PEDRO PABLO PEÑALOZA 22 de junio de 2023
@pppenaloza
“¿Qué debe hacer la oposición?, ¿echarse a
llorar y lamentarse de su suerte? Ha llegado la hora de trabajar y levantar una
verdadera plataforma unitaria que dé orientación y conducción a la oposición.
El reto es enorme. Todos deben sumar y preparar a los venezolanos para una
etapa que promete ser muy compleja”.
Quizá ha llegado la hora de hablar en serio. De tratar a los venezolanos como gente adulta. La decisión del régimen chavista de cambiar -otra vez- a su Consejo Nacional Electoral (CNE) debe llevar a revisar una serie de factores de manera descarnada para enfrentar los desafíos del futuro. Vamos por partes:
1) El “acuerdo”: se
destacaba que el actual CNE era producto de un “acuerdo político”, que al final
ha demostrado su fragilidad. Aquella negociación fue encabezada por Henrique
Capriles y miembros de la sociedad civil. Un sector opositor la cuestionó,
argumentando que debilitaba la “interlocución” con el chavismo y los aliados
internacionales, y que no contaba con un mecanismo formal. Sin embargo, los
promotores esgrimían sus razones: romper el inmovilismo, dejar atrás una
política fracasada, volver al voto y tender puentes con los rojos. Sin perder
el control sobre el CNE, el chavismo hizo las concesiones que estimó
pertinentes y hoy liquida el “acuerdo”. Queda en evidencia la debilidad de esta
fórmula, que no contaba con las herramientas para hacer respetar lo
pactado.
2) México: Aquí
no existe. Nadie lo nombra. A diferencia del diálogo “paralelo”, tiene
memorando de entendimiento, acompañamiento internacional y una agenda que
incluye el tema electoral, pero no resuelve. Nadie espera que el nuevo CNE
salga de un México sin peso en la opinión pública, congelado y empantanado.
Debe recordarse, además, que México tiene como objetivo alcanzar un “acuerdo de
convivencia” que cada vez se ve más lejos. ¿Cómo lograr un pacto con el
chavismo? Allí queda.
3) El “mejor” árbitro: El
CNE ha estado, está actualmente y estará bajo control del chavismo. Hablar del
CNE como si se tratara de una poder autónomo e independiente es un
despropósito. El actual CNE no ha podido garantizar ni su continuidad, mucho
menos iba a ofrecerles garantías a los votantes. El chavismo utilizó a este CNE
para las regionales. Cumplida su labor, el Gobierno lo desecha y resuelve dar otra
vuelta de tuerca de cara a la elección que sí le importa: la presidencial.
4) El “más malo”: luego
de haberla ratificado como rectora, el PSUV envió al Tribunal Supremo de
Justicia a Tania D’Amelio, la figura de mayor peso político del CNE. De Pedro
Calzadilla se dice que no tenía ni conocimiento ni interés en el sistema
electoral, y que tampoco se distinguía por sus habilidades discursivas.
Claramente el chavismo necesita otro elenco para la tormenta que viene. No
obstante, al margen de los nombres, el problema siempre es el mismo: el CNE ha
sido, es y será el brazo electoral de Miraflores. Siendo así, votar no puede
depender de la composición del CNE. Nadie vota “por” el CNE. Al menos desde el
campo de la oposición, se debe votar por una opción que sepa interpretar los
deseos de cambio de las mayorías. ¿Cuál CNE no ha sido “espantavotos”? Sí,
precisamente ese es su fin. Debe recordarse que los triunfos electorales más
importantes de la oposición -reforma 2007 y AN2015- se lograron con un
solitario rector en la directiva. Pero había organización y compromiso
político. La clave.
5) Ni-Ni: El chavismo repite
incesantemente una gran verdad: “Ni por las buenas ni por las malas” está
dispuesto a entregar el poder. Todo lo que hace siempre apunta en ese sentido.
No es un bluff ni palabrería hueca. Frente a esto, ¿qué debe
hacer la oposición?, ¿echarse a llorar y lamentarse de su suerte?, ¿apelar a
mensajes de autoayuda?, ¿dejar todo en manos de unas primarias multitasking,
que servirían para escoger al candidato, superar los pleitos internos, y
relanzar la unidad?
Sin
duda, ha llegado la hora de trabajar y levantar una verdadera plataforma
unitaria que dé orientación y conducción a la oposición. El reto es enorme y no
puede recaer en una sola persona. Todos deben sumar y preparar a los
venezolanos para una etapa que promete ser muy compleja.
En serio: Voto, sudor y lágrimas.
PEDRO
PABLO PEÑALOZA
@pppenaloza
Invitamos
a suscribirse a nuestro Boletín semanal, tanto por Whatsapp como vía correo
electrónico, con los más leídos de la semana, Foros realizados, lectura
recomendada y nuestra sección de Gastronomía y Salud. A través del correo
electrónico anunciamos los Foros por venir de la siguiente semana con los
enlaces para participar y siempre acompañamos de documentos importantes,
boletines de otras organizaciones e información que normalmente NO publicamos
en el Blog.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico