Por Roberto Patiño
El régimen liderado por
Nicolás Maduro ha decidido mantenerse en el poder a partir de la destrucción de
la convivencia democrática y las condiciones de vida básicas de los
venezolanos. Todas las acciones desde el Estado han ido en esta dirección:
desde el secuestro de vías electorales y la persecución política, implantando
un sistema fraudulento de instituciones coaptadas y procesos viciados, hasta
la toma de medidas económicas que desintegran el aparato productivo y generan
un cuadro hiperinflacionario que ahoga a los venezolanos.
La violación sistemática de
derechos humanos ha sido otro factor determinante en este sentido, con sistemas
opresivos de control, clientelismo y dependencia, como los CLAP y el carnet de
la patria, y el agudizamiento de la represión por parte de fuerzas policiales,
militares y paralegales. Esto enmarcado en supuestos “planes de seguridad” como
la reciente Gran Misión Cuadrante de Paz, que repite políticas
nefastas de ejecuciones sumarias, hostigamiento y violencia sobre personas y
comunidades.
La normalidad ha desaparecido
de la vida los venezolanos, en una realidad en la que crece la desesperanza y
la impotencia. A pesar de la polarización y de las desigualdades vividas en las
últimas décadas siempre apostamos a salidas pacíficas y civiles para resolver
diferencias y solucionar problemas, pero ahora nos enfrentamos a una situación
inédita y desconcertante: una terrible crisis fomentada y aprovechada por un
régimen autoritario y militarista para mantenerse en el poder a costa de
hambre, empobrecimiento y violencia.
En este contexto, se nos exige
como sociedad, una lectura clara de esta compleja situación y el generar
estrategias y acciones novedosas para poder superarla. Y para ello asumirnos
como actores protagónicos y galvanizarnos alrededor de la causa del cambio como
una necesidad vital frente a la posibilidad cierta de disolución, sometimiento
y muerte que significa la continuidad del modelo dictatorial.
En el actual momento de
profunda crisis y protesta, debemos todos sumarnos en un proceso que logre esta
galvanización. Y es nuestra firme creencia que esto solo podrá lograrse desde
las bases de la articulación y la solidaridad. Articulación para vincular entre
sí a las distintas fuerzas sociales alrededor de necesidades compartidas de
cambio. Solidaridad para reconocer en la causa del otro la nuestra
propia. En la hora más oscura del país, debemos aliarnos unos con otros
para luchar por la vida de todos.
Nuestro compromiso en esta
visión está fundando en nuestro trabajo en el Municipio Libertador. Es a través
de estos principios que hemos acometido planes como Alimenta la Solidaridad o
Monitor de Victimas, y apoyado la labor de líderes y agrupaciones comunitarias.
Hemos logrado un impacto en la vida de personas y comunidades para paliar los
efectos de la crisis de alimentos o la violencia criminal y del Estado, gracias
al encuentro de diversos sectores sociales sobre las bases del trabajo
solidario por el bien común.
Y es con esta visión que
proponemos abordar esta nueva etapa, en la que la profundización del modelo
dictatorial agudizará la crisis social, económica y política. Debemos articular
los liderazgos locales y sectoriales ante las amenazas de elecciones
municipales ilegitimas, el desconocimiento de representantes elegidos de la
Asamblea Nacional y la falta de autonomía de las instituci0ones del
Estado. Organizar y vincular comunidades, urbanizaciones y gremios ante el
descalabro de servicios básicos de agua, electricidad y transporte. Apoyar
las causas de sectores vitales como el de trabajadores universitarios y
enfermeras hospitalarias en reconocimiento de su importancia para el país.
Tenemos la seguridad de que
una articulación de los diversos actores sociales sobre las bases de la
solidaridad, podrá generar el encuentro alrededor de los problemas comunes y
sentar condiciones para la salida del régimen. Pero, sobre todo, tenemos la
seguridad de que es sobre estas bases que puede construirse un futuro real y
sostenible para un nuevo país, posible para todos
Coordinador de Movimiento Mi
convive
robertopatino.com
24-07-18
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