Romel Guzamana, Diputado Indigena |
Por Fernando Facchin B., 15/01/2016
Se ha violentando la voluntad popular manifiesta el 6D,
es evidente que el SE/TSJ ha preferido seguir los caminos del quiebre
constitucional para llevar adelante un proyecto político en terapia intensiva, un
vergonzante camino de ilegalidad para incumplir el artículo 200 constitucional
contrariando los valores, principios y garantías constitucionales. Parece ser
que la CN trastorna al régimen y a sus súbditos, por ello pervierten la
división de los poderes y vulneran flagrantemente la tutela judicial de los
derechos y libertades fundamentales.
Estamos ante un progresivo envilecimiento del poder
judicial, los hechos demuestran que detrás del telón de un circo barato se
esconde un nocivo proyecto sistemático de
quiebre del orden constitucional.
Ante tal circunstancia han salido tres “héroes
indígenas” que se han auto inmolado como diputados para no ser impedimento en
los caprichos judiciales ordenados por el ejecutivo, Sr. Presidente, presente
su Memoria y Cuenta que los diputados sabrán apreciarla.
El circo de los bonsay está presto para abusar con
intromisión de un poder sobre otro, obediencia ciega y fiel a las muecas de los
domadores destinados a ordenar a latigazos su resguardo e impunidad, un circo
para el enanismo político, donde los fantoches presentan una ridícula actuación
de circo judicial. El régimen tiene la necesidad de crear ambientes de
acatamiento servil y respaldo irrestricto, el circo jurídico/político cumple el
papel de adormecedor de la opinión pública con la ferocidad de ataque contra la
AN. Van 15+2 años de corruptelas y el miedo es libre.
En esa orgía mediática vemos una claque de bufones, enanos mentales, malabaristas y
enfurecidas fieras hambrientas de poder y dinero mal habido, un régimen plagado
de acciones efectistas que potencian el abuso indiscriminado de la CN, son
ineficientes para resolver los ingentes problemas del país pero eficientes para
acentuar la mentira y la violencia judicial. Esos ¿juristas?, entre ellos el
abogado de la república, no saben el significado ni alcance del término
“desacato”, deben solicitar, a quien dictó la abominable y antijurídica
deposición, que se los explique. Es la generación bonsay. Todo huele a
podredumbre, a residuos de muladar, a carroña.
No hay razón alguna para soportar el bochornoso circo
donde se encuentra atrapado el país por una satrapía innoble de hombres y
mujeres sepultadores del ¿ideal chavista?, generación bonsay que nos coloca en
el hazmerreír nacional e internacional.
La agonía es larga pero la muerte es segura.Los
sepultureros del chavismo, desde las instancias del ejecutivo, están prestos
para el sepelio. Por su parte, los diputados tienen la valentía de ejercer sus
funciones conforme a la CN.
“No sé si esto obedecerá al principio de Peters, ya
saben que cuanto más alto es el cargo de una persona tanto mayor es su nivel de
incompetencia.” Pío Gil dijo: “Es
necesario que nazca un Dante para que pueda narrar la historia infernal y
lúgubre del acontecer político nacional”.
El final del Circo se acerca, ese será el gran acto de
cuerda floja para el maromero de turno, a quien le espera una caída al vacío sin
red debajo. Música de despedida maestro. Saludo especial a los nobles diputados
indígenas.
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