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jueves, 24 de agosto de 2023

Régimen sigue permisivo con la minería ilegal que destruye parte de Venezuela, por @OlgalindaP


Olgalinda Pimentel 23 de agosto de 2023

@OlgalindaP

El Arco Minero, donde explotan ilegalmente el oro en Venezuela, creció en 5 meses ante la "vista gorda" de Maduro, denuncia Cristina Burelli, de SOS Orinoco

El Arco Minero, oscuro reservorio de la minería ilegal ubicado en el sur de Venezuela, se expande bajo la inacción del régimen de Nicolás Maduro.

La organización SOS Orinoco, a través de imágenes satelitales que recibe, constató que la explotación irregular del oro en el Alto Orinoco ha crecido, comparativamente. “Está más grande este agosto que en marzo”, dice Cristina Burelli, fundadora de esta ONG que trabaja para la protección de la zona, desde 2018.

Los daños también.

Con 500.000 kilómetros, el Arco Minero abarca parte de los estados Bolívar, Amazonas y Delta Amacuro, y desde 2019, han crecido como torrentes las denuncias de contaminación de las cuencas de ríos vitales para el agua potable y la hidroelectricidad, de la que se sirven poblaciones enteras de indígenas. Y también de la deforestación que arrasa la selva, cuya tasa es la más grande de la región, ha denunciado la ONG venezolana Clima21. "Estamos ante la presencia de una crisis ambiental nunca antes vista en Venezuela", sostuvo su coordinador, Alejandro Álvarez-Iragorry.

Sin embargo, la participación del régimen, en representación del Estado venezolano, en la Cumbre Amazónica, realizada entre los días 8 y 9 de agosto, en Brasil, no da ningún resultado, señala Burelli. Se acordaron 113 objetivos pero ninguno se cumple, hasta la fecha, en la zona del Arco.

“Lo que vemos, a partir de informaciones, es que desde hace seis años es una política minera que va más allá de la zona y aplica al sur del Orinoco e, inclusive, las áreas protegidas, declaradas por la Unesco, a través del Centro del Patrimonio Mundial, y viola los derechos humanos”.

La extensa zona de minería y explotación de oro, denominada Arco Minero, fue creada de modo incipiente por Hugo Chávez, a través del decreto presidencial que expropió y nacionalizó empresas canadienses, como Cristalex.

Luego, en febrero de 2016, Nicolás Maduro, con un decreto, destinó la zona para la actividad minera para contar con otra fuente de ingresos, distinta a la de la producción petrolera, que viene mermando en el occidente de Venezuela.

Ante el vacío, la zona fue tomada progresivamente por sindicatos que se criminalizaron, amparados por grupos armados y efectivos de la FANB.

En el tiempo, diversos actores del régimen han ido tejiendo una madeja de complicidad con la explotación ilegal del oro, mientras organismos internacionales, como la ONU, han abundado informes de alerta sobre lo que ocurre en el sur de Venezuela.

“Un reciente trabajo en la Mina de Yapacana (la zona más grande de explotación ilegal), realizado por TeleSur, no muestra el tope del Tepuy, totalmente horadado de minas. Tampoco muestran el cerro Moyo donde sigue los mineros que trabajan para la FANB”, afirma la directora de la ONG.

Las actividades ilegales con la “vista gorda” del régimen son conocidas por el foro internacional, según refiere, y salieron a la luz cuando Maduro, en la COP27 de 2022, “trato de posicionarse como defensor de la Amazonía y le dijeron sotto vocce que cambiara el discurso”.

Luego, ordenó planes operativos militares como el Autana o el Roraima, a través de los cuales eliminaron alguna banda criminal, pero fue ”un quítate tú pa' ponerme yo”, dice Burelli, quien aludió los señalamientos sobre funcionarios, civiles y militares, que “tienen intereses personas” en grandes minas.

“Maduro sabe que tiene que cambiar la narrativa para poder tener acceso al Fondo de Amazonias”.

En el contexto de la Cumbre Amazónica, la vicepresidente Delcy Rodríguez suspendió la visita técnica de una misión de la Unesco al Parque Nacional Canaima, en agosto de 2023, declarada Patrimonio Mundial, que está amenazada por la minería ilegal. La visita había sido aprobada en la reunión anual del Centro del Patrimonio Mundial, entre 2020 y 2021, recuerda Burelli.

Es la segunda vez que el régimen suspende a la organización de las Naciones Unidas visitar el sur de Venezuela.

Es un asunto grave que ocasionó que la Unesco, en el borrador del documento que acordó en julio pasado, en París, reclamara a Venezuela el nuevo retraso de la visita.

“Si Nicolás Maduro quisiera acabar con la minería ilegal ordenaría a la Corporación Venezolana de Minería, que se encarga del suministro de gasolina, que cese el servicio. Eso acabaría con la explotación ilegal del oro y el manejo del mercurio ilegal, por parte de la FANB”.

Tomado de: https://www.diariolasamericas.com/ecoequilibrio/regimen-sigue-permisivo-la-mineria-ilegal-que-destruye-parte-venezuela-n5341901

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