Luis Manuel Esculpí 23 de febrero de 2016
Es
innegable que este gobierno tiene características que le son peculiares. El
gabinete periódicamente experimenta cambios en las posiciones de los ministros,
frecuentemente resultan enroques. En algunos casos los titulares de las
carteras son exprés,hay quienes ni siquiera han tenido tiempo de fundar un
nuevo ministerio, como el caso de una de las titulares del recién creado de
agricultura urbana; y otro el de conocer el funcionamiento del diverso y
enredado funcionamiento de las finanzas públicas.
Otro
rasgo particular de estos funcionarios son sus extravagantes declaraciones ante
los medios de comunicación, parecieran compitiendo por quien dice el mayor
disparate; además revelan las contradicciones existentes y la ausencia de rumbo
en el "alto gobierno". Después de aquellas iniciales promesas de
combatir la burocracia reduciendo el número de ministerios, pasamos a ser al
país que más tiene con treinta y dos. A propósito...¿ Qué será de la vida del
viceministro de la suprema felicidad?.
Recientes
estudios de opinión revelan que la mayoría de los venezolanos consideran que el
presidente y su gobierno no están en capacidad de resolver la crisis global de
la dimensión que vivimos. Una amplia mayoría igualmente estima que Maduro no
culminará su período. Mientras tanto en las insistentes y repetitivas cadenas,
en sus programas y en todas las comparecencias públicas ellos parecieran
ignorar la gravísima situación que confrontan.
Después
de mucho anunciar al fin presentó algunas medidas, donde las más variadas
opiniones coinciden en su insuficiencia y señalan que no inciden decisivamente
en la solución, por el contrario agravan la crisis. A esa severa crítica se
suman voces que antes los respaldaron.
Lo
cierto es que a la gravedad de la crisis económica y social a la terrible
inseguridad se suma la de los servicios de electricidad y el agua. A propósito
llama la atención las afirmaciones del Ministro para la industria eléctrica
General Luis Motta Dominguez quien el viernes pasado en un taller de
planificación estratégica - desconocíamos que el gobierno empleara ese método-
afirmó: " Sino se toman las acciones y ayudan ustedes con su accionar a
minimizar el efecto, entonces en la primera semana o a mediados de abril
podemos tener un colapso eléctrico"...se refería al efecto de El Niño,
fenómeno natural al cual el gobierno le asigna la principal responsabilidad de
la crisis en materia de los se vicios públicos mencionados. Tal afirmación la
hace precisamente el ministro encargado de tomar las acciones correspondientes.
Como es obvio para nada se mencionan la falta de mantenimiento e inversión y el
fracaso de los distintos Estados Mayores Eléctricos que han sido designados.
Tomo
prestado de un ingenioso tuiter de la amiga Paulina Gamus que decía palabras
más, palabras menos: el problema no es El Niño, son los bolichicos. En efecto a
la empresa Derwich Associates propiedad de esos chamos multimillonarios, fue
registrada en Panamá y obtuvo fabulosas ganancias en dólares, cuando a partir
de la sequía del 2010 le otorgaron por adjudicación Directa once contratos para
adquirir plantas de generación eléctrica y subcontrataron en una operación
triangular, donde vendieron como nuevas, material considerado chatarra.
Casualmente
en el mes de abril de año pasado el ingeniero Luis Vásquez Corro presidente de
la Comisión eléctrica del Colegio de Ingenieros del estado Lara, fue
"recluido" en el SEBIN por alertar sobre la gravedad del nivel de
agua en el embalse el Guri y señalar que el gobierno "no ha tenido la
voluntad de reparar las plantas termoeléctricas para activarlas en cualquier
emergencia"...Ya sabemos que paso con la adquisición de las mencionadas
plantas...De otra cosa estamos seguros; las declaraciones recientes del
ministro no le traerán las mismas consecuencias que sufrió el ingeniero
larense.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico