Los íconos que exhibe el gobierno revolucionario en su trayectoria, 2013-1999

LA IMPOSICIÓN DEL PENSAMIENTO ÚNICO Y LA HEGEMONÍA COMUNICACIONAL.

Por Jesús González Briceño, 19/03/2013

Después de la aprobación de la Constitución Bolivariana de Venezuela en diciembre de 1999,la imposición del pensamiento único en todas sus formas y modalidades fue un objetivo central de la administración chavista, siguiendo las orientaciones del  castro-comunismo y, en general, con base a las teorías y praxis de los regímenes totalitarios de izquierda o de derecha ( soviético, chino, fascista, franquista, castrista, etc.) e inmediatamente en junio de  2000 se inició el proceso de implantación de hegemonía comunicacional con la aprobación de la  Ley Orgánica de Telecomunicaciones y La Comisión Nacional de Telecomunicaciones, CONATEL, creada 1991 pero adecuado para regular y contralor los entes públicos y privados para la trasmisión y difusión televisiva, radial y similares, con una visión monopólica y progubernamental de la concesión de explotación y uso de medios comunicacionales, sobre todo, privados. Este proceso se complementa con la instauración de las misiones educativas de Robinson, Ribas, Sucre y Piar ( analfabetismo, educación primaria y secundaria, superior y  comunidades mineras ); Alma Mater ( profundización de la transformación de la educación universitaria, concebida como un sistema; la ciencia y tecnología, para la adecuación de estas ramas al desarrollo del país, en 2006; la música para la consolidación de las orquestas y coros infantiles y juveniles,( 2007 ), antes creados por el gobierno de CAP. Esta gigantesca operación educativa  perseguía imitar la experiencia cubana y soviética de ideologizar los niños y adolescentes y fue acompañada  de la aprobación de la Ley Resortes, en diciembre de 2004, con el propósito aparente de regular la responsabilidad social de prestadores de radio y televisión, productores independientes y difusión y recepción de mensajes, prontamente convertida en un instrumento de propaganda mediática, censura y represión  comunicativa gubernamental, cuyos efectos nefastos estamos padeciendo hasta la actualidad. Aparte se insistió descaradamente en la implantación curricular bolivariana, planes de estudio y  control del personal de la escuela básica y secundaria  mediante, textos, uso de computadoras, (  canaimitas), la implantación de las guerrillas comunicacionales de niños y adolescentes para defender los mensajes oficiales y, por último, la Resolución 058 del 16 de octubre de 2012, con la finalidad de atar la edad temprana escolar al pensamiento bolivariano y marxista, mediante el expediente de subordinar los aspectos educativos  a las Comunas, el último y más reciente instrumento de ideologización y control estatal, con las Leyes Orgánicas de las Comunas y Ley Orgánica del Sistema Económico Comunal del 2 de diciembre de 2010.

A la par, desde hace más de un lustro, el gobierno ha tratado de extender su control a las universidades autónomas mediante la reforma de las Ley de Universidades el 25/ 12/2010, con acciones terroristas a profesores, directivos, empleados e instalaciones en los campus universitarios y mediante la asfixia presupuestaria y la desaplicación de las normas de homologación de los profesores universitarios a los que ha sumido en ínfimos niveles de sus remuneraciones, agravadas con el elevadísimo proceso inflacionario. Contemporáneamente ha creado una extensa gama de instituciones universitarias bolivarianas con una elevada matrícula de baja calidad académica con cambios curriculares basados en la ideologización y adoctrinamiento castro-bolivariana (marxista).

Este proceso de implantación de control estatal mediante  el adoctrinamiento, ideologización y  disponibilidad  de una gigantesca red de difusión de los medios, ha sido acompañado por un proceso expropiatorio de numerosas emisoras privadas y comunitarias( último dato pasan de 40 ),estaciones televisivas ( RCTE y Ávila TV ), y el chantaje de no renovar las concesiones del espectro radioeléctrico provocando censura previa y   temor en desplegar una línea editorial independiente del régimen. El Sistema Nacional de Medios  Públicos ( recientemente denominado Sistema Bolivariano de Comunicación  e Información, SiBCI, reformado el dos de marzo de 2013) reconstituye una gigantesca red de medios de  toda índole que abarca  6 estaciones televisivas de alcance nacional e internacional (Telesur, VTV, ÁVILA TV, Vive TV, TVES, Televisión Social,) la Radio Nacional de Venezuela con seis canales de diversos contenidos; 2 radios de emisión local e internacional (96.3 FM y Radio del Sur), 231 emisoras comunitarias, circuito radial YVKE Mundial con sus numerosísimas emisoras filiales en todo el territorio nacional; multimedio o Agencia Venezolana de Noticias (AVN), tres medios impresos (Correo del Orinoco, Ciudad Caracas, y Ciudad VLC ); La Cantv (Compañía Anónima de Telecomunicaciones de Venezuela ), otros circuitos radiales (Radial PDVSA, 123 TV, Colombeia y Buena TV ); dos satélites comunicacionales y la reciente instalación y operación, el 21 de febrero de 1013, de la TV Digital, dejando por fuera de él, a Globovisión destinándola a un futuro inmediato a salir del espectro, como canal abierto, si antes no logra controlarla, algo ya previsible a muy corto plazo, confirmada hoy 18 de marzos. ASÍ SE CIERRA EL CÍRCULO DE LA HEGEMONÍA COMUNICACIONAL.

EL vehículo mediático más efectivo del régimen a través de la  figura presidencial, en un escenario público de su colaboradores y  fervientes admiradores reunidos con tal propósito, han  sido las cadenas presidenciales radiotelevisivas, sobre las cuales el Colegio Nacional de Periodistas nos reporta que, desde 1999 hasta noviembre de 2008, se realizaron 1751 cadenas nacionales (según  la Empresa AGB Nielsen Media Reseach, del 3 de enero de 2009)  con una duración de 1.091 horas, 16 minutos y 37 segundos, equivalente a 45 días ininterrumpidos de trasmisión para todo el país y algunas de alcance internacional. Y Carlos Vecchio  nos  informa cuidadosamente que en tres meses de campaña electoral hasta el 22/9/2012, Chávez hizo 27 cadenas radiotelevisivas con duración de cerca 43 horas y 15 minutos (La VERDAD.COM, 25 de septiembre, 2012); y en la anterior campaña electoral del 2006, sumó 616 minutos en 17  emisiones nacionales. Además indagamos que en trece años desde el 23 de mayo de 1999, se realizaron 378 emisiones, equivalente a 69 días ininterrumpidos y consecutivos del Programa Aló Presidente .Ahora bien el actual presidente (e ) Maduro, desde la ausencia de Chávez, el 9 de diciembre, al día de hoy en un lapso de 98 días, ha realizado más de 290 cadenas radiotelevisivas con cientos de horas de trasmisión sobre la vida, las exequias, el sepelio y la asonada golpista del 4 de febrero, con carácter electorero, mientras que los altos funcionarios gubernamentales hablan de respetar el duelo del presidente.

El otro objetivo fundamental del régimen chavista desde su propio inicio en 1999, ha sido la eliminación de los partidos y grupos electorales y civiles opositores con un intenso e incesante proceso de criminalización y judicialización de la disidencia antigubernamental, lo que ha sido parcialmente exitoso con la utilización incestuosa del TSJ y los tribunales subalternos, la Fiscalía General, la Defensoría del Pueblo, la Contraloría General y los medios policiales y militares del Estado que han coadyuvado ilegalmente en este proceso distorsionado de la Constitución y las leyes.

Todo este aparataje estatal comunicacional y de los poderes públicos, junto con el Consejo Nacional Electoral, El CNE, como sostén logístico humana, económico y físico, ha sido empleado vilmente contra la oposición, disidencia e instituciones  democráticas con afectación relevante del Estado de Derecho pero no ha logrado eliminarla ni bajar su moral y que, a pesar de ello, han derrotado al oficialismo en la pasadas elecciones para la Asamblea Nacional con más votos (en diciembre de 2010) y en el pasado reciente, en el referendo constitucional, en diciembre 2007, con una derrota a la reforma constitucional que el mismo Chávez calificó de pírrica, sin que nunca el CNE nunca emitiera los resultados totales y definitivos de esta justa. Y en las elecciones presidenciales del 7-O, con todas las tramposerías y ventajismo electrónico, protección castrense y de todo el aparato estatal CAPRILES obtuvo un 46 % del electorado. Por ello y con todo esta descomunal red mediática y de los recursos estatales  a favor del régimen, no es nada descartable y probable que en esta ocasión el candidato de la oposición democrática ,renovado en cuerpo y alma y con su juventud a cuestas, con ideas nuevas y sin dar hándicaps, con su Comando Simón Bolívar, logre dar al traste con este sistema que ya no tiene nada que ofrecer a nuestro electorado, si no el comunismo, expropiación, inflación extrema, mentiras fracasos económicos, farsas como la muerte del presidente y con un candidato espurio, impuesto por el TSJ que no convence a los venezolanos de sus decisiones divorciadas totalmente de las normas constitucionales. Se trata de la contienda definitiva que aun habiendo perdido muchas batallas en esta guerra desigual de obuses contra las palabras de los demócratas, marcará un hito entre la DEMOCRACIA Y LA DICTADURA CASTRISTA, el 14 de abril de 2013.(Próxima entrega: El Pensamiento Único y La Hegemonía Comunicacional).

Jesús González Briceño