Escrito por Ramón Guillermo Aveledo Miércoles, 20 de
Febrero de 2013
No es verdad que sea la foto, es la
economía. Aquí el problema no es la foto. Si es montada o le hicieron
photoshop, si es auténtica o trucada, si prueba o no lo que el Gobierno
pretende probar.
El problema es que después de 14 años
con todo el poder y un millón de millones de dólares, el Gobierno que ha hecho
lo que ha querido con la economía (decretado, legislado, controlado,
expropiado, invadido) ha devaluado otra vez, y ya no producimos casi nada, y
casi todo lo tenemos que importar y los precios suben y suben aunque estén
controlados, y no se generan nuevos empleos.
No es verdad que se trate de que los que mandan estén preocupados por la salud del Presidente y el que pregunte por eso lo que está es deseándole el mal. Aquí lo que pasa es que el que fue elegido por el pueblo está enfermo y, diga lo que diga el Gobierno que tanto ha mentido, no ejerce sus funciones; y como los que están al frente no saben decidir porque tienen 14 años adulando y obedeciendo, no está claro quién está gobernando y se siente que nadie tiene las ideas ni el poder para hacer lo que hay que hacer. Y los venezolanos necesitamos un gobierno que piense, escuche, dialogue y gobierne para todos.
No es verdad que, de repente, el tema nacional se haya convertido en un debate académico, una cuestión de filosofía constitucional y debamos seguir boquiabiertos las disertaciones de unos próceres a veces sabios, otras simplemente pedantes esperando, como en el poema de Andrés Eloy, "que su gesto haga el mundo". El problema es que si no hay institucionalidad no hay progreso, porque el Estado no cumple su deber y la inseguridad jurídica lo que trae es arbitrariedad y atraso. Que la Constitución y la ley se cumplan es la clave para salvarnos de la impunidad y la violencia, la desconfianza, la desinversión, el desempleo, la escasez y los precios altos.
No es verdad que la cosa sea si construimos eso que llaman el "socialismo del siglo XXI" o seguimos en la penumbra del capitalismo salvaje. El problema es si lo que estamos haciendo sirve. Si produce riqueza, que se distribuya con equidad; si la pobreza está siendo superada, si la gente sale de abajo o apenas se resuelve. Y ahí están los hechos. Lo que tenemos es pan de hoy y hambre de mañana, mientras entre plata petrolera se pueden mantener las apariencias, y la devaluación no asoma a la realidad.
No es verdad que lo importante sea el Presidente, o Maduro y Cabello y si se quieren o se detestan. Aquí lo que importa eres tú.
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