Manuel Rosales 29
de marzo de 2015
Apreciados
jóvenes, novicios de mirada larga:
Les escribo para desearles éxito en la realización del “I Pleno Nacional de Jóvenes por la Democracia Social” y felicitarlos por el esfuerzo, la constancia y dedicación en el trabajo y la lucha por el futuro de Venezuela.
Desterrado por las ideas que nunca dejaré de abrazar pongo mi proa hacia ustedes, como la conciencia más alta frente a un país desmantelado por el abuso, la violencia, los silencios cómodos, los miedos, los personalísimos y las mentiras, para estimular sus sueños y esperanzas.
Desde la fundación de Un Nuevo Tiempo, junto a ustedes hemos alzado nuestra bandera de la Democracia Social, inspirados en el sueño por alcanzar una mejor y justa sociedad. Con hidalguía, ímpetu y esa valentía propia de la juventud han diseñado un espacio y organizado una buena legión de muchachas y muchachos que hoy son nuestro orgullo.
Comprometido como siempre lo he estado por exaltar los valores y brindar oportunidades, estoy convencido que ustedes son merecedores de todo el fruto del trabajo que hemos acumulado durante años, para devolverles el derecho a vivir en paz, en libertad y con la certeza de que juntos podemos construir un país digno y lleno de oportunidades para todos.
Es bueno tener claro que la esperanza no es solo soñar e imaginarse cosas buenas como algo mágico que algún día va a llegar. La esperanza es tener confianza, es transmitir el convencimiento de que vamos a lograr algo que deseamos, y lo vamos a conquistar con acciones, con estrategias, con táctica y con trabajo.
Nuestra patria y lucha la llevamos en el alma. La una es fuerte y fiel, la otra es sueño y esperanza, lo que nos permite decir con tino y sentido de grandeza, que ustedes son la inspiración para sustituir el obsoleto modelo que nos gobierna por la Democracia Social, con sus ideas de paz y prosperidad.
Es sembrar una ilusión para que brote en el corazón de ese pueblo que parece dormido, hundido y mil veces engañado. Es construir una sociedad con justicia social y oportunidades para que nuestros muchachos, nunca más, jamás, vuelvan a marcharse de nuestra tierra a buscar en otros lares, el amor y la mano que ahora se les niega.
¡Es tiempo de acrecentarse frente a las dificultades! ¡Es tiempo de ser el motor para la transformación de Venezuela! ¡Es tiempo de unidad y de reconciliación! ¡Es el tiempo de alzar vuelo con la fe, la esperanza y los sueños juveniles para la rebelión cívica y democrática!
Las puertas de nuestra casa siempre han estado, están y seguirán abiertas para el brío de la juventud. Esta casa que nos representa y donde nunca se oculta el sol, los ilumina y los protege de las sombras. Es el símbolo de la felicidad y la prosperidad de nuestras raíces y antepasados.
¡Es tiempo de luchar hasta vencer!
Les escribo para desearles éxito en la realización del “I Pleno Nacional de Jóvenes por la Democracia Social” y felicitarlos por el esfuerzo, la constancia y dedicación en el trabajo y la lucha por el futuro de Venezuela.
Desterrado por las ideas que nunca dejaré de abrazar pongo mi proa hacia ustedes, como la conciencia más alta frente a un país desmantelado por el abuso, la violencia, los silencios cómodos, los miedos, los personalísimos y las mentiras, para estimular sus sueños y esperanzas.
Desde la fundación de Un Nuevo Tiempo, junto a ustedes hemos alzado nuestra bandera de la Democracia Social, inspirados en el sueño por alcanzar una mejor y justa sociedad. Con hidalguía, ímpetu y esa valentía propia de la juventud han diseñado un espacio y organizado una buena legión de muchachas y muchachos que hoy son nuestro orgullo.
Comprometido como siempre lo he estado por exaltar los valores y brindar oportunidades, estoy convencido que ustedes son merecedores de todo el fruto del trabajo que hemos acumulado durante años, para devolverles el derecho a vivir en paz, en libertad y con la certeza de que juntos podemos construir un país digno y lleno de oportunidades para todos.
Es bueno tener claro que la esperanza no es solo soñar e imaginarse cosas buenas como algo mágico que algún día va a llegar. La esperanza es tener confianza, es transmitir el convencimiento de que vamos a lograr algo que deseamos, y lo vamos a conquistar con acciones, con estrategias, con táctica y con trabajo.
Nuestra patria y lucha la llevamos en el alma. La una es fuerte y fiel, la otra es sueño y esperanza, lo que nos permite decir con tino y sentido de grandeza, que ustedes son la inspiración para sustituir el obsoleto modelo que nos gobierna por la Democracia Social, con sus ideas de paz y prosperidad.
Es sembrar una ilusión para que brote en el corazón de ese pueblo que parece dormido, hundido y mil veces engañado. Es construir una sociedad con justicia social y oportunidades para que nuestros muchachos, nunca más, jamás, vuelvan a marcharse de nuestra tierra a buscar en otros lares, el amor y la mano que ahora se les niega.
¡Es tiempo de acrecentarse frente a las dificultades! ¡Es tiempo de ser el motor para la transformación de Venezuela! ¡Es tiempo de unidad y de reconciliación! ¡Es el tiempo de alzar vuelo con la fe, la esperanza y los sueños juveniles para la rebelión cívica y democrática!
Las puertas de nuestra casa siempre han estado, están y seguirán abiertas para el brío de la juventud. Esta casa que nos representa y donde nunca se oculta el sol, los ilumina y los protege de las sombras. Es el símbolo de la felicidad y la prosperidad de nuestras raíces y antepasados.
¡Es tiempo de luchar hasta vencer!
Manuel
Rosales Guerrero
Presidente
Fundador de Un Nuevo Tiempo
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