Recibido por correo
electrónico, 12/07/2012
El reconocido
epidemiólogo e investigador, Dr. Oswaldo Godoy ha sido agredido en sus derechos
civiles, por la intolerancia, la exclusión, la discriminación y el desenfreno
sectario del gobierno chavista.
Sin ninguna explicación
y arbitrariamente, fue removido hoy del cargo técnico que desempeñaba como
epidemiólogo del Hospital Vargas de Caracas, en el que realizó un
extraordinario trabajo de recopilación de las estadísticas hospitalarias y los
indicadores de gestión.
Numerosos pacientes
recibieron los beneficios de su conocimiento y sabiduría, aplicada a
situaciones individuales de importancia epidemiológica que ponían en peligro su
vida. También fue valioso su empeño en que se cumplieran todas las medidas de
protección del personal de salud, ante peligros derivados del ejercicio de la
profesión.
La recopilación
meticulosa, continua y consistente de las estadísticas del hospital que realizó
por un lapso superior a 10 años ha servido para poner en evidencia las
carencias y el abandono de nuestra institución hospitalaria y orientar a las
autoridades del hospital en la toma de decisiones.
Sus trabajos
epidemiológicos de campo realizados por largos años en el MSAS, imposible
de enumerar en esta breve nota, son méritos destacados que contribuyeron
efectivamente al control de numerosas amenazas para la salud colectiva de los
venezolanos y han servido como modelos exitosos para nuevas situaciones.
En los últimos 5 años,
sus asesorías, orientaciones y contribuciones a la Red Defendamos la
Epidemiología y a la Comisión de Epidemiología de la Red de Sociedades
Científicas Médicas Venezolanas han sido invalorables. Entre ellos, el análisis
del Programa Nacional Ampliado de Inmunizaciones, el estudio de las tendencias
de los indicadores de salud como la mortalidad Materna y la Mortalidad
Infantil, análisis de enfermedades emergentes y re emergentes como la
enfermedad de Chagas adquirida por vía oral, Fiebre Hemorrágica Venezolana,
Influenza A(H1N1), Meningitis Meningocócica, fiebre Mayaro, brote de cólera
importado en Venezuela (2011), malaria, entre muchos otros. Poder haber
recibido su asesoría técnica y transmitido sus conocimientos ha sido un
verdadero privilegio para quienes conformamos la Comisión de Epidemiología de
la RSCMV; quienes ayer fueron sus compañeros de trabajo en el Ministerio y
quienes sentimos un gran respeto por su persona, por su humildad, generosidad,
ecuanimidad, rectitud, valentía y respeto por la honestidad profesional,
virtudes personales que lo distinguen.
Solo es explicable la
injusta e innoble decisión de removerlo de su cargo por la incompatibilidad
absoluta entre los oscuros intereses políticos del regimen y el ejercicio
profesional probo, que no tolera imposiciones contrarias a la libertad de
conciencia de un honorable médico venezolano que ha demostrado a toda prueba su
dignidad, impermeable a la coacción y a las retaliaciones.
Por eso, sus amigos y
colegas le manifestamos públicamente nuestra inquebrantable solidaridad, a la
vez que exigimos un desagravio a su persona, que hoy representa el sentir de la
gran mayoría de los médicos sanitaristas y epidemiólogos del país, indignados
por las prácticas de exclusión, intolerancia e irrespeto a su persona, por la
única razón de no compartir las ideas de un régimen autoritario, cada vez más
extraviado del camino de la sensatez, del bien y de la justicia.
Caracas 11 de julio de
2012.
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