lunes, 14 de noviembre de 2016

Estrategia política vs. Diálogo, @ffacchinb




Por Fernando Facchin B., 11/11/2016

El diálogo es un eslabón más de una larga cadena de hechos que tienen sumido en la tragedia y la desgracia al país. El diálogo es para el régimen un laberinto mental que le agobia y le aterra, pero con la farsa del diálogo se ha burlado groseramente del país y ha emprendido groseras violaciones a la CRBV, con el celestinaje judicial y del CNE. Por tal razón, la oposición debe presentar una nueva estrategia de lucha política. En definitiva, el diálogo no es el problema, pero tampoco es la solución. Estamos atrapados en sórdidas malformaciones estalinistas que impone el régimen.

Por estrategia política debemos entender un patrón de decisiones coherentes, unificador e integrador, que defina una proyección a largo alcance para el desarrollo de la lucha a favor de la democracia. Lamentablemente hoy esa proyección no existe. No se trata de ignorar la crisis, sino verla como un aviso que nos da la historia, como un desafío frente al futuro. La estrategia política a seguir debe estar fundada en los principios básicos de la democracia social moderna.

En la actuación de los “caudillos” opositores se observa una falta de coherencia, indefinición de objetivos y estrategias, lados débiles de la alternativa democrática que actúa de forma errática, reactiva y defensiva, nunca ofensiva, políticamente hablando, esto no es una crítica, es la simple constatación de una realidad, que ha permitido que el régimen avance sin obstáculo alguno violando nuestros derechos ciudadanos, se siente que estamos desarticulados, se siente en el ambiente que no existe un verdadero liderazgo que articule a la alternativa democrática, que demuestre capacidad de unir y dirigir a un gran foro para compartir las estrategias y fijar un objetivo común para consolidar una fuerza contundente, capaz de aglutinar a la sociedad y hacer un solo bloque que actúe con audacia, sagacidad y un discurso orquestado.

Es el momento preciso para preguntarnos ¿Qué país queremos?  Llegó el momento para que los venezolanos seamos capaces de definir el país que queremos, necesitamos unidad nacional efectiva para triunfar y luego participar mancomunadamente en la erradicación total de los vicios que nos agobian y avergüenzan, debemos construir una estrategia y una visión de país, requerimos un cambio estructural de abajo hacia arriba, tomando como base para el mismo el protagonismo de la juventud y la sociedad quienes demandan una dirigencia articulada, civilista y solidaria, con un discurso unitario y coherente, para un lograr el cambio hacia la gobernabilidad democrática, sin los endémicos vicios que todos conocemos. Defraudar a la sociedad civil es muy peligroso.

Estoy convencido que no existe una estrategia política efectiva para el momento actual. Sabemos cuál es el origen de los grandes problemas que nos aquejan. Estamos conscientes que existe omnipresencia del régimen, existe opresión, persecución, prostitución política y revanchismo. No hay solución política ni jurídica por el quiebre constitucional. Lo único que podemos esperar es un pacto político opositor que, con suficiente base intelectual, moral, social y política, nos presenten una estrategia válida, nos abra el camino para la solución donde la mediocridad política supera la importancia del futuro.

Basta de diagnósticos erráticos y reactivos, esto no es una crítica, es la simple constatación de una realidad, que ha permitido al régimen avanzar sin obstáculo alguno; se siente que estamos desarticulados, por cuanto cada quien trabaja por su lado, por sus propias individualidades, al mejor estilo caudillista, se siente que no existe un verdadero liderazgo que demuestre capacidad de unir y dirigir a un gran foro para compartir las estrategias y fijarse un objetivo común para consolidar una fuerza contundente, capaz de aglutinar a la sociedad y hacer un solo bloque que actúe con audacia y sagacidad. La crisis persistirá mientras no tengamos una estrategia política distinta a la del régimen.

Escrito para:






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico