Páginas

jueves, 12 de marzo de 2015

Declaración del Grupo Avila


PREOCUPACIÓN Y ESCEPTICISMO  ANTE  LAS  GESTIONES DE  UNASUR   EN  VENEZUELA

El Grupo Ávila ha observado con preocupación la gestión efectuada  en Venezuela por la misión de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), integrada por su Secretario General, Ernesto Samper, y los Cancilleres de Brasil, Colombia y Ecuador. La misión tuvo el propósito de contribuir a solucionar en forma pacífica y democrática la seria crisis política que atraviesa nuestro país. Infortunadamente constatamos que ese propósito no se ha logrado, a causa de la actitud sesgada que asumió desde el principio el Secretario General, como vocero de la Misión, sin mencionar algunas declaraciones previas, incluso del canciller ecuatoriano, en las que se asume como cierta la postura del gobierno venezolano respecto de los últimos sucesos.
      Tras anunciar que la Misión venía a petición del Presidente Maduro, fue enfático en afirmar que su principal intención era la de contribuir a defender el orden existente en el país, contra cualquier intento de “desestabilización” interna o externa. En ningún momento hizo mención de las preocupaciones que hoy se manifiestan en escala mundial ante las violaciones del orden constitucional y legal, y de los derechos humanos, que –junto con los problemas económicos y sociales de inflación, desabastecimiento, delincuencia desbordada- constituyen la verdadera causa de la tensión política que padecemos.
     Asimismo, el señor Samper –con el dócil consentimiento de los tres Cancilleres que lo acompañaban—mostró una actitud arrogante e inaceptable hacia los dirigentes y representantes de la Oposición. No los trató como parte de iguales que deberían entablar un diálogo democrático, sino como si fueran unilateralmente los responsables del clima de tensión. Tuvo la turbia pretensión de dictar a la Oposición quiénes debían o no formar parte del grupo con el cual UNASUR aceptaría conversar, y llegó al extremo realmente inaceptable de ignorar y/o relegar la participación en ese contacto del señor Jesús Torrealba, Secretario Ejecutivo de la Mesa de Unidad Democrática y vocero natural de ésta en cualquier circunstancia.
Ante tal insólita conducta, el Grupo Ávila desea manifestar ante la opinión pública nacional e internacional su escepticismo respecto de futuras gestiones “pacificadoras” de UNASUR, organización internacional que goza de una particular preferencia por parte del actual Gobierno de Venezuela, y que claramente no está dando muestras de ecuanimidad, ni de objetividad, ni tampoco del apego a los valores democráticos que requeriría una auténtica labor mediadora o de buenos oficios.

En Caracas, 10 de Marzo de 2015.   


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico