Debido a la gravedad de las lesiones que sufrió, murió esta mañana la
niña de 8 meses de edad herida la noche de este domingo 27 de diciembre por la
explosión de una granada, hecho ocurrido en la plaza La Concordia, en el centro
de Caracas. La otra pérdida fatal fue la del sargento José Vega, quien falleció
a pocas horas del ataque del que fue blanco un puesto de la Guardia Nacional
venezolana ubicado en la plaza La Concordia, en pleno centro de Caracas.
La lactante identificada como Aranza Pineda, fue trasladada la noche
del domingo en compañía de sus padres Wendy Pineda de 20 años y Jeferson Molina
de 23 años al Hospital Dr. José María Vargas donde le diagnosticaron herida por
esquirla de artefacto explosivo, luego fue referida al Hospital Pediátrico
Elías Toro. Se indica que perdió un brazo
Este es séptimo
ataque con granada que se produce en menos de dos meses en Venezuela y extraoficialmente
se contabiliza que 250 menores de edad han sido asesinados en lo que va de
año. En la semana de navidad que comenzó el pasado lunes 21 de diciembre se han
reportado la
muerte de 6 infantes entre ellos Aranza Pineda, la
muerte de un niño de 3 años mientras comía helados con su madre en un
tiroteo en la calle El Carmen de Sarría y la bala perdida que le quito la vida
a un joven de 7 años cuando veía televisión en el su casa ubicada en barrio La
Unión, de Petare.
La explosión ocurrió a las 10:26 pm del domingo. Un residente de los
edificios adyacentes aseveró que pensó que se trataba de un fuego artificial
conocido popularmente como “Bin Laden”, otros vecinos comentaron que el
estruendo de la detonación se escuchó por toda la zona, pero no pensaron que se
tratara de una granada.
La madre de la niña se encontraba conversando con uno de los
uniformados cuando ocurrió el ataque.
Una joven se manifestó preocupada por la menor de edad que resultó
herida tras la explosión, aseguró que le habían amputado un brazo. Al mediodía
información extraoficial, confirmó que la menor de 8 meses de edad herida por
la granada falleció por la magnitud ocasionada por la explosión.
Si los atacan a ellos, que queda para
uno
El escepticismo embargaba a los vecinos, habitantes de la Misión
Vivienda y transeúntes quienes ocupaban las aceras aledañas a la plaza La
Concordia, ubicada en pleno centro de Caracas. Todos hablaban sobre el
ataque explosivo que cobró la vida del sargento Jose Vega y de la niña de 8
meses de edad.
Una señora de la tercera edad aseguró: “esas carpas no son resistentes,
la guardia debería tener algo más seguro” y continúo “si eso le pasa ellos, qué
nos puede esperar a nosotros, se quedaron ahí metidos, se quedaron dormidos,
ellos tienen que salir a dar rondas de vigilancia”.
La plaza La Concordia, específicamente el Regimiento de Seguridad
Urbana de la parroquia Santa Teresa, municipio Libertador de Distrito Capital,
estuvo acordonado esta mañana por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana
(GNB) y conos rojos tras el ataque con un artefacto explosivo,
El Ministerio Público comisionó a la fiscal 69° del área metropolitana
de Caracas, Emelin Bastardo, para investigar la muerte del sargento mayor de
primera de la GNB, José Orlando Vegas Carrillo.
Durante el hecho resultaron heridos los sargentos Robinson José
Villegas, Jorge Aguilar Pérez, Alí Rodríguez Quintero, Ángel González
Velásquez, José Segura Hernández y Gervis Azuaje Fajardo quienes se encuentran
recluidos en el Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo, donde fueron intervenidos
quirúrgicamente.
No faltó el comentario de tinte político sobre lo sucedido, un señor de
unos 50 años decía convencido “estas prácticas no son venezolanas, esto nunca
se había visto en Venezuela, parece más de colombianos o israelitas pagados por
la derecha”. En contraste, una mujer de unos 45 años de edad refutaba esa tesis
aseverando que solo el Gobierno tiene acceso a artefactos explosivos y “son
ellos quienes trafican con eso”.
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