Por Vanessa Moreno Losada
María González (nombre
ficticio para proteger su integridad) tiene 13 años. En sus brazos duerme a un
niño de una semana de nacido quien desde el miércoles 15 de julio no tiene
padre. Gustavo Jiménez, cinco años mayor que ella, fue asesinado por las
autoridades policiales en medio de un robo de un vehículo en el municipio
Andrés Bello de Miranda.
Así lo contó el padre de la
víctima, el 19 de julio en el porche de su casa ubicada en el caserío Las
Delicias de esa localidad. Mientras llegaban los conocidos para dar el pésame,
María amamantaba a su bebé y guardaba silencio durante la visita.
Ella tiene dos años menos de
las estadísticas que contabilizan a 2.037 adolescentes entre 15 y 17
años que son viudas en Venezuela, presentadas el martes 17 de noviembre
por el Centro Comunitario de Aprendizaje (Cecodap), organización que vela
por los derechos humanos de los niños y adolescentes.
Dentro de este contexto, Abel
Sarabia, psicólogo infantil de Cecodap, mostró un análisis de una encuesta
realizada en 2013 por el Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales de
la Universidad Católica Andrés Bello (Ucab), en el que se destacó el ámbito
escolar, laboral, político y civil de los adolescentes entre 15 y 17 años.
“La encuesta no tiene este
dato discriminado por zonas y causas de la muerte del cónyuge. Sin embargo,
sabemos que en 93% de los homicidios de menores de edad las víctimas
fueron chamos de 12 a 17 años; que 91% de las víctimas de la violencia son
varones; y que 25% de las chicas en condiciones de pobreza están en una
relación de pareja. Estos son factores de riesgos que nos hacen deducir que existe
una relación entre la violencia y la razón de viudez de estas adolescentes”,
explicó Fernando Pereira, director de Cecodap.
Desde el 16 de octubre de
2014, los jóvenes de 16 años de edad pueden contraer matrimonio
legalmente, siempre y cuando sus padres avalen la unión y un tribunal de
protección de niños y adolescentes autorice el casamiento.
El estudio reveló además
que 106.524 adolescentes manifestaron tener algún tipo de relación de
pareja, uniones que están más presentes en los estratos socioeconómicos más
pobres.
“Hay una tendencia en las
chicas en condiciones de pobreza a buscar una pareja. 70.189 mujeres aseguraron
estar casadas o en situación de cónyuge, mientras que 10.029 entrevistados
masculinos dijeron estar en una relación”, explicó el analista.
Sin futuro
Edel Lemus, Manuel Villarroel,
Jimbert Hernández, Carlos Hernández y Kluivert Roa son algunos nombres de
adolescentes que no alcanzarán la mayoría de edad. El primero fue asesinado en
Artigas, después de presenciar un homicidio; el segundo recibió varios batazos
dentro de su casa, por un joven de 18 años que quería robarlo. Jimbert fue
baleado por un motorizados cuando ayudaba a su padrastro en una venta de
hortalizas en Cantaura, Anzoátegui; en esa localidad, el mismo día,
delincuentes le dieron un tiro en la cabeza a Carlos, al
intentar defender a su padre de un atraco. El último fue asesinado por un
policía durante protestas estudiantiles, cerca de de la Universidad Católica
del Táchira.
Estos menores de edad de 16,
12, 15, 13 y 14 años son parte de los 457 homicidios, a nivel nacional,
que contabilizó Cecodap. Para dar con la cifra roja, los activistas
hurgaron en 7.790 artículos de prensa durante el primer semestre de este año.
“Los datos que presentamos es
lo que se logra conocer por los medios. Esta vez nos enfrentamos a la reducción
las páginas de los periódicos, a la reducción de la sección de sucesos y a la
reducción del centimetraje de las notas. Tenemos entonces un vacío de
cifras oficiales y dificultades para conseguir información completa”, reconoció
Carla Villamediana, periodista de Cecodap quien expuso las estadísticas
recogidas.
De acuerdo con el balance
semestral de la organización, en este periodo se incrementaron los casos de
violencia que afectaron a los menores de edad en 12%, en comparación con el
mismo rango de tiempo de 2014, en el que se registraron en números netos 2.780
incidencias.
El homicidio es el tipo de
violencia más común entre los reportes. Este año, al menos 348 asesinatos de
niños y adolescentes se registraron en sus comunidades, 68 ocurrieron
durante presuntos enfrentamientos con funcionarios policiales y 15 dentro
del seno familiar. En este caso, Villamediana resaltó que los culpables de las
muertes de esos menores de edad fueron miembros del grupo familiar.
“Estamos preocupados porque
año a año la violencia en el entorno social de los niños y adolescentes
incrementa. Por heridas de armas de fuego y blancas contabilizamos 168 chicos
heridos, otros 63 fueron testigos de un asesinato y 34 fueron víctimas de
un robo. Ellos no están seguros en su comunidad”, aseguró Villamediana y agregó
que fueron secuestrados 22 chamos y 28 familias denunciaron que sus hijos
desaparecieron.
La escuela se vuelve zona roja
Si el entorno social de los
niños y adolescentes venezolanos es el más susceptible a la violencia, este año
la escuela no es un escape para la tranquilidad de este grupo etario.
Según los datos de
Cecodap, 949 casos de agresiones en el entorno escolar se registraron
entre enero y junio de 2015, 74% más que el año pasado.
“En este renglón
contabilizamos todos los hechos que interrumpen con el desarrollo escolar de
los jóvenes. Por ejemplo, los 226 hurtos a sus instituciones, las 221 protestas
de docentes y padres y los 46 disturbios estudiantiles. Sin embargo, no podemos
determinar cuál es la cantidad de afectados totales por estos hechos”,
manifestó Villamediana.
Para los defensores de los
derechos humanos de niños y adolescentes la cantidad de 10 estudiantes heridos
en sus escuelas es preocupante. Dos de ellos fueron lesionados por armas
blancas, otros dos por una bomba molotov y uno por balas. Los demás quedaron en
medio de riñas entre alumnos.
Entre aulas se registraron dos
homicidios y una muerte en guardería. El 19 de abril en Tumeremo, estado
Bolívar, dos muchachas pelearon a golpes en su unidad educativa, los padres de
una tomaron venganza y atacaron a la otra hasta matarla. La fallecida tenía 16
años de edad. El 26 de febrero, un estudiante de primer año de la Unidad
Educativa Juan Lovera, ubicada en Macarao, fue asesinado de un disparo en la
cabeza, cuando estaba en el patio de la institución. Había peleado con un
compañero y decidió vengarse. El 15 de febrero, los padres de Aaron Sánchez
responsabilizaron por su muerte a la encargada del maternal en el que lo
dejaban: “Pusimos la denuncia en el Cicpc, pero nos dicen que no pueden
detenerla hasta ver la autopsia”, dijo a la prensa la madre del niño fallecido.
Hay 71.814 adolescentes sin
estudiar
“71.814 muchachos abandonaron
los estudios. Entre ellos existe 15% de chicas que salieron del sistema
educativo a causa de un embarazo, mientras que 22% de los chicos dice que no
estudia porque tiene que trabajar”, expuso Sarabia y especificó que para el
estudio se entrevistaron a 1.650.536 adolescentes en todo el país.
“Aunque solo representan 10%
del grupo no escolarizado, 37.553 chamos dijeron las clases no son una
opción para mejorar su situación económica. Preocupa tener esa cantidad de
chamos desmotivados por los estudios”, consideró Sarabia.
El psicólogo infantil resaltó
que los datos obtenidos por los investigadores muestran una marcada desigualdad
en cuanto a las condiciones de vida de los encuestados. Por ejemplo, en
las ciudades pequeñas del país se concentra 64,7% de la pobreza en este
grupo etario, frente a 31% de pobreza que existe en el Área Metropolitana de
Caracas.
“Aunque no hay una relación
lineal, se aprecia un mayor empuje al trabajo en adolescentes en
condiciones de pobreza y ámbitos rurales. 62% de los jóvenes que se
activan en el campo laboral cuando aún no cumplen los 15 años pertenece al
estrato socioeconómico más pobre. En total, tenemos a 167.449 adolescentes
trabajando”, afirmó Sarabia.
En el campo político, el
experto aseguró que a pesar de que la mayoría de los encuestados manifestó no
tener interés en el tema, 33% se ubica en una tendencia de derecha, mientras
que 24% se identifica como de izquierda.
Manifestó que existe una
valoración negativa de la gestión del gobierno entre los menores de edad
entrevistados. Para ellos las autoridades hacen poco para resolver los
problemas de la economía (70%), la corrupción (63%), la protección de derechos
ciudadanos (56%), respeto a los principios de democracia (55%) y la pobreza
(53%).
17-11-15
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