Papa Francisco 16 de junio de 2018
Evangelio
según San Mateo 5,33-37
No
realizar ningún juramento: "En aquel tiempo, Jesús dijo a
sus discípulos: Ustedes han oído también que se dijo a los antepasados: No
jurarás falsamente, y cumplirás los juramentos hechos al Señor. Pero yo
les digo que no juren de ningún modo: ni por el cielo, porque es el trono de
Dios, ni por la tierra, porque es el estrado de sus pies; ni por
Jerusalén, porque es la Ciudad del gran Rey. No jures tampoco por tu
cabeza, porque no puedes convertir en blanco o negro uno solo de tus
cabellos. Cuando ustedes digan "si", que sea sí, y cuando digan
"no", que sea no. Todo lo que se dice de más, viene del
Maligno". Palabra del Señor.
Reflexión
del Papa Francisco
Jesús
dice a sus discípulos que no juren, en cuanto el juramento es signo de la
inseguridad y de la falsedad con que se desarrollan las relaciones humanas.
Con
esto, se instrumentaliza la autoridad de Dios para dar
garantía de nuestras vicisitudes humanas.
Más
bien estamos llamados a instaurar entre nosotros, en nuestras familias, en
nuestras comunidades, un clima de transparencia y de confianza recíproca,
de modo que podamos ser considerados sinceros sin recurrir a intervenciones
superiores para ser creídos.
La
desconfianza y la difidencia recíproca siempre amenazan la serenidad.
Que la
Virgen María, mujer de la escucha dócil y de la obediencia feliz, nos ayude a
acercarnos cada vez más al Evangelio, para ser cristianos ¡no "de
fachada", sino de sustancia!
Y esto
es posible con la gracia del Espíritu Santo, que nos permite hacer todo con
amor, y así cumplir plenamente la voluntad de Dios. (Extracto de la
reflexión antes del rezo del Ángelus, 12 de febrero 2017)
Oración
de Sanación
Señor,
gracias porque a través de tu amor me has hecho sentir que nací para ser feliz
y para superarme en cada reto que se presenta en mi día a día.
Lléname
hoy con tu gracia para tener los ojos abiertos y no tropezar ante las
dificultades de la vida y dame la serenidad que necesito para afrontarlas.
Tú me
insistes en todo momento que la amistad que tienes para mí es eterna si vivo
fiel a tu Palabra y sin miedo de cumplir tus mandamientos.
Tú te
alegras cuando respeto, quiero y brindo momentos felices a los demás. Quiero
hacerlo sin aprovecharme ni tomar nunca tu Nombre en vano.
No
quiero hacer ningún tipo de juramento que después rompa y te falle de una peor
manera. Haz descansar tu Espíritu de fortaleza en mi corazón.
Que
pueda cumplir las cosas sin necesidad de promesas, no para quedar bien ante el
mundo, sino para darte Gloria y enaltecer tu Santo Nombre.
Llena
mis días de tu presencia como ese amigo fiel que no falla. Toma mi corazón
entre tus manos y hazle sentir la paz y la permanencia de tu amor.
Llévate
mis tristezas, sana mi corazón. Dale certeza a mis palabras. Todo te lo
entrego, todo es tuyo. Te amo y confío en tu guía y protección. Amén
Propósito
de hoy
Leer
la primera Carta de San Juan (es muy cortita) Meditar lo que Dios quiere
decirte allí. Compártelo con tu familia.
Frase
de reflexión
"Cuando
el Espíritu Santo habita en nuestros corazones, nos hace comprender que el
Señor está cerca y nos cuida". Papa Francisco
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Para comentar usted debe colocar una dirección de correo electrónico