Jesús Elorza Garrido 21 de
junio de 2012
Los
guardias de seguridad del Presidente, estaban muy preocupados al ver a su jefe
caminar de un lado a otro, repitiendo a cada instante "tráiganme a mi
abuela". Eso, no es posible, esa señora tiene más de veinte años de
muerta, dijo uno de los milicianos. Será que esta alucinando por la
quimioterapia, dijo otro.
A lo
mejor, es que mandó a exhumarla como al Libertador para continuar con sus
rituales de santería.
Pero,
el panorama cambio cuando lo escucharon decir que a su abuela se la llevaron
sin su consentimiento. Nadie pidió permiso para sacarla del país.
Entonces,
estamos en presencia de profanadores de tumbas, dijo el cubano que dirige a la
guardia pretoriana del palacio. Si sacaron los restos de la señora Rosa Inés
Chávez sin una orden judicial, estamos en presencia de un flagrante delito. No
me cabe la menor duda, continuo diciendo el antillano, que esto debe haber sido
orquestado por la CIA para perjudicar al gobierno revolucionario de mi
Comandante Presidente. Lo extraño es que Adán no se haya pronunciado al
respecto. Los restos de "Mama Rosa" reposan en Barinas….que raro, voy
a llamarlo para ver qué está pasando.
El
hermano del Presidente, sorprendido por la llamada desde Miraflores, le dijo a
su interlocutor que se estaba desayunando con la información que le estaba
dando y que había ordenado una investigación del caso. La conclusión, fue la de
estar en presencia de un rumor quizás promovidos por los oligarcas para desestabilizar
al régimen. Tranquilos por allá que la abuela sigue en su sueño eterno en
tierras barinesas.
Nuevamente, retumbó en el Palacio la voz del Presidente: no voy a dejarme intimidar por los imperialistas o me devuelven a mi abuela o rompemos relaciones. Localizen a Nicolás para que de inmediato la Chancillería eleve una nota de protesta y un ultimátum contra el gobierno de la Republica Alemana.
¿Y que hace Mama Rosa? tan lejos se preguntaron todos en Miraflores.
El
Líder Único de la revolución en estado furibundo le gritaba a sus acompañantes
que no se iba a calar el silencio de Ángela Merkel ante el "robo
sagrado" que organismos de su gobierno le habían hecho a Venezuela. Desde
que el camarada Pedro Calzadilla Ministro de Cultura me informo que una expedición
de arqueólogos alemanes habían sacado ilegalmente desde Santa Cruz de Mapauri
en el Parque Nacional Canaima, una piedra semipreciosa de Jaspe de 30 toneladas
de peso para exhibirla en el Parque Tiergarten como una de las reliquias del
"Global Stone Projekts" hemos hecho todos los reclamos necesarios por
la vía diplomática y se han hecho los pendejos. Bueno iremos a la guerra contra
el imperio alemán, esa piedra representa uno de los elementos sagrados para el
pueblo Pemón que la considera un miembro de su comunidad y la bautizaron con el
nombre de "Abuela Kueka".
Los
alemanes "me sacaron la piedra" y no se los voy a perdonar….ladrones
¡devuélvanme a mi abuela! Camino a su dormitorio, el presidente le comentó a su
enfermera permanente que si se descuidaba, los imperialistas también van a
querer llevarse la Piedra del Cocuy.
Tomado de: http://querrequerre.com/elorza.html
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