Por Eddie Ramírez, 06/01/2015
¿Cuál debe la estrategia de la alternativa democrática ante el
escenario de un precio del petróleo de 46 dólares el barril y una aceptación de
solo 22 puntos del presidente de facto? Algunos, como José A. Gil Yepes,
plantean que “no hay que sacar a nadie” y que la caída del precio del petróleo
“es una oportunidad de entendernos porque vamos a tener que jugar en equipo
para poder meter gol”. Otros, como Luis Vicente León, solo consideran sensato
acudir a elecciones argumentando que otras opciones no son viables por aquello
de “con qué se sienta la cucaracha”. Respetamos esas opiniones, pero muchos
pensamos que ante un régimen totalitario se requiere de algo diferente.
En caso de seguir la estrategia de cohabitar con el régimen ¿qué
podemos conseguir? ¿Acaso no secuestró nuevamente al CNE, la Fiscalía,
Contraloría, Defensoría del Pueblo y TSJ? ¿Acaso el capataz de la Asamblea y el
presidente de facto y todas sus focas han ofrecido una amnistía para presos
políticos y exiliados? ¿Acaso los tribunales han dado señales de imparcialidad
y de no arrodillarse ante el Ejecutivo? ¿Acaso hay signos de que el régimen
estaría dispuesto a rectificar su obsoleta visión de la economía y persecución
a los medios de comunicación? Entonces, ¿qué se puede conseguir con jugar en
equipo? ¿Acaso lograríamos más diputados con una estrategia de apaciguamiento
o, por el contrario, muchos votantes se sentirían confundidos? ¿Acaso queremos
que nos sigan metiendo goles? ¿Puede alguno de los proponentes de la
cohabitación informar si con esta estrategia lograríamos contribuir a que
tengamos una mejor calidad de vida?
La estrategia de “solo elecciones” sería válida en democracia, pero
ante un totalitarismo tiene el escollo difícilmente superable del enorme
ventajismo oficial basado en el control de los poderes del Estado y en los
recursos de Pdvsa. Sin duda que dado el derrumbe del apoyo del pueblo al
régimen, la alternativa democrática tiene una gran probabilidad de ganar las
parlamentarias a pesar de lo mencionado. Quizá el punto a discutir es cuántos
diputados podemos obtener. Caso de no conseguir las dos terceras partes de las
curules es poco lo que lograríamos cambiar, es decir requerimos como mínimo
lograr 110 diputados. Ello es posible, pero poco probable, si no adoptamos una
estrategia de mayor confrontación, recalcando los errores del régimen y
divulgando lo que haría la alternativa democrática al llegar al poder.
Sobre la confrontación se ha creado el mito de que es necesaria
evitarla porque la gran mayoría la rechaza. Ciertamente todos preferiríamos
vivir en armonía y por ello la respuesta a las encuestas, pero también a nadie
le gusta vivir con escasez de los bienes básicos, con elevado costo de la vida,
con inseguridad, con deficientes servicios de salud, educación y transporte,
con persecuciones por pensar diferente y con cadenas para anunciar que harán
anuncios o para promover conucos. Caso de no confrontar firmemente al régimen
en estos y otros aspectos estaremos acostumbrando a los ciudadanos a aceptar lo
que tenemos y no se sentirán motivados a contribuir al cambio necesario. Para
lograrlo se requiere integrar una unidad monolítica entre la sociedad civil y
los partidos políticos para votar, hacer resistencia y confrontar. Ciertamente
esto último no es cómodo, ni sencillo, pero es condición necesaria aunque no
suficiente para salir del presidente de facto. Caso contrario seguiremos
votando y seguiremos declinando como país y como ciudadanos.
Como en botica: Quien practica el terrorismo de Estado ofreció canjear
a Leopoldo por el puertorriqueño Oscar López, preso y sentenciado en los
Estados Unidos a 70 años por usar la fuerza para robar, transporte de armas y
explosivos, conspiración sediciosa e intento de fuga. Leopoldo solo llamó a
manifestar pacíficamente y no hay prueba de que cometió algún delito, sin
embargo el perverso de Miraflores lo tilda de monstruo y de asesino. Vicente
Díaz cumplió dignamente en su cargo en el CNE, pero su referencia a Lucena y
Oblitas declarando que “conozco bien a esas señoras. Ninguna es capaz de
permitir que se alteren los votos”, no es una afirmación cierta ya que ellas
permitieron irregularidades y ventajismos y no autorizaron una auditoría
completa. Eso, don Vicente, constituye una alteración de votos, aunque quizá no
en las máquinas El mejor regalo de Navidad es el video “La otra cara de
Venezuela”, de Patricia Helena González Pacheco. Efectivamente, tenemos una
cara con gente muy valiosa y paisajes muy bonitos. Solo tenemos que descartar a
los malandros comunes y a los que nos gobiernan. Lamentamos el fallecimiento de
Gilberto Aurelio Morillo C. gran luchador contra la dictadura de Pérez Jiménez
y padre de Gilberto Morillo, compañero de Gente del Petróleo. ¡No más
prisioneros políticos, ni exiliados!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico