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domingo, 13 de agosto de 2017

Una fe tan fuerte y capaz de mover montañas en la oración, por @Pontifex_es



Papa Francisco 12 de agosto de 2017

Evangelio según San Mateo 17,14-20

La curación de un endemoniado epiléptico: "Cuando se reunieron con la multitud, se le acercó un hombre y, cayendo de rodillas, le dijo: "Señor, ten piedad de mi hijo, que es epiléptico y está muy mal: frecuentemente cae en el fuego y también en el agua. Yo lo llevé a tus discípulos, pero no lo pudieron curar". Jesús respondió: "¡Generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo estaré con ustedes? ¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? Tráiganmelo aquí". Jesús increpó al demonio, y este salió del niño, que desde aquel momento quedó curado. Los discípulos se acercaron entonces a Jesús y le preguntaron en privado: "¿Por qué nosotros no pudimos expulsarlo?" "Porque ustedes tienen poca fe, les dijo. Les aseguro que si tuvieran fe del tamaño de un grano de mostaza, dirían a esta montaña: "Trasládate de aquí a allá", y la montaña se trasladaría; y nada sería imposible para ustedes" Palabra del Señor

Reflexión del Papa Francisco

El Señor, ¿qué cosa nos responde? Responde: "Si tuvieran fe como un grano de mostaza, habrían dicho a este sicómoro: "Arráncate y plántate en el mar", y les habría obedecido".

La semilla de la mostaza es pequeñísima, pero Jesús dice que basta tener una fe así, pequeña, pero verdadera, sincera, para hacer cosas humanamente imposibles, impensables. ¡Y es verdad!

Todos conocemos a personas sencillas, humildes, pero con una fe fortísima, ¡que verdaderamente mueven las montañas!

Pensemos por ejemplo en tantas mamás y papás, que afrontan situaciones muy pesadas; o en ciertos enfermos, incluso gravísimos, que transmiten serenidad a quien los va a visitar.

Estas personas, precisamente por su fe, no se vanaglorian de lo que hacen, es más, como pide Jesús en el Evangelio, dicen:

"Somos siervos inútiles; hemos hecho lo que debíamos hacer" (Lc 17,10)

¡Cuánta gente entre nosotros tiene esta fe fuerte, humilde, y que hace tanto bien!

[...] Cada uno de nosotros, en la propia vida de cada día, puede dar testimonio de Cristo, con la fuerza de Dios, con la fuerza de la fe.

Con la fe pequeñísima que nosotros tenemos, pero que es fuerte, con esa fuerza dar testimonio de Jesucristo, ser cristianos con la vida. ¡Con nuestro testimonio!

¿Y cómo tomamos esta fuerza? La tomamos de Dios en la oración. La oración es la respiración de la fe: en una relación de confianza, de amor, no puede faltar el diálogo, y la oración es el diálogo del alma con Dios. (Reflexión antes del rezo del Ángelus, 06 de octubre de 2013)

Oración de sanación

Mi Señor, quiero que vengas hoy con todo tu poder y aumentes en mi alma la grandeza de amarte por encima de todo, que nada pueda separarme de Ti.

Que pueda tener una cercanía profunda contigo en la oración. Fortalece mi fe de manera tal que sea capaz de derribar muros y producir obras de amor.

Toca mis sentidos y afínalos para que estén siempre atentos a cada milagro que pones ante mí. Que mi vida vuelva a recobrar sus fuerzas para servirte.

Quiero confiarme a Ti por entero, porque quien a tus brazos se entrega con fidelidad, puede tener la certeza que no quedará defraudado.

Quiero vivir una fe abierta desde el corazón, que arda de deseo hacia Ti y sea capaz de calmar tormentas y cambiar situaciones difíciles en oportunidades.

Arranca de mi corazón toda duda y temor que no me permita encontrarte en medio de las circunstancias que a diario vivo.

Te abro mi corazón para que tu Santo Espíritu venga y haga morada en él, que purifique y sane todo dolor, frustración, desespero y miedo.

Oh mi Dios, Tú mejor que nadie conoces que es lo que necesito. Bendíceme para que mi fe sea firme y viva entregado en amor a Ti y a los demás. Amén

Propósito para hoy

"Haré un esfuerzo especial en mis conversaciones para no sólo evitar hablar mal de los demás, sino que resaltaré sus cualidades

Frase de reflexión

"Hemos de cuidar la tierra para que siga siendo, como Dios quiere, fuente de vida para toda la familia humana". Papa Francisco

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