Jose Á. Palacios
No son todos los
venezolanos, pero sí hay una parte de ellos que han perdido la compasión por el
semejante. Así explica el psicoanálista Adrián Liberman los cada vez más
frecuentes saqueos,
asesinatos pro productos de la cesta básica, enfrentamientos violentos en
colas, y hasta desmembramiento de reses vivas; en calles y carreteras
de Venezuela.
La escasez, el
desabastecimiento, y la crisis económica que enfrenta el país son las
principales causas a la que el especialista atribuye
estos comportamientos violentos que califica como “un síntoma
alarmante”.
Recordando el asalto
que conmocionó a la opinión pública al camión con reses que se volcó
en la carretera Coro-Morón, cuyo conductor murió mientras ciudadanos arrasaban
con la carga; Liberman sostiene que desgraciadamente, por la “terrible
situación de precariedad”, estos comportamientos serán cada vez más frecuentes.
El doctor afirma al respecto
que se necesitaría más de una generación para que la sociedad “actué con
normalidad”, atribuyéndole al Estado la responsabilidad que le corresponde
de actuar como garante de la Ley.
La mirada cómplice de las
autoridades
Según el Observatorio
Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) se han registrado 132 entre
saqueos e intentos de saqueos en el primer trimestre del 2015; quedando
impune quienes se expropian de bienes ajenos. En relación a esto, el
sociólogo Francisco Coello explica que aunque esta situación es injustificable
se debe a las malas políticas económicas aplicadas por el Gobierno y al
desorden de la sociedad producto “de un Gobierno que no gobierna”.
El también profesor de la
Universidad Católica Andrés Bello asevera no entender cómo la mayoría de
estos hechos ocurren ante la mirada cómplice de las autoridades, haciendo
referencia a la gandola de refrescos que se volcó en la bajada de Tazón. “Esa zona está
comprendida por campamentos militares, no entiendo cómo no actúan con
inmediatez ante estos hechos”.
Reiterando que el Gobierno
manda señales de desorden y caos, Coello sostiene que los
saqueos podrían ser parte de una política de Estado, con la que el
Gobierno buscaría ganar puntos de los sectores que “se benefician” con
estos hechos delictivos.
http://elcooperante.com/
29/07/2015
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