Por Luis Homes,
16/12/2013
Maduro logra legitimarse en la Presidencia por un hecho que se conocía de antemano y era evidente. En estas elecciones, estaban en juego un número determinado de alcaldías y se concejalías. Ganaba quien obtuviera el mayor número de ellas. En este caso, el darle un carácter plebiscitario a la elección (o al menos remarcar en ese aspecto) ha podido ser un error, porque aun en el supuesto de que nosotros en la oposición hubiésemos tenido mayor número de votos populares, los ganadores en número de cargos, seguiría siendo el oficialismo. Otra cosa es que esta legitimación (no podría esperarse otra cosa) se haya conseguido – como siempre – por vía del chantaje, de la extorsión electoral, del abuso del poder, con la connivencia de todos los poderes públicos y ahora con nuevos ingredientes: El plasma y la piñata sobre los bienes ajenos.
La legitimación de Maduro deja sin respuesta aparente a la oposición. Quedan fuera de la mesa ( por ahora) las opciones de la constituyente, la solicitud de renuncia, las protestas callejeras y otras opciones que se habían planteado abiertamente antes del 8D. Aparecemos ahora como jugando un papel “reactivo”, frente a lo que hará el gobierno con la crisis económica y social que se avecina en el 2014. Y a mi queda un sabor amargo con aquello de utilizar la opción de “conforme vaya viniendo vamos viendo” , porque me huele a falta de estrategia. O sencillamente buscar que los alcaldes electos tengan un buen desempeño, porque allí no hay estrategia, si no el cumplimiento de una responsabilidad.
Avanzamos? Creo que si, en medio de la infinidad de obstáculos que pone un régimen para conservar su modelo autoritario. La ganancia se traduce en las Alcaldías de Mérida, Maracaibo, Alcaldía Metropolitana, la emblemática de Barinas, San Cristóbal y otras de mucha importancia donde vice la mayor parte de la población del país. A ellos les corresponde hacer un extraordinario trabajo, con miras al país que queremos.
La MUD ha hecho su trabajo, pero si algo queda claro es que aún queda mucho por hacer y que posiblemente no podrá hacerlo solo con los partidos políticos, que es como está concebida esta alianza. Allí cobra idea e importancia la convocatoria a una Gran Alianza Nacional que comprenda como instancia de discusión a las universidades, sindicatos, estudiantes, sociedad civil, para el análisis y discusión de cómo recuperamos la democracia y re institucionalizamos el país. En lo particular, me complace que Ramón Guillermo Aveledo esté consciente de esta necesidad de apertura y de dialogo inter social y político.
Las soluciones electorales son posibles? La respuesta es afirmativa si se hacen las presiones necesarias para la renovación de las autoridades del CNE y se exigen la presencia de observadores internacionales (no chaperones electorales) en los comicios. No habrá técnicamente unas “elecciones libres”, elemento esencial de la democracia, si el árbitro electoral es un mandadero del régimen, como lo demostró la presidenta del CNE al anunciar (con toda su carga interpretativa) los resultados en la noche del 8D.
Lo que nos queda es estar conscientes de la verdadera naturaleza del régimen. Un sistema sobre el ejercicio del poder totalitario, abusivo y enfocado en destruir la disidencia. Si no lo entendemos así, nos seguiremos prestando al juego de la plasmocracia. La destrucción entretenida y divertida del país!
Por ahora este vaso sabe a media chicha y media limonada. Bebida no muy agradable en estos tiempos de Navidad!
http://www.opinionynoticias.com/opinionpolitica/17710-impresiones-post-electorales
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