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sábado, 19 de marzo de 2022

Rusos contra la censura muestran gran valor, por @El_Leon


León Hernández 18 de marzo de 2022

@El_Leon

Periodistas y ciudadanos rusos contra la censura: valor sin límites

Rusos contra la censura: en diversos momentos en la historia, el ser humano ha demostrado cómo vencer la censura. Esto a pesar de los mecanismos cada vez más férreos y sofisticados para imponerla.

Este lunes, la periodista rusa Maria Ovsiannikova, editora de un noticiero de la televisión estatal, se colocó detrás del ancla del espacio audiovisual, con una pancarta en mano, en rechazo a la acción bélica de su país contra Ucrania.

Tras un par de segundos, un titubeante director de cabina sacó la imagen del aire, para colocar un video de un hospital. La productora se enfrenta a entre tres y quince años de cárcel por esa osadía.

Entretanto, la censura rusa detiene a ciudadanos por portar carteles en blanco, en reclamo contra la mordaza estructurada en forma de leyes que legitiman la censura.

Circulan imágenes de dos mujeres rusas detenidas por declarar ante la cámara de un medio de comunicación.

Así, no dejando espacios para probables opiniones a ser si quiera emitidas, los agentes del orden interpretan el anuncio del Ministerio del Interior en Rusia, sobre tomar “todas las medidas necesarias” ante acciones que el estado ruso estime, y citamos literalmente, “agresivas o provocadoras”.

Y las detenciones no son lo único contra la comunicación en esa nación. También cerraron Instagram en Rusia.  

El derecho a la comunicación parece contrario a regímenes de corte autoritario. ¿Por qué?

Estima usted que un gobierno de corte dictatorial, ¿estaría interesado en que las personas se comuniquen?

¿Cree usted que la comunicación, el entendimiento, la articulación social producto del diálogo, el contraste de ideas y racionamientos, el derecho a disentir, tiende por naturaleza a ser contrario a las pretensiones hegemónicas?

Evalúe usted respuestas a partir de estos otros casos.

En China están censurados Google, Facebook, Twitter, Instagram, Wikipedia y Gmail.

En China están censurados Google, Facebook, Twitter, Instagram, Wikipedia, Gmail. Aplican lo que llaman el “Gran Cortafuegos”, con el cual se controla y censura el flujo de datos, especialmente en la China Continental.  

Allí, saben poco de la represión en sus plazas, historias que han borrado del mapa digital y que no penetran en el ecosistema mediático.

Gran parte de los chinos desconfía de la televisión y los diarios. Siendo así, algunos se comunican con lenguajes encriptados a través de mensajería y microblogs.

También, al igual que ocurre en nuestro país, por cierto, las personas recurren a VPNs. Un tipo de conexión encriptada que no puede ser rastreable, a fin de poder acceder a sitios web y a aplicaciones que han sido bloqueadas.

En Cuba, Nicaragua y Venezuela han establecido métodos y mecanismos de censura directa e indirecta, a fin de que usted también deje de comunicarse libremente.

A los cierres de emisoras de radio, televisión y expropiaciones de infraestructura comunicacional, se han sumado procesos judiciales y detenciones de periodistas. Los llevan presos bajo supuestas investigaciones por instigación al odio, terrorismo, entre otras.

No obstante, ciudadanos y comunicadores comparten un boca a boca para encontrar vías a fin de mantenerse conectados con la realidad. Aunque la capacidad de articulación social se haya visto mermada por el miedo y la persecución de la disidencia.

¿Qué lleva a una persona a levantar una pancarta que señala un no a la guerra en televisión abierta, en una nación como Rusia?

Algunos tienen la completa convicción de que su señal será identificada y que tiene el poder de decirle a otros que no están solos.

Saber que puede levantar el ánimo para, en rebeldía, gritar al mundo que a pesar de los silencios impuestos, el espíritu humano intenta conectarse con el otro. Conectar con quien comparte llanto, indignación y necesidad de cambio.

Rusos contra la censura: la comunicación no es algo que se pueda eliminar con decretos ni presidio.

Se le restringe y limita, pero ejemplos históricos sobre comunicación en la clandestinidad han existido, sin importar la ideología de la dictadura.

¿Quién olvida la prensa clandestina en regímenes como el de Pérez Jiménez, Franco y Pinochet?

Los ejemplos dejan atrás las tendencias de izquierda y derecha, poniendo sobre la mesa a dos tipos de personas: opresores y oprimidos.

Con el caso de estos rusos y de otros muchos en la historia, como el de los jóvenes del grupo la Rosa Blanca en la Alemania Nazi, el mundo atestigua, hoy en tiempo cuasi real, como el valor se manifiesta en seres que deciden expresarse, sin importar el costo.

¿Puede ser la censura inviolable?

¿Puede el totalitarismo acallar por siempre la noción de justicia y libertad?

León Hernández

@El_Leon 

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