Jonatan Alzuru MIÉRCOLES, 26 DE MARZO DE 2014
@jonatanalzuru67
1.- Es un momento en
Venezuela que el discernimiento se transforma el criterio esencial para escoger
no sólo un camino, sino las decisiones que cada día deben tomarse para
transitarlo. El día lunes sucedió una macrodevaluación, el
presidente de la asamblea da un golpe a la constitución al asumir dos poderes e
individualmente decidir allanar la inmunidad de la diputada María Corina y,
para rematar ese mismo día, el gobierno detiene a tres generales que según el
gobierno estaban conspirando (con respecto a si estaban o no, es imposible como
observador saberlo, en todo caso eso lo dice el gobierno. Partiré en mi
escrito, como lo he hecho en otro, en imaginar que eso es posible… Que existan
grupo impulsados por la situación que piensen que la salida es militar. Asunto
que he condenado, de manera reiterada y que he sostenido que era la mayor
torpeza política que se podía cometer).
2.- La jugada del gobierno
es sumamente clara. ¿Cómo transforma una situación de profunda crisis económica
y política en un escenario favorable para mantener y consolidar su poder?
Primero responsabilizando de la crisis política a Antonio Ledezma, María Corina
Machado y a Leopoldo López, a los tres generales, sosteniendo nacional e
internacionalmente la tesis del golpe de estado. Realizarán su argumentación
diciendo que la crisis económica es consecuencia de la crisis política, que las
guarimbas generaron una situación de desabastecimiento en el país y por eso hay
escasez. Además, que fue tan grave el golpe durante cuarenta días que no hubo
otra posibilidad sino devaluar la moneda. La responsabilidad, por lo tanto, de
todo lo que ha sucedido en Venezuela es de estos tres irresponsables, además de
dos alcaldes que aprovecharon para encarcelarlo.
En el plano práctico
mostró que cuando quiere reprimir no le importará los derechos humanos de
nadie. Detuvo a uno de los dirigentes nacionales de la oposición, a dos
Alcaldes y al allanar la inmunidad parlamentaria de María Corina, obtiene un
voto más en la Asamblea Nacional. Su militancia en plena, tendrán de ahora en
adelante el discurso del golpe y la explicación de la tragedia económica a
partir del golpe. Ese sería el escenario óptimo para el gobierno.
3.- El peor escenario para
el gobierno es que la oposición muestre, claramente, que en el ámbito de los
derechos humanos hay responsabilidades materiales pero también intelectuales,
como mínimo se destituya y se la abra averiguación a la ministra de la defensa
y al ministro de relaciones interiores. Libere y elimine todo régimen de
presentación, así como los expediente, a los estudiantes. Libere a Simonovis
y a Leopoldo López. Se restituya en sus cargos a los dos alcaldes. Como mínimo
se cambie al presidente de la asamblea nacional, aunque siga siendo diputado.
María Corina se mantenga en su curul y se nombre, según la constitución, a las
autoridades del poder moral que tienen vencido su período. Que queden detenidos
todos aquellos que las nuevas autoridades del TSJ, consideren que estaban
fraguando un golpe de estado.
4.- Ahora bien, para
lograr el peor escenario para el gobierno, que en estas circunstancia sería el
mejor escenario de la oposición. La dirigencia política de la oposición junto
al pueblo, tendrían que mantenerse en la protesta cívica, ahora más que nunca.
De manera organizada, pacífica, generalizada con objetivos específicos.
Sentarse en la mesa de
negociación para asumir todos los costos de lo que sucede, sin buscar una
alternativa democrática que recoja el sentimiento de la mayoría de la oposición
y del pueblo que ha visto cómo se violentan los derechos humanos, los derechos
civiles y políticos, cómo teniendo un emporio empresarial y la entrada más alta
de dólares en toda la historia de Venezuela han arruinado al país, por la
ineficiencia, ineficacia y corrupción, con la devaluación más grande de la
historia y con una espiral inflacionaria que se nos viene encima, sería la
mayor torpeza y el hundimiento por muchos años de los movimientos políticos y
sociales de la oposición.
El peor escenario para el
gobierno es la normalidad en cualquier país de una vida democrática. Siendo
esto lo más que podría lograr la oposición, paradójicamente, sólo si actúa con
racionalidad cooperativa y pulso político en la circunstancia actual. Entre el
mejor escenario para el gobierno y el peor, hay una gama de posibilidades y de
escenarios que dependerá de las acciones acertada o no, de la dirigencia tanto
del gobierno como de la oposición.
5.- Es muy lamentable que
quiénes ha tenido la mayor conexión emocional con la masa opositores, hayan
sido quienes tengan una ausencia de olfato político en el momento de la mayor
crisis de nuestra historia. En este caso Leopoldo López, jugando adelantado,
solicitando específicamente una renuncia y luego María Corina Machado viajando
al Perú.
En el caso de la diputada, cuando ha
sido violentada en su condición, más que construir alianzas entre los diputados
de su bancada para enfrentar la situación antidemocrática que sufre, la da por
descontado y se retira del país. Peor aún, siendo una privilegiada con esa
extraordinaria ayuda dada por Panamá, para que asistiera a la OEA, desprecia la
construcción de alianzas con los diversos y distintos partidos de la oposición
para asistir a un foro importante y vital como lo es UNASUR.
¿Por qué es desacertado? Porque desde
el voto de Perú para que fuese pública la sesión de la OEA, se conocía su
posición con respecto a Venezuela. Un político o política sagaz, no pierde
tiempo tratando de buscar apoyo en quienes ya la apoyan, más bien, se dedica a
buscar apoyo en aquellos que han tenido dudas, para manifestarse a favor de la
lucha democrática que impulsa la gran mayoría del pueblo venezolano. El peor
discurso en este caso, es indicarle a todo aquel líder de un país que no se
manifiesta es que es cómplice de lo que sucede. Por el contrario, es labor de
los venezolanos mostrarle la situación lo más racional y objetivamente posible,
es la coacción al otro con el mejor argumento.
Pero además, la acción de irse del
país de María Corina, como señal política a los venezolanos es una profunda
falta de respeto para todos aquellos que han dado la vida, han luchado por la
construcción de un país distinto, pero que tienen formas de comprender la
política y las acciones distinta a su mirada y que se ven representados en la
diversidad de partidos que conforman la Mesa de la Unidad Democrática.
Aún con todas las diferencias que
pudiese tener por acciones anteriores de la MUD, el olfato político indica que
estar a la altura de la crisis es buscar consenso y acuerdos, en primer lugar
con la dirigencia política de la oposición que son sus pares, para mostrarse en
el ámbito internacional unidos y con fuerza. Es una manera racional y práctica
de conducirse en los escenarios internacionales. Ayer anunció María Corina en
televisión que se reuniría en la Plaza Brion con sus seguidores. Otro error. Es
el momento que se reúna con sus parlamentarios aliados, que se reúna con la
MUD, que ayude a construir pasos firmes en el presente para alcanzar, como mínimo
un escenario que no sea el óptimo del gobierno.
Los vecinos que manifestamos tenemos
experiencia, en nuestras comunidades, de discutir en el propio instante de la
protesta, cuando alguno piensa que se debe hacer un tipo de acción y otros la
consideran contra producente. Lo que han hecho las comunidades, el pueblo, es
llegar acuerdos en la forma de lucha. Se discute y se acuerda. Justamente, esa
experiencia popular es un marco de referencia para los diversos líderes de la
oposición.
Es vital, en estas circunstancias, que
Leopoldo López, piense su acción. En términos estrictamente de juego, su acción
es tipificada como suma cero. Esto significa o se gana todo o se pierde todo.
Es totalmente ridículo argumentar que el gobierno manipula. Eso se sabía desde
siempre. El que tiene el poder usa sus armas para mantenerse. Es de
inteligencia saber cómo se enfrenta, cómo en términos prácticos se usan las
fuerzas para que quien tiene el poder no pueda usarlo a su antojo.
El gravísimo problema de la dirigencia
de la oposición es no comprender que se trata de articular un equipo que tienen
distintas miradas del acontecer, pero que todos y cada uno son vitales. Que
además, como en cualquier juego, cualquiera puede cometer errores, cualquiera
puede hacer una jugada acertada y no por ello, se debe paralizar el juego para
dedicarse a criticar y lamentar la mala jugada o, peor aun, detenerlo por una
extraordinaria jugada, pensando que quien juega bien en un momento, será el
jefe del equipo. La actitud política de la dirigencia en los actuales momentos
se torna decisiva, para enfrentar el hoy y lograr alguna ganancia política en
términos del juego.
El único actor político, hasta ahora,
que hemos visto moverse entre los distintos grupos de la oposición, sentándose
con todos es Antonio Ledezma, no tenemos la posibilidad de saber ni conocer qué
dice y cómo plantea los asuntos al interior de cada grupo de la oposición, lo
que se evidencia es su capacidad para sentarse con todos y ha estado sentado
con todos. Ese olfato político de Antonio Ledezma debe replicarse en todos y
cada uno a su estilo, cada uno desde su perspectiva sin desdibujarse de su
mirada. No me estoy expresando, ni mi asunto alude a nada
ideológico, sino a la actitud política para enfrentar las contingencias.
6.- Hay que felicitar la acción de los
parlamentarios de la oposición al acudir al TSJ, para defender a María Corina
Machado. Lo gravísimo de la bancada del gobierno, no sólo por la contingencia
presente, sino como procedimiento que puede sistematizarse en el país y que
cualquiera de ellos en el futuro inmediato, podría ser presa de su propia
acción es la siguiente: “dispara primero y averigua después”. Es inaceptable,
en cualquier circunstancia, que alguien se tome las atribuciones de todo un
parlamento, de todo el TSJ, sentencie y luego, el parlamento discuta y delibere
sobre lo decidido, incluso en farsa, vote nuevamente para ratificar una acción
dictatorial del presidente de la Asamblea Nacional. El problema no es María
Corina en este caso, sino el gravísimo precedente en nuestra historia que se
está cometiendo en este acto.
Si eso lo hacen con alguien tiene
inmunidad parlamentaria, cualquier ciudadano está absolutamente indefenso,
porque que quien ha concentrado el poder político y militar, Diosdado Cabello,
sea por la razón que sea, decida meter preso a alguien no habrá procedimiento
que valga. Es un precedente inaceptable, se están colocando un cuchillo a su
propia garganta y una bomba atómica, más grande que la espada Damocles, al
pueblo venezolano.
7.- Igualmente hay que felicitar a la
MUD por aprovechar el espacio político que brinda UNASUR y entendiendo que la
crisis política tiene que ser resuelta entre los venezolanos. Ahora bien, la
MUD, en esta circunstancia específica tiene la grandísima responsabilidad de
conducir la lucha democrática. Estamos en una profunda crisis económica, en una
situación impresionante de violación de derechos humanos, civiles y políticos.
Hay una profunda indignación de un pueblo. Un alcalde preso, sentenciado por el
TSJ, una parlamentaria que arbitrariamente (me refiero en principio a la forma,
ni siquiera ahondo en su contenido, pero en este caso la forma es muchísimo más
relevante que el contenido) se le suspendió su inmunidad parlamentaria, una
masa estudiantil que ha sido reprimida, familias que han perdido hijos,
hermanos, madres, padres, heridos… ¿Cómo en lo inmediato conducir esto? Es una
responsabilidad inaplazable de todos y cada uno de los partidos políticos,
movimientos sociales y gremios. Mañana es tarde. Lo pasado pasó y es
irrecuperable, el futuro es incierto, sólo queda la responsabilidad con el
presente.
@jonatanalzuru67
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