PDVSA: la caja chica de Chávez

Por Venepiramides, 17/11/2011

El pasado 11 de enero el Presidente Hugo Chávez recibió una petición de recursos por parte de uno de sus ministros y de inmediato el mandatario le señaló: "yo me encargo de conseguirlo, llama a Rafael Ramírez (presidente de Pdvsa) ahí, por esa vía yo consigo bastante". Esa premisa se ha mantenido a lo largo de este año, pues el jefe de Estado ha presionado a la petrolera para que eleve las asignaciones al Fonden, financie más misiones y ahora cancele los pasivos laborales.

Actualmente el precio del crudo promedia más de 99 dólares, lo que por ende garantiza un mayor flujo de ingresos petroleros, sin embargo para la industria los recursos ya no son suficientes ante las cargas que está asumiendo y se ve en la obligación de buscar asistencia en los entes oficiales e incrementar su deuda financiera.

En la primera mitad del año las exigencias sobre Pdvsa comenzaron a crecer, especialmente en el mes de abril cuando el Gobierno lanzó la Gran Misión Vivienda.

En manos de la industria quedó la coordinación y el financiamiento parcial de ese plan habitacional. Para ese programa el Ejecutivo contempló una inversión general de 57 millardos de bolívares y de ese monto, 16 millardos de bolívares han sido desembolsados por la estatal.

La Misión Vivienda no es la única que atiende la empresa, el resto de las misiones también reciben fondos petroleros. Ya en 2010 la estatal aumentó en 280% los aportes a los programas sociales y en este ejercicio esas erogaciones se han mantenido, los planes en parte se están alimentando de los ingresos que genera el impuesto a la ganancia súbita.

En abril también se modificó la contribución a los precios extraordinarios del crudo para transferir más dinero al Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden), que es el mecanismo principal del denominado gasto paralelo. Por lo tanto, la estatal tiene que atender la asignación ordinaria y el presupuesto adicional que posee el Ejecutivo para proyectos, misiones, entre otros requerimientos.

Las peticiones no cesan y en agosto el jefe de Estado delegó en Pdvsa la conformación del arco minero, que implica la creación de empresas mixtas por parte de la petrolera para la explotación de oro. Esto obligará a erogar recursos para las nuevas compañías.

Además de los anteriores compromisos, el Presidente le ordenó al titular de Energía y Petróleo que atendiera los pasivos laborales.

La semana pasada el mandatario realizó dos anuncios: la reforma de la Ley del Trabajo y la cancelación de las obligaciones con los ex empleados de la administración pública, que según datos oficiales, están en 24,5 millardos de bolívares. Para pagar esos pasivos, la estatal emitirá Petrobonos y destinará una porción de la regalía adicional de 3% al Fondo de Prestaciones Sociales.

Ya parte de los compromisos en materia salarial han sido asumidos indirectamente por la industria, debido a que los créditos adicionales que se han aprobado para cubrir esos ajustes han tenido como fuente el diferencial cambiario de la petrolera.

Mientras Hugo Chávez pide fondos, la estatal se endeuda, tiene que comprometer parte de su producción en los pagos de préstamos y además debe seguir materializando las inversiones en sus proyectos medulares.

El economista, José Luis Saboin, explica que a Pdvsa se le exige demasiado y más cuando está sujeta a los vaivenes de los precios del petróleo. "La empresa registra una caída de la producción y tiene que financiar misiones, viviendas, proyectos de oro y pagar pasivos. Pero a la par tiene que desarrollar las inversiones en la Faja, lo que amerita más recursos. La industria ya no puede cumplir con el sueño del Presidente Chávez, porque es ambicioso".

La deuda de la petrolera se encuentra por el orden de los 30 millardos de dólares, y su ascenso no se detiene. En los últimos meses ha solicitado ayuda a los entes oficiales, el Banco Central le ha dado asistencia por 58 millardos de bolívares, de acuerdo a los datos de la base monetaria, y el Banco del Tesoro le ha gestionado más de 4 millardos de bolívares.

A esas obligaciones se suman otros compromisos como las cancelaciones de los préstamos con China, que durante unos meses afectaron las erogaciones ordinarias al fisco nacional. En un punto de cuenta, el Ministerio de Energía admitió que el mecanismo financiero del Fondo Chino ha generado un fuerte impacto financiero para Pdvsa y por tal motivo, en abril tuvo que solicitar el retiro de parte de los depósitos que están en el Bandes, correspondientes a los excedentes del pago de los envíos a China, para poder "cubrir regalías e impuestos, así como los costos de producción y refinación de los volúmenes de crudo despachados (barriles enviados a la nación asiática)", según reportó el diario El Universal.

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