Por Alerta Venezuela, 13/08/2013
El problema estructural en torno a las cárceles venezolanas no ha visto
solución en los últimos 14 años y tampoco ha mostrado mejoría tras la creación
del Ministerio del Poder Popular para los Servicios Penitenciarios en el año
2012. Muchas han sido las declaraciones y logros presentados sobre la
humanización y reconocimiento de los derechos del privado de libertad,
reacondicionamiento de centros penitenciarios y erradicación de factores de
riesgo que impulsan violencia por parte de la autoridad competente.
Sin embargo, diariamente se observan esas manifestaciones estructurales
traducidas en muertes, lesiones a reclusos, consumo de sustancias
estupefacientes y la presencia de armas de fuego de distinto calibre.
Entre el año 1999 y 2012 han fallecido 5.402 internos en las cárceles
venezolanas.
Por otra parte, los derechos humanos de los reclusos se han visto
igualmente afectados con la saturación y hacinamiento de los espacios que
conforman los distintos retenes judiciales en Venezuela. Esto también ha
incrementado la lucha por el control de espacios por parte de los reclusos,
limitado el disfrute del tiempo libre y el proceso de reinserción.
El Observatorio Venezolano de Prisiones señaló que para el año 2011 la
capacidad penitenciaria instalada en Venezuela alcanzaba los 14.500 presos; sin
embargo, la población penitenciaria para dicho año estaba compuesta por 44.941
privados de libertad, situación que devela el 209,94 % de hacinamiento en las
cárceles del país.
La magnitud de estos problemas se evidenciaron con los numerosos
episodios de violencia ocurridos durante el año 2011, particularmente los
acaecidos en el Reten Judicial El Rodeo I y II en Abril de 2011 y la crisis del
Reten de la Planta. Dicha crisis culminó con la creación del Ministerio del
Poder Popular para los Servicios Penitenciarios, cuya misión está orientada en
atender y mejorar la coyuntura penitenciaria venezolana. Dicho ministerio fue
creado el 27 de Julio de 2012, con la aparición del decreto 8.266 de la
Presidencia de la República en Gaceta Oficial N° 39.721.
Transcurridos dos años de gestión de la Ministra Iris Varela, las
mejoras en cuanto a la humanización, reacondicinamiento, disminución del
retraso procesal, erradicación del hacinamiento y reducción de la violencia no
ha sido vista en el Sistema Penitenciario. Por el contrario, se ha mantenido.
La realidad cotidiana es que las cárceles en Venezuela están ubicadas en
instalaciones completamente deterioradas, con alto porcentaje de hacinamiento y
sin servicios básicos; en estos recintos ocurren numerosos enfrentamientos entre
bandas de internos que poseen armamento con potencia de guerra, el cual es
ingresado a los recintos penitenciarios con la complacencia u omisión de los
funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que custodian los mismos.
Los enfrentamientos generalmente cobran vidas tanto de internos,
familiares en visita, como funcionarios de la GNB. La situación entre el
período Julio 2012 – Julio 2013 ha sido suficientemente complicada porque a la
realidad penitenciaria descrita anteriormente se le articularon los procesos
burocráticos que implican la migración de las antiguas responsabilidades del
Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz al
nuevo Ministerio del Poder Popular para los Servicios Penitenciarios.
Vista la situación anterior y el aumento notorio de las estadísticas de
muertes y lesiones en centros penitenciarios durante el período de gestión del
nuevo ministerio, no extraña la continuidad de la conflictividad en los penales
venezolanos ni la dificultad de la autoridad competente para abordar las crisis
que ocurrieron y puedan ocurrir tras el desgaste y ocaso del sistema
penitenciario en el país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico