rodulfo

Miguel Méndez Rodulfo 07 de abril de 2021

Fedecámaras propone al gobierno la construcción de 6 mini refinerías en el país, ubicadas en el Zulia, en Oriente y en Barinas, a un costo estimado individual de US$ 200 MM, cerca de yacimientos de crudos livianos y medianos, así como próximas a infraestructura de oleoductos, almacenamiento y llenaderos. Sería su aporte para solucionar la grave carestía que aqueja al país en materia de productos refinados. Sin embargo, un panel de expertos en refinación analizó el asunto y determinó que el negocio no era viable. Pero más allá de eso resalta el tema de la disparidad en los costos. El ingeniero Echenagucia habla de un costo de US$ 70 MM para una mini refinería de conversión profunda, los expertos mencionn un costo alrededor de US$ 350 MM para una modular de petróleo liviano y la cúpula empresarial, como ya vimos, de un costo de US$ 200 MM para una pequeña refinería de petróleo liviano. Llama la atención que una modular de conversión profunda, mucho más compleja, cueste el valor indicado y que el estimado de Fedecámaras, sea casi la mitad del de los expertos que analizaron casos reales en varias partes del mundo. Por otra parte, es cuestionable que un Estado en ruina total que echó al abandono a Pdvsa, vaya a hacer una considerable inversión en habilitar campos y pozos de petróleo liviano en el Zulia para suministrar menos de 30.000 barriles diarios de petróleo a las tres mini refinerías que se construirían en ese estado. 

Sorprendentemente, luego del foro de los expertos en refinación, el presidente de la Cámara Petrolera del Zulia, declaró con mucha molestia contra la opinión de los especialistas, calificándola como una “embestida hecha por ex gerentes de PDVSA -vinculados a la asociación Gente del Petróleo- que han politizado la propuesta y han acusado que una mini refinería en Venezuela podría costar entre 350 millones y 450 millones de dólares, lo que implicaría costos entre 17.500 y 22.500 dólares por barril. Las cifras que tiene la CPV-Zulia arrojan un monto que está entre 55% y 70% por debajo de esas cifras, al señalar un costo por barril entre 6.500 y 7.500 dólares, lo que implicaría una inversión entre 130 millones y 150 millones de dólares”. ¡Otro costo más! Agregó el representante zuliano: “Esta propuesta nace hace 11 meses en un momento de gran crisis de energía eléctrica y combustible en el estado Zulia como oferta de solución apolítica para un mínimo de autonomía que permita la producción de los diferentes sectores de la región. La propuesta es 100% técnica, apolítica y básicamente se hizo con un sentido de pertenencia como venezolano y zuliano por buscar una solución fuera de la caja, de los conceptos o prácticas actuales para que nuestro estado Zulia, luego de 105 años de historia petrolera, tenga un mínimo de combustibles en la generación de combustibles” 

Llama la atención la descortesía en la respuesta y el argumento político utilizado, a pesar de la insistencia en que la propuesta no es de tal naturaleza. Bueno, ella podrá ser técnica, pero las razones que esgrime el gremialista zuliano, son eminentemente políticas; además son reivindicativas, apelando a reclamos históricos y con visos regionalistas. ¡Razonamientos estos tan parecidos a la retórica oficialista! Pero el elemento que causa mayor impacto es que el dirigente señala que: “por tratarse de una propuesta que tiene aspectos de ayuda humanitaria podría optar por financiamiento de organismos multilaterales bajo la premisa que se atienda a condiciones políticas y jurídicas que permitan los desembolsos” ¡Vaya, entonces la propuesta si es política! Como se dice entre abogados: a confesión de parte, relevo de pruebas. Pero, poniendo de lado esta incongruencia, algo que lo deja a uno atónito es que los organismos multilaterales puedan aportar fondos para la propuesta de las mini refinerías, siendo como es, y está concebida, un negocio privado. Pero que se diga que el ofrecimiento en mesa es de índole humanitaria, creo que ya eso raya lo exagerado, aunque no dudo que se hayan hecho contactos en ese sentido. El caso es que esos organismos califiquen como tal la propuesta de Fedecámaras. 

Miguel Méndez Rodulfo