Lucha contra la criminalidad

Por Francisco Daboin Lupi, 29/01/2012
Boletín 75 AIPOP

Aun cuando en los estudios de opinión pública, la criminalidad se refleja en un segundo lugar después del empleo, medios de comunicación y políticos se hacen eco, poniéndolo como él emblema de la lucha para lograr conseguir la mayor cantidad de adeptos en sus arengas.

Debemos recordar que este fenómeno se dispara hacia los años 90, y su espiral de inflación no ha sido posible contenerlo, cosa que se atribuye a factores múltiples, desconocimiento en sus formas de combate, desempleo, falta de educación, facilismo, impunidad.

También podemos expresar que los bajos sueldos en los estamentos policiales, y la pérdida de rumbo en la gerencia, son otro elemento que influye en este repunte criminal. Cuando quienes en los cargos gerenciales, desconocen el modus operandi y la forma de combatir a bandas criminales, es imposible lograr por lo menos reducir índices. Eso ha sucedido en los últimos 15 años, todos vemos como desfilan por el Despacho del Ministerio del Interior y Justicia, Ministros en su mayoría del estamento militar, que han sido, no solo ineficientes sino nulos en su actuación de lucha contra la criminalidad. Pareciera un circo, en donde los actores son cambiados constantemente y cada uno de ellos se presenta con un nuevo plan de seguridad.

Se ha llegado inclusive, a partir del Ministerio, creado otros con funciones del anterior. Y ahora vemos que el MIJ asume las funciones de CAVIM, industria militar que tiene la responsabilidad del suministro y venta de armas y municiones, para los cuerpos de seguridad y policiales.

Se crea una misión, para la seguridad y se encarga de ella al Vicepresidente de la Republica. Quitándole funciones especificas al MIJ. Es decir, no entendemos como pudieran funcionar pedazos del estado venezolano, que se han partido en la lucha criminal.

Si se lograra que el CICPC, agrupara alrededor de la División de Homicidios, por ejemplo, a sus mejores hombres, apoyados por la Fiscalía del Ministerio Publico y los Tribunales de Justicia; ejecutando planes de inteligencia, trabajo de campo, aprehensión y la elaboración de los respectivos expedientes de manera expedita, dotados de material rodante, es decir vehículos, motos, armas, pago de fuentes de inteligencia, material de oficina, computadoras, papel, oficinas, y trabajo dedicado única y exclusivamente a la persecución del delito, otro gallo cantaría.

En el CICPC, existen funcionarios todavía excelentes, buenos investigadores, expertos técnicos, fotógrafos, etc., capaces de seguir adelante y demostrar que esa policía sigue siendo la mejor del país y de muchas partes del mundo.

Que se aleje la tentación de politizar las acciones de lucha contra la criminalidad. Y que, los medios de comunicación, no produzcan información parcializada y política en la lucha que debemos enfrentar todos contra las acciones criminales.

Venezuela es de todos, nuestros hijos recibirán como legado las cosas buenas que todos podamos construir.

Publicado en:
http://www.aipop.org/site/modules/mydownloads/singlefile.php?cid=19&lid=182