Revista Semana 22 de agosto de 2021
@RevistaSemana
Aunque
Márquez y Duarte están enfrentados por el control del narcotráfico, en esa
pelea no entró Nicolás Maduro. Según la información revelada por SEMANA, el
líder bolivariano juega con ambos bandos.
Las relaciones entre Nicolás Maduro y las disidencias de las
FARC no solo son estrechas, sino cada vez más evidentes. Así lo deja
al descubierto la información encontrada por las Fuerzas Armadas y la Policía
en el computador personal de alias ‘Gentil Duarte’, uno de los más temidos
jefes de esa guerrilla, y cuyo contenido reveló en su actual edición SEMANA.
Aunque
al principio se especuló que Maduro era más afín a las disidencias de ‘Iván
Márquez’, parece que juega a ambos bandos, es decir, que también tiene
contactos con los hombres de ‘Gentil Duarte’.
A
juzgar por el material encontrado, las disidencias de las FARC serían un ejército
irregular al servicio del presidente de Venezuela.
Una
comunicación del 3 de diciembre de 2020 informa que las disidencias han hecho
un gran esfuerzo por mantenerse vigentes en el mundo, como lo hacían en tiempos
de ‘Tirofijo’, ‘Alfonso Cano’, ‘Raúl Reyes’ y ‘Timochenko’. El documento se
titula “Informe general, comisión internacional”. Allí,
las disidencias de las FARC confiesan que han establecido “relaciones
diplomáticas con Venezuela, Corea del Norte, Irán y Bolivia”.
En lo
financiero, es “fundamental fortalecer y priorizar el trabajo de Venezuela, ya
que se logra un enlace directo con sectores de confianza con el actual
presidente”.
En
materia militar, la revelación es explosiva, pues hay “operaciones conjuntas de
carácter estratégico” con Venezuela y los datos son específicos. Las
disidencias de las FARC le solicitan al Gobierno venezolano permitirles la
permanencia y el tránsito por el territorio de frontera de los estados
Zulia, Táchira, Páez, Apure, Bolívar y Amazonas, “cumpliendo con los
protocolos, rutas y mecanismos que se acuerden entre las partes, preservando
los principios de clandestinidad y de seguridad nacional para el desarrollo
conjunto de operaciones”.
Hablan
de intercambiar información para “neutralizar operaciones de inteligencia y
contrainteligencia de la inteligencia colombiana y norteamericana, grupos paramilitares,
y de sectores contrarrevolucionarios venezolanos”. Sin embargo, lo más
escandaloso es que de manera puntual le piden armamento al régimen de Maduro: “5.000 fusiles, 500
ametralladoras punto 30 o punto 50, morteros de 60 milímetros, sistemas
antitanques, sistemas nocturnos, armas cortas, municiones para estas armas,
granadas de manos, sistemas antiaéreos tierra-aire portátiles o de infantería,
y lo relacionado con dotaciones de combustible (intendencia)”.
Los
correos mencionan que las disidencias cuentan con 7.000 hombres y que esperan
“triplicar” su fuerza en todo el territorio nacional. Se habla de una
agenda pendiente, que incluye un relacionamiento con un general del Sebin (Servicio
Bolivariano de Inteligencia Nacional), así como de “gestionar y tramitar
salidas de las cárceles”.
También
dicen que está pendiente una comunicación con Bolivia. Además, proponen
crear el Frente Internacional Raúl Reyes, en cabeza de Arturo Ruiz, el hombre
que, según los investigadores, maneja las relaciones directas con el régimen de
Maduro.
Las
relaciones entre el líder bolivariano y las FARC no son nuevas. Sin
embargo, no dejan de sorprender a una fuerza pública que deberá redoblar los
esfuerzos para evitar que estos grupos armados no terminen afectando la
seguridad de los colombianos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico