Grant Torres 03 de enero de 2022
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Más de
30 años han transcurrido desde que el gobierno de Carlos Andrés Pérez se
tambaleó por el Caracazo. La gente rechazaba una serie de medidas bautizadas
como el Paquetazo y eso desencadenó un estallido social. Hasta ahí la historia
oficial suena lógica y coherente. Pero hay suficientes indicios que dejan
entrever que todo pudo tratarse de un plan diseñado por los sectores más
radicales de la izquierda nacional e internacional, encabezada por Fidel
Castro.
Las medidas económicas que mayor impacto tuvieron y que habrían generado el estallido fueron el alza en el precio del combustible y el incremento en el valor del pasaje del transporte público. No obstante, en los periodos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro los problemas de los venezolanos se han agravado con creces y ha quedado demostrado en estos años, que ese tipo de protestas masivas en Venezuela no es algo que pueda surgir espontáneamente, sin una convocatoria abierta que haga un llamado a salir a las calles.
De
acuerdo con la información publicada por la periodista Milagros Socorro,
el general de División Manuel Heinz Azpúrua, entonces Jefe del Comando
Estratégico del Ejército situado en Caracas, —antes fue jefe de la Dirección de
los Servicios de Inteligencia y Prevención— consideró que las acciones fueron
ocasionadas por grupos interesados en generar caos, quienes habrían iniciado
los disturbios pero no pudieron controlar lo que pasó después, ya que a su
juicio el control fue a parar a manos de la delincuencia. En su opinión el 27
de febrero estuvo vinculado con el golpe de Estado de 1992.
Por su
parte el expresidente Carlos Andrés Pérez al ser consultado sobre el Caracazo
llegó a indicar: “Al transcurrir el tiempo me di cuenta de que se trataba
realmente de una conspiración que estaba en marcha desde entonces contra mi
gobierno y contra Venezuela”, declaró al periodista Víctor Amaya. Pérez admitió
que al principio pensó que los eventos fueron producto de la situación del
país, pero con el tiempo llegó a una conclusión distinta. “El
paquete económico no fue la causa del llamado estallido social ya que mi
gobierno apenas tenía días en funciones. El llamado estallido social fue
simplemente el inicio de una acción subversiva que se venía gestando y que hoy
vemos en qué está derivando”, contestó en el año 2005 CAP al mencionado
comunicador.
También
hay testimonios que aseguran que Fidel Castro estuvo detrás de lo ocurrido el
27 de febrero y los sucesivos días, repartiendo armas y colocando
francotiradores para generar un ambiente de confusión y desorden generalizado.
El excomandante del Ejército de Venezuela Carlos Julio Peñaloza dio fe de ello,
en una entrevista concedida al diario El Nuevo Herald, señaló que
durante la toma de posición del presidente Carlos Andrés Pérez el 2 de febrero
de 1989, Fidel Castro aprovechó su visita al país para preparar la insurrección
con civiles y militares adeptos a la dictadura cubana, y se habrían
introducido «numerosas cajas que contenían armas», señaló Peñaloza.
El
excomandante Peñaloza detalló que las cajas llegaron a territorio venezolano en
tres aviones de Cubana de Aviación y entraron por la rampa presidencial, pero
“debido a coordinaciones con agentes del alto gobierno, la comitiva y los
pesados cajones pasaron sin revisión en el aeropuerto”, explicó.
Teniendo
en cuenta que durante esos años Castro necesitaba desesperadamente aliados
económicos para poder mantener su “revolución”, no es de extrañar su especial
interés en colocar sus fichas en Venezuela. Hay demasiadas evidencias que
revelan todo un entramado en el que habrían participado personajes de distintos
ámbitos para allanarle el camino a Hugo Chávez hacia la toma del poder. Cuando
ocurrió el Caracazo Chávez estuvo desaparecido 3 días. Eso de acuerdo con la
versión del general Heinz Azpúrua, en la que dio a conocer que durante los
disturbios Chávez se reportó enfermo de lechina (varicela), pero nunca hubo constatación
de ello por parte de inteligencia militar. Chávez fue investigado desde 1988
por actividades de conspiración, sin embargo pudo burlar todos controles
internos hasta que intentó su fallido golpe de Estado del 4 de febrero de 1992.
Los
sucesos que iniciaron aquel lunes del 27 de febrero de 1989 dejaron una herida
que todavía no ha sanado. Aún hoy se desconoce el número total de víctimas. Las
cifras oficiales arrojaron un reporte de 276 fallecidos, pero de
manera extraoficial se habla 3000 desaparecidos.
Las
dudas sobre el origen de los hechos siguen existiendo. Le invito a no
conformarse con la historia oficial que nos cuentan año tras año, le exhorto a
plantearse una pregunta que aún sigue en el aire después de más de 30 años: ¿El
Caracazo fue un estallido espontáneo o fue plan orquestado?
Grant
Torres
@granttores
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