EFE 03 de septiembre de 2014
El presidente venezolano, Nicolás
Maduro, designó a Rafael Ramírez nuevo ministro de Exteriores, y lo dejó fuera
de la Vicepresidencia para el Área Económica, del Ministerio de Petróleo y
Minería y de la dirección de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa), cargos
que encabezó hasta este martes.
"He decidido designar como nuevo
(...) canciller de la república al compañero Rafael Ramírez, quien asume la
vicepresidencia política de esta área de trabajo de la revolución política,
nuevas tareas en la batalla regional internacional para la construcción de un
nuevo mundo pluripolar y multicéntrico", dijo Maduro.
El mandatario acomete así su segunda
remodelación ministerial, tras los "cambios necesarios" que realizó
el pasado mes de enero y después de la dimisión en bloque hace dos semanas de
sus ministros. Esta vez, Maduro defendió los cambios para producir "un
sacudón al Estado" mediante estos nombramientos.
El presidente hizo ese anuncio en
cadena de radio y televisión, en la que divulgó cambios en su Gabinete, y pidió
"un reconocimiento especial" a Ramírez, de quien dijo que "se ha
tirado once años al frente de la política petrolera de la revolución"
rescatando la industria "de las garras de la meritocracia oligárquica
proimperialista".
El hasta este martes titular de
Exteriores, Elías Jaua, pasará a estar al frente de la nueva Vicepresidencia de
Desarrollo del Socialismo Territorial y será nuevo ministro de Comunas y
Movimientos Sociales.
Maduro informó, además, de que el
ministro de Economía y Finanzas, Marcos Torres, ratificado en su cargo, asumirá
también la vicepresidencia que deja Ramírez.
Asimismo, el gobernante anunció que
"invitó" a Asdrúbal Chávez para que asuma el Ministerio de Petróleo y
Minería, cartera en la que el primo del fallecido presidente Hugo Chávez era
viceministro.
Maduro también designó como presidente
de Pdvsa a Eulogio del Pino, del que destacó su "vasta experiencia en la
industria petrolera" y quien era hasta ahora vicepresidente de Exploración
y Producción de la estatal petrolera.
El gobernante había ratificado el 8 de
julio pasado a Rafael Ramírez en sus cargos tras ser consultado sobre los
rumores sobre su posible salida de estos organismos.
Ese mismo día, Maduro aseguró que
Ramírez era víctima de una campaña de desprestigio que tenía como objetivo
"destruirlo".
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