Por Jesús González Briceño, 07/03/2014
El país
nacional está sumido en una crisis de
grandes dimensiones que abarca tanto el régimen chavista-madurista como su vida
institucional en todas su facetas
constitucional, castrense comercial-económica, diplomática y social, con
sus orígenes en la lV República pero llevada a extremos irreconciliables
por el gobierno de Chávez-Maduro, en
cuya conducción reposa la enorme responsabilidad de enderezar el desastre de casi 14 años de
desgobierno, pero no ha demostrado la
capacidad como Jefe de estado para capotear
o resolverla ,sino mas bien, ahondarla al borde del precipicio del caos y el desastre.
El
desaparecido Chávez , con su formación académica en la Escuela militar, su
capacitación marxista apoyado de su hermano Adán, los dos años de prisión a
raíz del asonada del 4F de 1992,y
sobretodo con el asesoramiento directo
de su gran maestreo Fidel Castro, con su empatía y poder comunicacional con la clase más pobre del país y con la táctica
de retroceder siempre avanzando en sus objetivos revolucionarios, supo
atemperar la crisis creado por sus
propios desaciertos y desastres de todo género. Pero su designado para sucederle, con una
formación y práctica básicamente
revolucionarias, policial e ideológica, a la sombra de su protector y tutor, con una educación académica y gerencial prácticamente nula, no
ha sabido interpretar, ni mucho menos
contener, una crisis acumulada y
creciente cada vez mayor por sus desaciertos
como conductor de este proceso, muy a pesar de la tangible y
desconcertante asesoría del castrismo y sus fuerzas de ocupación. El desempeño
de Maduro como presidente de la Asamblea Nacional, sirvió para cumplir órdenes
de Chávez en la concesión de habilitantes y la aprobación de leyes violatorias
de la Constitución; como canciller su desempeño fue opaco y desacertado con la
intervención en la destitución del presidente paraguayo Lugo, y como presidente,
prácticamente, desde el 8 de diciembre del 2012 hasta la actualidad, después elegido espuriamente,
ha sido marcado por un mar de errores de
todo orden habiendo conducido al país a una crisis cuya solución es la utilización de la fuerza bruta
de las tanquetas y equipos bélicos pesados, además de las fuerzas de seguridad, policial, los colectivos
armados , los consejos comunales y la unidades de Batalla Bolivar –Chávez para
combatir los disturbios estudiantiles y
atacar edificaciones y civiles
sumados al repudio estudiantil y con
los ataques desmedidos y estalinistas de las fuerzas represivas.
Al
cerrarse las posibilidades electorales a la
crisis circular-acumulativa de quince años de socialismo Bolivariano del siglo XXl, con
un CNE y TSJ convertidos,
junto a todos los órganos estatales, en una apéndice del régimen, declarados y
practicantes confesos por esta causa, ha conducido a los estudiantes y a
la sociedad civil a utilizar la protesta
y rebeldía pacíficas como único
expediente válido para desmontar la dictadura castro-comunista, ante la
pasividad, inacción y falta de claridad
de la estrategia política de una fracción de la Mesa de La Unidad que definitivamente quedará excluida como
solución de la problemática actual del país. Así lo demuestra la ciencia política aplicada a
tantos eventos similares en que sus dirigentes no han podido visualizar ni mucho menos buscar las soluciones políticas en una situación como la venezolana,
por razones que no es la oportunidad analiza, pero que abarca:
1. El ABSOLUTO RESQUEBRAJAMIENTO DEL ÓRDEN
CONSTITUCIONAL adoptado aprobado por la mayoría de venezolanos propuesto
por el mismo régimen que ahora no le sirve en la consolidación del
sistema revolucionario.
2.CRISIS ECONÓMICA ESTRUCTURAL de
carácter fiscal-monetario, devaluación monetaria mayor e
inflación superior al 200% en 2012-2014, cuya espiral alcista continua y una escasez notable de divisas para la importación privada; falta
de producción y productividad del aparato productivo nacional que ha conducido
obligadamente a una economía de puertos, con la importación masiva de
alimentos, bienes diversos y servicios,
por el desmantelamiento considerable del sector manufacturero comercial e
industrial por expropiaciones y confiscaciones ilícitas; un endeudamiento
externo e interno de dimensiones alarmantes que ha podido ser enmascarado con
el financiamiento externo y del coloso
asiático a cambio de más de 600 mil barriles diarios de petróleo, lo cual disminuye ostensiblemente
los ingresos petroleros nacionales; un
pésimo manejo de la industria nacional
de hidrocarburos que consume millones de barriles diarios de petróleo y
sus derivados y ocupa una nómina de personal superior a 140 mil empleados y
obreros internamente, y depende de las trasnacionales para incrementar la
producción de los petróleo de la Faja del Orinoco; en fin un desmejoramiento
sustancial de la calidad de vida de nuestros habitantes por la escasez y
desabastecimiento, colapso de los servicios públicos, índices de criminalidad e
inseguridad más altos del mundo y la
pérdida casi absoluta de la libertad de expresión, la implantación forzosa de
una hegemonía comunicacional y
adoctrinamiento de nuestros niños y adolescentes, en la etapa de mayor
cuantía de sus ingreso petroleros.
3.LA CRISIS SOCIAL Y POLÍTICA es el
resultado más grave de esta situación en que se acusa, criminaliza y enjuicia
a opositores, disidentes, parlamentarios, dirigentes políticos, periodistas,
defensores de los derechos humanos, civiles y estudiantes que se han visto obligados
a declararse en REBELDÍA CONTESTARIA DEL
RÉGIMEN, con resultados que
estamos viendo con nuestros propios
ojos y consecuencias de muertos, heridos, torturados, retenciones carcelarias y
medidas cautelares al derecho de libertad de expresión y
de protesta. No creo que haya existido una crisis como la actual en Venezuela.
4. LA UTILIZACION DESMEDIDA DE LA FUERZA
MILITAR y sus equipos (tanquetas y otros) policial, colectivos armados, consejos
comunales y las Unidades de Batalla chavistas
y maduristas, ha sido la repuesta del presidente para acallar esta protesta totalmente
justificada por un régimen que nos ha traído desgracia, pobreza y división clasista inculcadas desde lo más alto
por estos dos mandatarios al mejor estilo y acción de de Lenin, Stalin, Hitler,
Mussolini, Franco, y otros consabidos criminales de lesa humanidad.
5. No
conforme con este NAUFRAGIO DE LA
DEMOCRÁCIA, el presidente Maduro
está llevando a nuestra nación, por su ineptitud política y económica, a un
completo aislamiento, con la adopción de medidas irracionales en una lucha sin
cuartes contra el imperialismo norteamericano que ha sido benigno ante Chávez y él por acusaciones, improperios
y desaciertos diplomáticos; contra Colombia `por sus acusaciones contra
el expresidente Uribe , cerrando la
frontera viva entre ambos países por razones fútiles y acusando al presidente
Santos de intervencionismo; echando del país a lo OEA por pretender investigar la
presunta violación de los derechos humanos, y a muchas naciones del
mundo que han recogido sus propios
testimonios de sus periodistas que han sufrido los embates
del uso desmedido de fuerzas represivas. Y en fin la ruptura de relaciones
diplomáticas y comerciales con Panamá por convocar una reunión de Cancilleres
de la OEA para analizar nuestra
conflictiva situación de este
febrero crítico y contumaz, puede
acarrear graves consecuencias económicas para nuestras importaciones y
relaciones comerciales y consulares imprevisibles.
La
irresponsabilidad e irracionalidad del presidente Maduro con el uso ilegal de
fuerzas militares y policiales e irregulares del gobierno, ha puesto de manifiesto que no está
mínimamente preparado para desempeñarse
como Jefe de Estado, y está llevando, o ha llevado al país, a una guerra civil
en ciernes porque de tanto represión y muerte, los estudiantes, partidos políticos responsables
y la sociedad civil, no están dispuestos
a doblegarse ante la dictadura castro-.comunista. LOS CONTESTATARIOS PONEN SUS PROTESTAS Y SUS MANOS TEÑIDAS DE BLANCO EN
LAS PROTESTAS, MIENTRAS EL RÉGIMEN DISPARA BALAS Y CAUSAN DESTROZOS, MUERTES Y
HERIDOS.
Jesús González Briceño
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