Por Amparo Barbera, 23/02/2013
Sólo han transcurrido 14
años de caos y ¿ya están asumiendo posturas de cansancio?, o es ¿comodidad,
indolencia o apatía? ¡Caramba! ¿Qué quedará entonces para el pueblo cubano?
Observo con gran
preocupación la actitud mostrada por la SC ante los últimos acontecimientos
sobre la protesta NO VIOLENTA que realizan los valientes estudiantes
universitarios venidos de diferentes estados del país ante la embajada cubana,
o como se le llama últimamente “Miraflores de Chuao”.
Acaso, los motivos no son
los mismos que los nuestros, les refresco la memoria: La injerencia cubana en
asuntos meramente venezolanos, un gobierno sin presidente, ya sea vivo o
muerto, expropiación de la soberanía y cuantas distorsiones imaginables o no,
aplicadas por un régimen comunista, violación de todos y cada uno de los DDHH,
suplantación de las instituciones militares y policías urbanas y regionales.
¿Qué les pasa entonces que no nos unimos en una sola voz?
Aquí no hay, como lo
mencionó el Sr. Maduro, quien mandó a investigar ante la Fiscalía bajo la
denuncia de que un grupo de militantes opositores habían irrumpido en la
embajada cubana, no Sr. Maduro, siempre equivocado por cierto; aquí no hay ni
toldas ni militancias, aquí lo que hay es un pueblo que reclama su soberanía,
sus derechos, su propiedad, que por cierto se llama VENEZUELA y a la que
aparentemente ya Ud. no pertenece.
¿Qué ha pasado con la
capacidad de respuesta ante la gravedad que nos ocupa? Pido disculpas si hiero
susceptibilidades (no es mi intención), pero ¿será que no creen en Uds. mismos,
como para ser capaces de emprender, lo que por derecho les corresponde? o ¿es
que no tiene el aire glamoroso de la pasada campaña? Pues ¡DESPIERTEN YA!
Estamos cuesta arriba y se necesita aplicar toda la voluntad para lograr llegar
a la cima, de nosotros depende todo. No dejemos a los chicos solos, ellos están
exponiéndose física y moralmente a todo tipo de vejámenes, ellos son
venezolanos y nosotros también. VENEZUELA somos todos aquellos que nos sentimos
orgullosos de serlo, los que procuramos ser un ejemplo digno ante nosotros
mismos y ante el mundo. Es hora de dignificar nuestra patria.
Hago un llamado, o los
que sean necesarios, para que se tomen en serio la defensa de nuestro país. Es
nuestra casa. No permitamos que siga avanzando la atrocidad que se está
viviendo. Seamos protagonistas de nuestra propia lucha y consecuente victoria.
No esperen a que el otro haga lo que todos y cada uno tiene la obligación y el
derecho de hacer y ejercer.
¡POR NUESTRA VENEZUELA,
VIVA, LIBRE Y DEMOCRÁTICA!
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