Por Carlos Romero M.,
05/07/2012
Giovanni Sartori afirma que la Democracia siempre está potencialmente en
peligro porque para la gestión y la creación de la buena ciudad confía en sus
ciudadanos, en otras palabras el autor señala que la democracia es una “gran
generosidad”[1].
Para Sartori la democracia es una maquina, la mejor que se ha inventado
para permitir al hombre ser libre, y no estar sometido a la voluntad arbitraria
y tiránica de otros hombres; y los ciudadanos somos sus maquinistas, por lo
tanto si no somos capaces de entender el funcionamiento y el valor de esa
máquina, entonces entra en peligro la democracia.
En Castellón, España, el pasado 3 de julio del 2012 los maquinistas: el
Alcalde, la Concejala responsable de Participación Ciudadana y una
representación vecinal, anuncian en conjunto la realización del I Congreso Intermunicipal de Participación
Ciudadana, cuya presentación formal lleva como título: "Comunicación, Estrategia y
Participación en el nuevo modelo de Gobernanza municipal”[2].
El objetivo que persigue el Congreso -dice la nota de prensa- es “avanzar y profundizar en el desarrollo de
técnicas que mejoren la eficacia y la calidad de la gobernanza municipal, y
dotar a los agentes sociales de instrumentos y habilidades para la acción
participativa[3]". En otras palabras el objetivo tiene que ver
con la forma de operar la máquina llamada democracia desde el ámbito más
inmediato al ciudadano: el poder local.
Para el Alcalde del Ayuntamiento de Castellón el buen funcionamiento del
Municipio se debe a la corresponsabilidad que se ha asumido en la construcción
del futuro de la ciudad; en este sentido, éste Congreso permite a las
autoridades locales tomarse un “tiempo para unirse a los ciudadanos y
averiguar hacia dónde conduce el camino que han emprendido muchas
administraciones locales de involucrar la participación como herramienta para
asumir la corresponsabilidad en la construcción del futuro de la ciudad[4].”
Es importante destacar que en enero 2012 la Generalitat Valenciana
reconocía al Ayuntamiento de Castellón con el IV Premio de Participación
Ciudadana, precisamente por su extraordinaria experiencia promoviendo el
encuentro permanente e institucional entre ciudadanos y autoridades locales
para debatir y discutir temas públicos locales[5].
En la oportunidad de recibir el IV Premio, el Alcalde destacaba que
desde 1988 cuando se puso en marcha el Consejo de Participación Ciudadana, se
ha venido desarrollando varias iniciativas que permiten a los ciudadanos ser
oídos y sentirse parte de la gestión local, entre las cuales mencionó:
presupuesto participativo, el Consejo Social de la Ciudad, la Unidad de
Reclamaciones y Sugerencias, la Jornada de Encuentro Vecinal y la elaboración
de la Guía de Asociaciones de Vecinos.
La información oficial del Ayuntamiento identifica al Consejo Social de
la Ciudad como órgano consultivo de la ciudad, en donde se promueve la
discusión amplía y plural sobre la ciudad y su futuro. Este espacio está
integrado por el Alcalde, quien lo preside; los ex alcaldes; representación de
los Concejales, representación de la sociedad civil organizados en: sindicatos,
empresarios, pescadores, colegios profesionales, federación local de
asociaciones ciudadanas, jóvenes, vecinos elegidos entre los que figuran en el
censo de elecciones municipales, entre otros grupos y asociaciones[6].
Este ejemplo de Castellón permite ver en la práctica una dinámica
política a través de la cual, la representación política se complementa con
mecanismos de participación ciudadana en la gestión pública y de esa forma, se
contribuye más efectivamente a profundizar la democracia y su gobernabilidad.
Soñar con una instancia como el Consejo Social de la Ciudad en el diseño
del poder local en Venezuela, no es imposible, tal vez el Consejo Local de
Planificación Pública, pueda ser útil si es transformado como ese espacio
consultivo de la ciudad. Pensar en una sociedad que participe, no es tampoco
imposible, porque las leyes favorecen a ello; pero pensar en desarrollar el
principio de la corresponsabilidad en Venezuela sólo es posible cuando los
maquinistas logremos que la participación se pueda ejercer con libertad y sin
condicionamientos ideológicos.
Pensar en una participación ciudadana libre, incluyente e institucional,
exige recuperar al Municipio como forma de organización del territorio
nacional, tal y como lo garantiza la Constitución, y requiere que podamos tomar
un tiempo para construir consensos básicos que permitan repensar al municipio
que el país necesita. Para ello hay que dar un primer paso: votar el 7 de
octubre y recuperar la eficacia de la Constitución.
[2] LA PLANA AL DIA. 3 de julio de 2012. Online: http://www.laplanaaldia.com/castello/noticias/68604/castellon-acogera-el-i-congreso-intermunicipal-de-participacion-ciudadana
Tomado de:
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico