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viernes, 15 de septiembre de 2017

Allende murió defendiendo la democracia por @elmostrador


Por Ariel Ulloa


El chavismo y sus escasos partidarios chilenos quienes desde la izquierda defienden lo indefendible, pretenden establecer similitudes entre el proceso venezolano y la experiencia de la Unidad Popular. Más grave, han tratado de  hermanar la figura de Allende con la de Maduro. Esta es   una falsificación de la historia y constituye una ofensa a la memoria de Salvador Allende por cuanto nada hay de similar en ambos procesos, menos  entre un héroe y un simple testaferro de los militares.

Veamos:

1.- Es de la esencia de la Vía Chilena al Socialismo la construcción  de una  sociedad más justa con  respeto irrestricto a la democracia, las libertades y los Derechos Humanos. Salvador Allende sacrificó su propia vida por esos principios y jamás, ni siquiera pensó, en mantenerse en el poder por la fuerza de las armas, gestando por ejemplo un autogolpe. Este    ha sido el camino escogido por Maduro imitando así  a Fujimori y otros dictadores.  “Si no es por los votos será por las balas” ha sido una de sus tantas consignas irresponsables.

2.- Allende fue víctima de un golpe de estado organizado y ejecutado por las FFAA, la derecha y la plutocracia en estrecha colaboración con la CIA norteamericana. El acto liberticida fue la culminación de planes elaborados por  esa agencia  en contra de la izquierda durante años y que se consumaron  el 11 de Septiembre. Por el contrario, Maduro se sostiene exclusivamente en lo que él denomina “alianza cívico-militar” en la que la hegemonía la ejercen hoy de manera incontestable los militares. Allende siempre nos decía que la revolución la hacen los pueblos no los militares.

3.- Durante el Gobierno de Allende hubo respeto pleno a la separación entre los poderes del Estado y libertad absoluta de prensa. En el caso venezolano eso sencillamente no existe y en el caso de la libertad de prensa impera la autocensura.  El Presidente, desde la época de Chávez, ordena detenciones y proclama condenas contra opositores incluso en sus discursos, y el Poder Judicial sencillamente ejecuta.


4.- En el Gobierno de la Unidad Popular no hubo un solo detenido y menos preso por razones políticas. Menos existió la práctica de la tortura, tampoco hubo exiliados ni se violaron los Derechos Humanos. El régimen venezolano mantiene presos, según múltiples organismos de DDHH, incluyendo las NNUU, a no menos de 400 personas la mayoría de ellos procesados ilegalmente por tribunales militares y varios sin proceso alguno, como es el caso del Alcalde Mayor de Caracas Antonio Ledezma preso desde hace 2 años. Lo mismo ocurre con los alcaldes Daniel Ceballos, Delson Guarante y Alfredo Ramos. 16 alcaldes más están perseguidos por razones políticas con orden de captura, medidas cautelares, destituidos arbitrariamente, etc.

Los militares golpistas chilenos escudriñaron todo en búsqueda de robos o corrupción. Nada encontraron, ni siquiera les sirvió el “criadero de la Irma” como recordaba Almeyda. Nada, por la sencilla razón de que los quienes luchamos junto a él, comunistas, socialistas, radicales, cristianos de izquierda, independientes, etc. lo hicimos por un ideal, no por lo material, sino por un sueño.

Al gobernador del Estado de Miranda Henrique Capriles sin mediar proceso alguno el Tribunal Supremo le ha privado de sus derechos políticos por 15 años. Algo similar a lo que hizo Pinochet contra Clodomiro Almeyda a quien aplicó el oprobioso artículo Octavo de la Constitucion del 1980 que condenaba a la muerte cívica a los opositores por razones políticas.  Durante los 110 días de protestas la dictadura venezolana apresó a no menos de 5000 personas y reprimió a los manifestantes de manera brutal con un balance de más de 140 muertos. Allende jamás hizo eso y ni siquiera lo pensó. Tanto es así que para dar salida democrática a la crisis que sacudía al país había decidido   anunciar un Plebiscito que dirimiera las diferencias. El golpe lo impidió. La oposición venezolana ha buscado una salida electoral a la crisis, por ejemplo el Referendum Revocatorio, Maduro ordenó al Poder Electoral (CNE) impedirlo porque lo perdía. Así se hizo.

5.- La experiencia  de Allende, justamente por el carácter democrático de la vía chilena, contó siempre con una enorme solidaridad y apoyo internacionales, en particular  de la intelectualidad y el mundo de la cultura,  solidaridad que se amplió luego del golpe. El régimen dictatorial de Maduro es repudiado por la mayoría del mundo de la cultura y  la intelectualidad más valiosa del planeta.  Incluso muchos, que apoyaron inicialmente al chavismo, como Noam Chomsky, ícono de la izquierda, ha sostenido que “en América Latina, creo que el modelo de Chávez ha sido destructivo”, Dieter Dieterich, mentor ideológico de Chávez con su Socialismo del siglo XXI, Edgardo Lerner y otros, todos hoy han restado su apoyo a esa experiencia y son críticos. A nivel político en el caso de América solo cuenta con el apoyo de Bolivia, Nicaragua, El Salvador  y el más  tibio de Ecuador.

6.- En el clima político y militar de la guerra fría, obviamente que una experiencia  como la  de Allende nació  condenada por los EEUU. Toda la documentación disponible y en especial la recientemente desclasificada lo confirma. Lo grave para Nixon- Kissinger lo ha reconocido-, era que “una nueva Cuba” se instalase en América, esta vez por vía electoral y respetando el modelo democrático occidental. El peligro de contagio era temible. Por lo tanto había que “hacer crujir la economía” (Nixon) y desarrollar un plan desestabilizador coordinado por la CIA.

En el caso venezolano el Presidente Obama, decidido a terminar con la línea intervencionista de todos los gobiernos anteriores y la pésima imagen que eso entrañó para los EEUUU entre sus vecinos del sur, desplegó una política de colaboración y amistad que culminó con el intercambio de embajadores con la Cuba socialista. Esa política, en   el caso de Venezuela, se caracterizó por la búsqueda de un entendimiento casi a como diera lugar. El esfuerzo de Obama fracasó porque este tipo de procesos necesita siempre de un enemigo para encubrir sus deficiencias internas.

Que los EEUU no han utilizado hasta ahora arma desestabilizadora alguna contra Venezuela,  como sí lo hicieron contra Allende, queda demostrado con la presencia en EEUU sin inconveniente alguno de empresas como CITGO PETROLEUM CORPORATION,  una filial de PDVSA con sede central en Houston, Texas y que cuenta con unas 6000 estaciones de servicio abanderadas con su marca, 3 grandes refinerías para el petróleo pesado venezolano y 48 terminales de almacenamiento y distribución. Ingresos anuales de más de 35 000 millones de dólares anuales y unos 3700 empleados. Goldman – Sachs acaba de adquirir 2 800 millones de dólares en bonos de PDVSA a precio de liquidación pagando solo 865 millones en lo que constituye una bofetada a las necesidades de un país. En estas condiciones ¿ puede Maduro seguir sosteniendo que existe una “guerra económica” en contra de Venezuela por parte de los EEUU? Ciertamente que no.

Al gobierno de Allende en cambio se le negó la sal y el agua desde la partida y luego de la nacionalización del cobre sin indemnización, los tribunales norteamericanos a petición de Nixon embargaron todo lo que oliera a CODELCO en el mundo, incluyendo sus oficinas en Nueva York. Obviamente que la amenaza militar de Trump le vino como anillo al dedo a un maduro ahogado. Me reduzco a lo manifestado por el columnista Tulio Ramírez del periódico venezolano Tal Cual, “no sé si Trump es el hermano perdido de Chávez, pero pareciere que tienen la misma carga genética. Bocones, estridentes, blufeadores  y pantalleros”.

7.- Ah!! Y respecto de la honestidad y la transparencia. Los militares golpistas chilenos escudriñaron todo en búsqueda de robos o corrupción. Nada encontraron, ni siquiera les sirvió el “criadero de la Irma” como recordaba Almeyda. Nada, por la sencilla razón de que los quienes  luchamos junto a él, comunistas, socialistas, radicales, cristianos de izquierda, independientes, etc. lo hicimos   por un ideal, no por lo material, sino por un sueño. ¿Se puede decir lo mismo de Maduro, Diosdado Cabello, Tarek Al Assaimi y otros? La fiscal Luisa Ortega Díaz los ha denunciado y es ella quien tiene la palabra. El ideal de todos estos personajes es el poder y los billetes verdes del imperio.
Los camaradas del Partido Socialista del Uruguay en declaración pública a propósito de la situación dramática que vive el pueblo venezolano han sostenido…”No hay socialismo sin democracia… el ejercicio del poder y la construcción de la sociedad socialista deben estar basados en la síntesis de la libertad y el respeto y promoción de los Derechos Humanos”.  ¿Entenderán algo de esto los Maduro, Cabello, Al Aissaimi y los militares venezolanos que han robado  el poder al pueblo venezolano?

14-09-17




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