Por Esperanza Márquez
José Vicente Carrasquero es
profesor de Ciencia Política en la Universidad Simón Bolívar y Universidad
Católica Andrés Bello. Consultor en Opinión Pública y Campañas Electorales. En
este momento se encuentra fuera del país ampliando sus conocimientos y tratando
de ver desde otro ángulo la realidad venezolana. En uno de sus últimos twitter
publicados dice:
Maduro, no puede ser que no
veas en esta tragedia una razón para renunciar y dejar a los venezolanos
recuperarnos.
-¿Cómo ve la realidad del país
en estos momentos?
- Estamos en la continuación
de lo que yo he llamado los tiempos de miseria en Venezuela, una miseria que
nos ha llevado a ser ciudadanos del quinto mundo, ciudadanos que no
tienen los derechos que tienen nuestros vecinos de Colombia o de Nicaragua. En
Nicaragua una persona viaja y puede utilizar su tarjeta de crédito hasta el
límite de lo que puede pagar sin pedirle permiso a nadie, no tiene que estar
haciendo trámites ante ningún organismo, simplemente compra su pasaje, viaja y
gasta dinero con su tarjeta de crédito o con efectivo y eso de suyo te dice que
los venezolanos hemos caído en un nivel de calidad de vida casi
africanizado. Somos unos ciudadanos de quinta categoría ante el mundo,
pero dentro de Venezuela somos personas que no tenemos acceso a la seguridad, a
la justicia, a la salud, a la alimentación, no tenemos acceso a unos servicios
públicos de calidad: Internet, electricidad, agua… entonces estamos en una
situación no de pobreza sino de miseria y se llama miseria porque, básicamente,
tu condición de vida no te permite ser optimista, porque tu condición de vida
te somete a unas restricciones que te enferman el alma, que no te dejan soñar,
que la gente cuando quiere soñar tiene que ver para afuera, busca otros rumbos,
otros derroteros porque se ha hecho difícil lo que en otras partes del mundo es
una tontería: cambiar un celular hasta comprar una batería y eso nos dice que
Venezuela es, lamentablemente, un país empobrecido, en donde su población ha
sido reducida a una calidad de vida lamentable, incongruente con los ingresos
que Venezuela ha tenido los últimos 17 años que son más del doble de
todos los ingresos que tuvo la República entre 1811 y 1998.
-¿Esos ingresos mil
millonarios los podemos ver en alguna parte?
- No hay una obra pública
digna que represente esa cantidad de dinero, no hay una calidad de vida
del venezolano que represente ese dinero, la gente que vive en el exterior y
que depende del Gobierno está pasando trabajo porque no les pagan sus
jubilaciones porque no son convertibles en dólares, entonces estamos frente a
un Estado Fallido que es un concepto que a la gente le cuesta mucho utilizar
porque no somos Sierra Leona, Somalia, pero las condiciones son que el hampa
domina amplios territorios del país, que el hampa ha llegado a atacar la casa
presidencial, la casa de San Mateo, donde se robaron una cantidad de fusiles,
donde atacaron la escuela de la Guardia Nacional en Carabobo, atacan cuarteles
de policía, matan militares y policías para hacerse de las armas, eso quiere
decir que el crimen se ha enseñoreado de una forma tal que le combate al
Gobierno el ejercicio de la soberanía, le reta al gobierno el poder y lo
vimos con la manifestación en la cárcel de San Antonio en Margarita y
luego el entierro del delincuente que trancaron Porlamar.
-¿Maduro está mandando?
- Maduro tiene un poder que va
a lo fáctico o es simplemente un poder formal, el poder de decirle a las
televisoras: encadénense que voy a hablar. Pero a la hora de la verdad, el
poder que tiene Maduro no es real, Maduro no puede proteger al venezolano de la
criminalidad. En Venezuela es más fácil ser asesinado que sacarse la
lotería, con la diferencia de que no tienes que comprarte el billete,
simplemente te llega tu número lo que es una verdadera desgracia y los crímenes
no son investigados. Luego pasamos a otra dimensión y que me preocupa mucho y
es que el país está completamente desinstitucionalizado y hay poderes que se
agavillan en contra de otro poder. Ves al Poder Moral, el Poder Ciudadano, el
Electoral, el Ejecutivo agavillado contra el Poder Legislativo que es el de la
legitimidad más reciente y los resultados del 6D son una evaluación constatada
de la gestión de Gobierno porque cuando salen tan mal parados la gente está es
castigando al Gobierno.
-¿Cree que el Gobierno sintió
el golpe de la derrota en las elecciones parlamentarias?
- No, porque ellos no son
demócratas. El chavismo no es demócrata, el chavismo es una especie de fuerza
de ocupación militar que llegó al país y que pretende imponerle a la
gente su forma de pensar y de ver las cosas. Decir que en Venezuela hay
una democracia es una exageración, no se corresponde con la realidad que nos
toca vivir. La Asamblea Nacional cita a los ministros y estos no van porque no
les da la gana y no hay nadie que diga que cuando el ministro no va le está
faltando el respeto directamente al soberano, al pueblo, porque lo que se le
hace es un llamado a rendir cuentas de unos recursos que maneja y de unas
políticas que maneja que no son de él, que son del pueblo.
-¿Qué lugar ocupamos en el
continente como país?
-Hemos quedado como un país
primitivo, africanizado y eso es verdaderamente lamentable, estamos en la cola
del continente, la gente en Haití no sufre tanto como el venezolano, la gente
en Nicaragua no hace cola para nada, Guatemala tiene una calidad de vida
aceptable, razonable, no son extremadamente ricos, pero la gente va al mercado
y consigue comida, le alcanza el dinero, no está abatida por la inflación, la
gente puede comprar dólares como en cualquier país en este momento que no sea
Cuba y Venezuela.
-Pero Maduro se ufana de que
paga la deuda.
-Eso demuestra, y permíteme la
palabra, la “farsedad” de este Gobierno. Maduro dijo que el año pasado
había pagado 25.000 millones de dólares en deuda y servicio de la deuda. ¿Qué
quiere decir eso? Traducido en cristiano eso es como que una madre se gaste el
dinero para deudas que hay que pagar a expensas de que sus hijos pasen hambre,
cuando la lógica dice que esa madre debería sentarse con la gente a quien le
debe y renegociar.
-¿Por qué el Gobierno no
renegocia la deuda?
-Hay dos razones: una es que
le tienen miedo al coco del Fondo Monetario Internacional que ya no es el
monstro que era antes y la otra razón más lamentable y más importante es
que Maduro prefiere aceptar las presiones de los tenedores de bonos de la deuda
pública y de PDVSA, muchos de ellos venezolanos que han utilizado esos
bonos para lavar dinero que sacaron de Cencoex, de comercios irregulares de
PDVSA. Lo lógico es que si ya no tienes los niveles de ingresos que tenías el
año pasado renegocies la deuda y diga que si paga la gente se va a morir de
hambre. Maduro lo que dijo fue que no había más dólares para
importaciones porque, esa parte no la dijo, los dólares los va a utilizar para
pagar a los tenedores de bonos de deuda y a los que se les debe dinero. Eso hay
que pagarlo, pero esas condiciones hay que renegociarlas para que no sean tan
leoninas como son ahora. Nuestros bonos de la deuda pública son los más caros
del planeta, porque somos ricos y mala paga, porque somos riesgosos porque sólo
tenemos petróleo y ahorita no vale mucho y es un petróleo muy caro de producir
y nos está afectando esta desidia con la que fuimos gobernados estos últimos 17
años. Maduro no es capaz de entender el problema que estamos viviendo y cuando
un problema no se entiende no se resuelve.
-¿Qué pasó, por qué llegamos
hasta aquí?
-Somos víctimas de haber
elegido a un comprador de espejitos en el año 98, bueno yo ni siquiera voté esa
vez, yo le hice campaña en contra a Chávez desde el principio porque vi que una
persona que había querido llegar al poder por las armas no era la persona
idónea para gobernar un país y el tiempo me dio la razón. Uno ve a Diosdado
Cabello y no se le ha quitado el golpismo, ni a Vielma Mora, ni a Arias Cárdenas,
ellos están en contra de lo que no les sirve porque no son demócratas. Ves al
hampón, al delincuente de Carreño, a ese señor que botaron del Ejército por
ladrón que dice que Walid Makled, que es de ellos, es el que está
pagando la Ley de Amnistía.
-¿El chavismo no tiene nada
bueno?
-Sí, que Chávez y el chavismo
van a pasar a la historia como un error de dimensiones inconmensurables, como
una maldición que le cayó al país. No hay manera que la historia sea
benévola con Chávez y el chavismo, solamente hay que vivir lo que la gente está
viviendo hoy para darse cuenta de que es imposible que se valore nada que
Chávez haya hecho durante estos últimos 17 años y mucho menos lo que ha hecho
Maduro.
-¿En qué posición está en
cuanto a la salida de Maduro?
- Este Gobierno tiene que
irse, acabo de firmar una carta que va a salir pidiéndole la renuncia a Maduro
porque lo está haciendo mal y no comprende lo que está pasando. Yo tiendo a
estar de acuerdo con Ramos Allup con la enmienda constitucional porque, además,
es la oportunidad de oro para sacarnos de encima la reelección indefinida que
es la receta de Fidel Castro de mantenerse en el poder para garantizar que el
proceso político no desaparezca y la enmienda pasa por una elección
popular y es precisamente lo que necesitamos en este momento para salir
adelante.
29-02-16
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