Por Carolina Jaimes Branger
La Enciclopedia Jurídica
define al delito de lesa majestad como “los delitos contra el rey, la reina y
el príncipe heredero de la corona en las naciones monárquicas. Se dice lesa
majestad, por haber sido lesionada, moral o materialmente, la majestad simbolizada
en el monarca o las personas de su íntima familia”.
En los países republicanos,
como la soberanía reside en el pueblo, el soberano es el pueblo. De manera que
los delitos contra el pueblo son delitos de lesa majestad, porque son de lesa
soberanía. Quienes atenten contra la seguridad del pueblo, incurren en delito
de lesa majestad, porque el soberano es el pueblo. ¿Recuerdan que Chávez lo
repetía una y otra y otra vez? La seguridad del pueblo comienza por el derecho
a la vida, consagrado en la Constitución Nacional. Pero nuestra carta magna
debe estar durmiendo el sueño de los justos, porque todo lo que vemos a nuestro
alrededor es una injusticia detrás de otra, un asesinato detrás de otro. Y
asesinados no sólo por balas, un horror consuetudinario, sino por desidia,
negligencia, corrupción.…
Cuando se habla de seguridad,
también se incluye la seguridad alimentaria. En Venezuela hubo seguridad
alimentaria. Hoy no la hay. Y 2018 será aún peor, porque no habrá comida ni
siquiera en la basura. Los responsables de que no la haya cometen delito de
lesa majestad, porque el soberano es el pueblo. Los asesinos de quienes mueren
de hambre en Venezuela tienen nombre y apellido. Y no es achacable a la
“derecha apátrida”, ni a barcos que jamás se embarcaron, ni a comida que nunca
se compró…
La seguridad también se
refiere a la salud. Tener la certeza de que si uno se enferma contará con las
instituciones de salud idóneas para ser tratado. Pero en la Venezuela de
finales de 2017 se comete delito de lesa majestad, porque el soberano es el
pueblo y el pueblo no está siendo atendido en los hospitales. Hemos visto
mujeres pariendo en el suelo, en sillas de hospitales, en la calle. Hemos visto
hasta cinco bebés apretujados en una cunita. Hemos visto pacientes muriendo por
falta de medicamentos básicos. Hemos visto niños desnutridos que han muerto de
mengua… Hemos visto ancianos que han debido pasar tranquilos sus últimos días,
desesperados buscando comida y medicinas con una pensión que no les alcanza.
Sí, nuestro pueblo es víctima
del delito de lesa majestad. Y ese delito se concreta aunque el soberano no lo
conozca, no lo entienda o no se dé cuenta. El delito de lesa majestad no está
tipificado en las leyes venezolanas y por una razón: porque nadie se imaginó
que en una república se pudiera llegar a la situación de un grupo de personas
delinquiendo en contra del pueblo soberano. Ojalá que el año que comienza hoy
sea el año de su reivindicación y el año cuando los culpables paguen por sus
crímenes.
01-01-18
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